Una de las claves para el avance de la tecnología es la libre competencia, más que nada por el hecho que fuerza a las empresas a ser mejores que otras en precio y prestaciones. Tan pronto como se llega al monopolio en un mercado, nos encontramos con que los nuevos productos son cada vez menos apasionantes, los precios suben, el desinterés general aumenta y todo se estanca. ¿Es bueno cortarles el paso a los fabricantes de memorias de China?
No es ningún secreto que China y Estados Unidos se encuentran en una guerra comercial. ¿La respuesta de esta última? Limitar el acceso a la tecnología, aranceles adicionales e incluso prohibiciones de compraventa de ciertas marcas del país más poblado del mundo. Todo ello con tal de proteger una de las industrias más fructíferas económicamente y que más relación tienen con defensa. Sin embargo, los usuarios de a pie de un pequeño país llamado España no nos debería importar esos temas. Excepto, claro está, cuando hemos de comprar componentes para nuestro ordenador.
RAM y memorias flash, el Caballo de Troya de China
De acuerdo, marcas como NVIDIA, Intel y AMD están muy por encima en lo que a tecnología de procesadores se refiere en comparación con las grandes marcas chinas. Sin embargo, hay otros componentes dentro del PC que son igual de importantes y que no requieren de procesos de fabricación tan avanzados. Nos estamos refiriendo a las memorias, ya sean volátiles o RAM o no volátiles de cara al almacenamiento.
No olvidemos que por ejemplo YMTC que no es una empresa surcoreana, tiene la memoria NAND Flash para SSD y tarjetas de memoria más densa del mercado, esto es mayor almacenamiento que la competencia. Sin ir más lejos, Apple ha empezado a usar en sus ordenadores y teléfonos móviles la memoria flash de este fabricante chino, lo que les ha llevado a recibir un toque de atención por parte de las autoridades estadounidenses. El caso es que China está empezando a ser altamente competente en chips de memoria y todo apunta a que su entrada masiva en el mercado de componentes de PC se hará en ese sentido.
Debido a que las memorias RAM han de interactuar con el procesador central, esto significa darles acceso a las empresas chinas a un acuerdo con las grandes empresas estadounidenses. Lo cual no es del agrado de la administración estadounidense, la cual prefiere mantener las relaciones con empresas como Micron, Samsung, SK Hynix y otras empresas surcoreanas. Un país que a nivel político es casi una colonia estadounidense.
¿Es bueno tener menos opciones para el usuario final?
La mejor manera de entrar en un mercado altamente competido con un producto igual o similar es hacerlo en precio, y si hay algo que llevan años haciendo los fabricantes de memorias es pactar precios y disponibilidad de la RAM y la NAND Flash. Por lo que la entrada de China en el mercado de memorias puede suponer no solo un aumento de la oferta, sino una bajada del precio general de estos componentes y hacerlos económicamente más accesibles. Es decir, nos saldrán mucho más baratos.
Por otro lado, a no ser que hablemos de memoria con procesador interno, lo cual no se usa en ordenadores domésticos. La memoria RAM no es un problema de cara al espionaje de datos e información, sin embargo, el hecho de que un SSD necesite una controladora Flash para manejarla y que esta sea en realidad un procesador con su memoria RAM es lo que hace que los estadounidenses no se fíen de dichos dispositivos. Sin embargo, nosotros creemos que en unos pocos años veremos dicho componente integrado en el procesador del sistema y no como una pieza aparte.
En todo caso, para los grandes fabricantes de chips y dado que TSMC ni Intel fabrican memoria, el hecho de tener más opciones supone poder conseguir contratos para sus componentes, como por ejemplo las tarjetas gráficas de forma más beneficiosa. ¿Veremos en las tiendas las memorias de China y con ello una bajada de precio del almacenamiento en los SSD? ¿Aumentará la cantidad media de RAM en los sistemas?
El precio de los portátiles seguirá en lo alto
Otra consecuencia del bloqueo tiene que ver con el precio de los portátiles, al fin y al cabo, pese a lo tensas que son las relaciones políticas entre ambas Chinas, la realidad es que empresas como ASUS, GIGABYTE y otras marcas colaboran muy estrechamente con fabricantes chinos y no sería de extrañar que en portátiles y llegado el momento con tal de conseguir piezas más baratas en forma de memorias para las RAM del sistema y los SSD acaben comprando a los proveedores chinos. En especial tenemos casos como Lenovo, la cual es directamente una empresa China.
En todo caso, los costes de la RAM y la memoria flash llevan tiempo en medio de un mercado artificialmente controlado y con márgenes y disponibilidad muy alta, suficientes, como para que un tercero reviente el mercado y China no va a ser una monjita de la caridad en ese aspecto. Es decir, van a ir a degüello contra sus rivales surcoreanos. Claro está si Estados Unidos no hace todo lo posible para proteger a sus socios.