Desde hace ya unos años las consolas portátiles han logrado acaparar la atención de una gran cantidad de usuarios, ya sean los modelos más actuales que se pueden comprar o aquellas que permiten jugar a títulos retro es innegable que se han convertido en un dispositivo a tener en cuenta a la hora de hablar de videojuegos, pero ¿hará esto que resurjan los modelos antiguos como la PSP en pleno 2025?
La PSP es una consola que ha pasado a la historia por bastantes motivos, muchas de las personas que tuvieron una la recuerdan como un dispositivo que logró competir dentro del mercado de las consolas portátiles que se encontraba prácticamente dominado por Nintendo. El tipo de hardware que utiliza es realmente limitado lo que implica que muchas personas pueden llegar a pensar que no ofrece nada que merezca la pena en 2025, pero aun así sigue siendo una alternativa para poder jugar a títulos antiguos de forma nativa, os contamos por qué puede merecer la pena comprar una actualmente.
Una consola que puede tener muchos usos actualmente
Uno de los aspectos que tiene el hardware está en las capacidades que ofrece, obviamente los dispositivos electrónicos que tienen ya unos años cuentan con una potencia muy inferior a la que tienen los actuales, algo que se traduce en que obviamente no se puede jugar a títulos actuales en ellos. Pero a su vez esto también es una ventaja debido a que obviamente implica que los juegos que se lanzaron en dicho hardware de la época funcionan perfectamente y son relativamente sencillos de jugar gracias a los diversos programas que hay en internet que lo habilitan.
Juegos exclusivos o que actualmente son complicados de emular en otras plataformas por cómo están diseñados como los que tenía la PS2 o la PS1 llegaron con una compatibilidad prácticamente nativa a la PSP, además de que la comunidad no ha dejado de lado esta consola. Hay quienes a día de hoy siguen haciendo ports de títulos que no se lanzaron en este dispositivo, también hay quienes directamente ofrecen aplicaciones para poder jugar a todos los que se lanzaron en la consola y que a día de hoy pueden considerarse casi «Lost media» ya que no hay forma de encontrarlos por ninguna parte.
El hecho de no tener que invertir demasiado dinero para hacerse con una también es uno de los puntos positivos que tiene, mientras que sus propias características la convierten en una verdadera consola portátil a diferencia de los modelos que se han lanzado últimamente y que ocupan mucho espacio. Obviamente tanto la PSP tradicional como la Vita dejaron de tener soporte hace muchos años, lo que implica que en caso de que haya algún fallo la compañía no puede ayudar al usuario, pero hay otras personas que a día de hoy continúan tratando de ofrecer la capacidad de que cualquiera pueda jugar y disfrutar de esta consola.
Al final la comunidad es muchas veces la que decide cuando es el fin de un dispositivo, es algo que hemos visto con otras consolas como la 3DS, y es que la ventaja que tienen estas versiones portátiles sobre los modelos de sobremesa es lo sencillo que resulta modificarlas.