Parece que en Toshiba no se cansan de meterse en embrollos, pues ahora han decidido denunciar a Western Digital ante las cortes de Tokio, Japón, alegando competencia desleal, daños permanentes a su imagen, y requiriendo un pago de 120.000 millones de Yen (unos 935 millones de euros) como compensación.
Según reza la demanda interpuesta por Toshiba contra WD el día 2 de Junio ante la corte de Tokio, WD ha estado interfiriendo en los intereses de la compañía en cuanto a la venta de TMC con el único ánimo de perjudicarles, no con la intención de comprar la compañía, algo que ha perjudicado a Toshiba tanto económicamente como a su imagen como gran compañía. Así mismo, en la demanda hacen mención a la asociación entre Toshiba y SanDisk (propiedad de WD), alegando que WD ha exagerado su derecho de consentimiento y han lanzado varios comunicados públicos y privados que manchan la imagen de la empresa y que tienen como única finalidad el interferir en el proceso de venta, dañando a Toshiba y TMC.
Por lo mencionado en el párrafo anterior, Toshiba y TMC acusan a WD de haber obtenido de manera ilícita secretos de comercio de la compañía, moviendo empleados que tenían acceso a información confidencial (dado el acuerdo entre Toshiba y SanDisk) desde SanDisk a WD. La compañía considera por lo tanto que las acciones de WD están dañándoles gravemente, que violan el artículo 2(1) (iv), (vii), (viii), (xv)) de la ley de prevención de competencia desleal de Japón, y que además violan el artículo 709 del Código Civil por robo de secretos industriales.
La demanda de Toshiba contra Western Digital
Así pues, la demanda de la compañía nipona no solo tiene que ver con competencia desleal, pues según ellos Western Digital está interfiriendo en la venta de TMC con el objetivo de perjudicarles económicamente, sino que además están robando información industrial aprovechándose del acuerdo de trabajo conjunto entre Toshiba y SanDisk moviendo empleados con acceso a información confidencial de ésta última a la empresa raíz. Por esto último, Toshiba ha emitido un comunicado alegando que no tienen otra opción mas que bloquear de manera preventiva todo el acceso a información confidencial a todos los empleados de SanDisk que trabajan con ellos.
Veremos en qué queda la cosa al final, que ya está en manos de los tribunales japoneses. Lo que Toshiba pide es una compensación económica de unos 935 millones de euros, pero la cosa puede llegar a ser bastante más grave que eso si le dan la razón a la compañía denunciante.