NVIDIA ya pasa del Ray Tracing, tiene una tecnología mucho mejor en marcha
El concepto Path Tracing lo vais a oír mucho en relación con NVIDIA a partir de las próximas semanas, en especial una vez se célebre la conferencia de desarrolladores de videojuegos, la GDC, en su evento anual. Las malas lenguas hablan de que mostrarán la tecnología por primera vez con Cyberpunk. No obstante, no será el único juego con el que lo veamos.
En los últimos años, hemos visto versiones de clásicos de los 90 renderizados usando la técnica del Path Tracing, como lo fue Quake 2 RTX. Sin embargo, la idea de NVIDIA es utilizar una versión híbrida del mismo que le dé aún más ventaja respecto a su rival que se podrá aplicar en los juegos.
¿Por qué NVIDIA apuesta por el Path Tracing?
Hemos de partir que el Path Tracing es una variante del trazado de rayos, por lo que no se trata de un abandono completo de la idea, sino más bien de un intento de atar los juegos de PC a sus tecnologías. Especialmente a la inteligencia artificial, que es hacia donde han evolucionado las tarjetas gráficas de la compañía en el último lustro, así como el resto de sus esfuerzos. Pero es que además tienen una motivación adicional para realizar esta apuesta y es el hecho que AMD, su rival en el mercado, no le ha dado importancia.
Pero, ¿qué es el Path Tracing?
Si somos puristas, el Path Tracing es una versión avanzada del Ray Tracing que permite generar escenas con mayor cantidad de detalle. Hemos de partir del hecho que como trazado de rayos nos podemos referir a varias técnicas distintas como ahora:
- El trazado de rayos en su definición original, el llamado Whitted Ray Tracing; sin embargo, no es del todo preciso cuando hablamos de ciertos efectos de iluminación avanzados.
- El renderizado híbrido donde se utilizan algoritmos de Ray Tracing para la iluminación indirecta dinámica en los juegos. Es decir, todo se renderiza de forma tradicional, sin trazado de rayos, excepto ciertos puntos concretos de la escena.
- Algoritmos de trazado de rayos avanzados como el Path Tracing, Photon Mapping o Montecarlo. Sin embargo, de todos ellos el que tiene todos los números de usarse en juegos es el primero.
Ahora bien, el Path Tracing tiene el problema que requiere que cada píxel de la escena se calcule no decenas, sino cientos de veces para poder obtener una imagen lo suficientemente nítida, con poco ruido y nada granulada. Esto hace que se requiera una gran potencia de cálculo para poder generar cada imagen y no era lo suficientemente buena para videojuegos, al menos hasta ahora.
¿Por qué es la apuesta de NVIDIA de cara al futuro?
Una forma de acelerar el Path Tracing es con lo que llamamos Denoising, el cual consiste en usar la IA y, por tanto, los núcleos Tensor con tal de reducir la cantidad de muestras de forma considerable y haciendo que se requiera un hardware mucho menos potente. El caso es que esto ya lo vimos en el NVIDIA Optix, pero la evolución en potencia de las tarjetas gráficas permite aplicarlo a tiempo real. Algo que ya os adelantamos hace casi dos años.
Por lo que la motivación de NVIDIA es clara en este caso, en primer lugar se trata de un espacio al que no puede ir la competencia, en segundo lugar es una forma de justificar por parte de los usuarios la compra de sus RTX 40 por encima de los modelos de las anteriores generaciones. En todo caso habrá que ver la forma con la que los desarrolladores adoptan esta tecnología en los juegos. La única forma en que lo podrían hacer en masa sería si se obtuviesen las ventajas del trazado de rayos, pero con una tasa de frames por segundo mucho más alta.
Y no, no se trata de algo que hayan inventado ellos, sin ir más lejos, Pixar lleva tiempo usándolo en sus películas. Eso sí, no esperéis la calidad visual de las mismas en vuestros juegos. Esto va sobre sacar más FPS en los juegos con una variante del trazado de rayos.