Cómo hacer overclock a tu tarjeta gráfica con NZXT CAM

Si hace un tiempo ya hicimos un tutorial sobre cómo hacer overclock a la tarjeta gráfica empleando MSI Afterburner, hoy os enseñaremos cómo hacer overclock a la gráfica empleando el software gratuito NZXT CAM. Este software de NZXT es muy sencillo de emplear pero, a la vez, es muy completo en cuanto a los datos que nos va a proporcionar.
Como siempre hacemos, antes de meternos en tarea, queremos dejar claro que hacer overclock más allá de las frecuencias establecidas por el fabricante de la tarjeta gráfica puede hacer que la tarjeta se vuelva inestable, se sobrecaliente e, incluso, acabe dañada. El overclock también anula la garantía de los componentes y sí, pueden perfectamente comprobar si has estado haciendo overclock con la tarjeta gráfica o no. Por consiguiente, cualquier tipo de overclock que intentéis con vuestra tarjeta gráfica será todo bajo vuestra responsabilidad y, tanto Hard Zone como el que escribe estas líneas, se considerará exento de culpas en caso de surgir cualquier problema.
Características del software NZXT CAM
El software NZXT CAM es muy sencillo de utilizar, pero, a la vez, muy completo en cuanto a opciones de monitorización de componentes. Para emplearlo, lo primer que deberéis hacer es descargarlo e instalarlo en vuestro equipo. Una vez hecho este aspecto, el software os pedirá que os registréis para que os puedan enviar noticias de posibles actualizaciones de este programa.
Una vez hecho todo esto, la primera pantalla que nos interesa para el overclock es esta:
Como podéis ver, permite ver todas las constantes del sistema de un solo vistazo, incluyendo las frecuencias, la carga de procesos y, más importante, las temperaturas del sistema.
Para hacer el overclock de la tarjeta gráfica, deberemos de ir a la penúltima pestaña de la izquierda.
Como veis, en esta ventana los cambios los vamos a hacer a base de tantos por ciento o por cifras enteras.
Veamos uno por uno qué hace cada aspecto:
- En la parte superior derecha hay un interruptor que hay que activar para que podamos realizar modificaciones en las frecuencias de la GPU y la memoria de la gráfica.
- Power Limit: esta barra permite indicarle al programa hasta dónde queremos que la tarjeta gráfica pueda consumir. En nuestro caso, tenemos una NVIDIA GeForce GTX 980, así que el límite de consumo que viene prefijado es de un 20% extra (este límite puede ser diferente con diferentes modelos de tarjetas gráficas). Esto significa que el máximo consumo que podrá tener esta tarjeta es de 225 W.
- Core Clock: nos muestra la frecuencia del núcleo de la GPU. El +300 es lo máximo que nos va a permitir el programa subir la frecuencia de la GPU. Como ya habíamos comentado, la frecuencia se puede subir escribiendo un número en el recuadro de la derecha o empleando la barra de desplazamiento.
- Memory Clock: exactamente lo mismo que en Core Clock es aplicable a este apartado.
- Profile: este apartado permite variar la curva de velocidad del ventilador de la tarjeta gráfica, empleando perfiles predefinidos o creando cada uno de nosotros el perfil de ventilador que más se adapte a nuestras necesidades.
- Cancel: como su nombre indica, nos permite cancelar los últimos cambios que hayamos hecho en la gráfica que no estén salvados.
- Reset: deshace todos los cambios que hayamos hecho en la gráfica, devolviéndola a las frecuencias originales de funcionamiento.
- Apply: es el botón que deberemos presionar para que se apliquen los cambios que hayamos hecho.
Algo que no incluye el software NZXT CAM es un programa para comprobar la estabilidad del overclock. A este respecto, nosotros os recomendamos el MSI Kombustor o bien el 3DMark. Con estos programas podréis comprobar si salen defectos en los píxeles de la imagen o el equipo se cuelga al pasar el test, cosa que es signo inequívoco que el overclock es no es estable.
Cómo hacer el overclock con NZXT CAM
Para empezar, y como deberemos de hacer siempre antes de comenzar un overclock, deberemos de tomar unas cuantas notas, relativas a las frecuencias, tanto de la GPU como de la RAM. El overclock lo haremos por partes: primero subiremos la frecuencia de la GPU, ya sea mediante la barra de desplazamiento o bien poniendo las cifras directamente en el recuadro blanco. Cuando encontremos las frecuencias más altas que queramos emplear, pasaremos a hacer el overclock de la VRAM.
Comenzaremos aplicando subidas grandes de frecuencia, de 50 MHz y realizando una prueba de estabilidad de media hora. Si no hay ningún error, volveremos a subir otros 50 MHz la frecuencia de la GPU. Así seguiremos hasta que la gráfica comience a tener errores en el renderizado. En este punto, podemos optar por elevar el límite de potencia un poco y volver a probar si los errores de render continúan o desaparecen. Si desaparecen, la siguiente vez que subáis la frecuencia de la GPU, sed más comedidos y subidla tan solo 20 MHz. Volved a probar el programa de render y comprobad si hay errores o no.
Llegará un punto en que la gráfica dará constantemente errores de render (denominados artifacts). En ese momento, os aconsejamos bajar 10 MHz la frecuencia de la GPU.
Hacerle overclock a la VRAM de la gráfica es el mismo proceso de prueba y error, hasta que la gráfica no deje de generar siempre errores de renderizado.
Algo que deberemos de vigilar muy atentamente será la temperatura que alcance la tarjeta gráfica, más todavía si estamos en verano, dado que todos sabemos que los overclocks generan más calor para la tarjeta gráfica del que es habitual en ella. Más todavía si jugamos con los límites de consumo de ella, para lograr mayores frecuencias
Una cosa que echamos en falta de este software es que no hay ninguna manera de guardar diferentes perfiles de overclock, cada uno con diferentes frecuencias para la GPU y la VRAM, de manera que os tocará recurrir a apuntaros cada cambio que hagáis de las frecuencias, no vaya a ser que testando un overclock, el equipo se cuelgue y perdáis todos los datos que habíais utilizado hasta ese momento.
En cualquier caso, como software para overclock, el NZXT CAM nos parece un software de uso sencillo y funcional, que puede solventarle perfectamente la papeleta a los usuarios que no van buscando romper récords de overclock con él.