Te acabas de comprar o montar un ordenador y aún no tienes sistema operativo, cuando te diriges a la página de Microsoft para comprarlo te das cuenta del precio de este y, bueno, te replanteas el uso de otras opciones. Linux es un sistema operativo totalmente gratuito, aunque lo que no sabemos es si tenemos en él la misma facilidad para jugar que en Windows.
¿Se puede jugar a juegos en Linux?
El sistema operativo de Microsoft está en alrededor el 90% de los equipos usados en todo el mundo, mientras que Linux sólo se encuentra en el 3% de los ordenadores. Esto hace que los desarrolladores no pongan su mirada en las distribuciones de Linux a la hora de desarrollar sus juegos y se centren en el sistema operativo más utilizado del mundo.
Aunque para poder jugar en Linux tengas que hacer un poco de uso del software, es cierto que no tendrás que compilar por tu cuenta el juego por tu cuenta para que funcione en la plataforma. Lo primero que tienes que hacer es conocer si tienes configurados tus drivers de forma adecuada.
Las distribuciones de Linux, como Ubuntu, instalan los drivers automáticamente para ti – como hacer ahora Windows. Sin embargo, nos encontramos con controladores open source que, aunque pueden ser más estables que los propietarios no sacan todo el potencial de tu GPU.
Elegir bien los controladores de la GPU
Os recomendamos que os dirijáis a las web del fabricante de vuestra GPU y descarguéis desde ahí los controladores de su gráfica. Los drivers de NVIDIA dan un mejor rendimiento al jugar a los juegos en Linux que AMD, aunque esta última está consiguiendo acercarse últimamente a las cifras de NVIDIA.
Una vez has configurado correctamente los controladores, lo siguiente es comprobar que todo funciona correctamente y para ello la forma más sencilla es descargar un juego de Steam que sea apto para Linux. Aunque es cierto que la biblioteca de juegos para Linux no es muy grande puedes descubrir algún título interesante.
Utilizar la virtualización de aplicaciones
Los principales juegos no suelen estar desarrollados para Linux, por lo que puedes necesitar correr algún juego creado para Windows en tu ordenador. Para ello puedes hacer uso de una capa de compatibilidad que haga de capa intermedia entre el juego y el SO que hace que se puedan comunicar.
Aunque esto te pueda sonar como un emulador, no lo es. Un emulador se encarga de traducir constantemente las instrucciones entre una app y la CPU, mientras que las capas te permiten la comunicación directa entra la app y el SO. La capa de compatibilidad más famosa es Wine.
En la web de la app puedes encontrar ayuda y recomendaciones sobre la instalación de los principales juegos, así como los datos de rendimiento de este. Si lo que te ofrece Wine no es suficiente para ti, cuentas con Winetricks que te permite instalar las extensiones necesarias para ejecutar un juego en tu ordenador Linux.
La compatibilidad entre juego de Windows en Linux no está asegurada, pero antes de alarmarte, acude a la red ya que hay un montón de foros en los que pueden ayudarte con tu problema. Igualmente, puedes encontrar con que los juegos de Steam no inician.
Es cierto que, aunque Wine consigue ejecutar un juego, si no contamos con el software que nos suple el driver no podremos jugar a él. Jugar a un juego en Linux puede ser una tarea bastante tediosa y lo más seguro es que no consigamos el rendimiento esperado.