
AMD y Samsung Electronics acaban de anunciar un acuerdo comercial por el que el primero licenciará la propiedad intelectual de la arquitectura RDNA que emplean las nuevas tarjetas gráficas AMD Radeon RX 5000 al segundo. El objetivo final es que Samsung pueda desarrollar tarjetas gráficas muy potentes, pero de muy bajo consumo, que serían instaladas en los smartphones de la marca.








