A primeros de este mismo mes ya os contamos que AMD estaba en disposición de entrar en el mercado del almacenamiento para PC, una disposición en la que la compañía llevaba trabajando desde el año 2012. Hoy por fin llega el anuncio oficial de los nuevos SSDs AMD Radeon R7, y como no podía ser de otra manera os traemos nuestro particular análisis de una de estas nuevas unidades de estado sólido, concretamente del modelo de 240 Gb.
La serie AMD Radeon R7 SSD está compuesta en principio por tres modelos (120, 240 y 480 GB), y están fabricados por OCZ, haciendo uso de su famosa controladora Barefoot 3. Dado que OCZ ahora pertenece a Toshiba, es lógico que en estos SSDs utilicen los nuevos chips de memoria flash MLC de la marca fabricados con un proceso de 19 nanómetros (A19nm). De momento todos los modelos cuentan con factor de forma de 2,5 pulgadas e interfaz SATA 3, y no hay en el horizonte previsión de lanzar nuevos modelos en otros formatos (M.2).
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS.
Como podéis ver en las características técnicas, estos SSDs de AMD tienen un rendimiento teórico en la línea de los SSDs del mercado de más alta gama, si bien es cierto que el modelo de 120 GB tiene unas especificaciones inferiores a los otros dos modelos, y a su vez el modelo de 240 GB es ligeramente inferior al de 480 GB. Como comentamos antes, nosotros vamos a analizar el modelo intermedio, el de 240 GB.
AMD ha creado una comparativa de datos teóricos con respecto a otros SSDs del mercado y que podéis ver a continuación:
Se puede apreciar que AMD destaca que sus SSDs tienen una esperanza de vida sensiblemente superior a la del resto de fabricantes (exceptuando los Extreme Pro de Sandisk), y por ello dan 4 años de garantía. Adicionalmente, junto con el SSD se incluye un adaptador para bahías de 3,5 pulgadas y el software de clonado Acronis TrueImage HD.
ANÁLISIS EXTERNO.
El AMD Radeon R7 SSD viene embalado en una caja de cartón blando en cuya cara principal podemos ver una foto del dispositivo adornada con motivos de la marca. Solo se indica el nombre y la capacidad del dispositivo aquí, dejando para la cara traasera sus especificaciones técnicas. Ya en esta zona podemos ver el logo de OCZ.



Abrimos la caja y encontramos el SSD protegido por una carcasa de plástico transparente, junto a la cual se encuentran los accesorios. Como es habitual, primero vamos a ver estos, y comenzamos con los panfletos, entre los que se incluyen un manual de usuario, información sobre la garantía, y unas instrucciones junto con una clave de descarga para el software Acronis TrueImage HD (lógicamente hemos emborronado el número de serie).
También se incluye un bracket metálico para instalar el SSD en una bahía de 3,5 pulgadas. Dado que el SSD tiene un grosor de solo 7 mm habría estado bien que AMD incluyera también un accesorio para instalarlo en portátiles que requieren dispositivos de 2,5″ pero con un grosor de 9 mm.
Para terminar con los accesorios, AMD incluye una bolsita con ocho tornillos, cuatro para el SSD y cuatro para el adaptador.
Finalmente, aquí tenéis el AMD Radeon R7 SSD 240 Gb. Hay muy poco que ver en cuanto al aspecto externo de un SSD, pero debemos destacar que la carcasa exterior es de aluminio para facilitar la disipación de calor. También cabe destacar que en la parte inferior del dispositivo tenemos una etiqueta que nos indica el número de serie del dispositivo, y resulta curioso que en esta zona no aparece el nombre de AMD por ninguna parte, solo pone OCZ Radeon R7 SATA III Solid State Drive 240 GB.




ANÁLISIS INTERNO.
Abrimos el dispositivo para ver sus entrañas, y lo que más nos llama la atención nada más hacerlo es que OCZ ha dispuesto un pad de goma térmica para que el controlador Barefoot 3 haga contacto con la carcasa de aluminio. Lógicamente este es el chip que más se calentará del dispositivo, si bien es cierto que los SSDs no se calientan casi nada.
Detalle de los chips de memoria Toshiba A19nm.
En la siguiente imagen podéis ver un chip con el logo de Micron Technology. Éste se encarga de hacer una redundancia de datos que protege todo el conjunto contra fallos de bloques.
Por último, la controladora Indilinx Barefoot 3 (DX500M00-B0).
TESTEO.
Para poner a prueba este AMD Radeon R7 SSD 240 GB lo hemos conectado a una placa base ASUS M5A99X-EVO con BIOS v.1708, empleando un puerto SATA 6 Gbps enlazado a la controladora AMD SB950, configurado en modo AHCI en la BIOS. El sistema operativo empleado ha sido Windows 7 Ultimate SP1 con todas las actualizaciones instaladas.
Como es habitual, nuestro banco de pruebas no es un sistema ideal, sino un PC en el que este SSD mostrará un rendimiento igual a que si lo conectarais vosotros en vuestro propio ordenador.
Vamos primero a ver qué información sobre el SSD nos arroja CrystalDisk Info.
Aquí vemos varios datos interesantes, como que el SSD no tiene soporte para APM (Advanced Power Management), es decir, que siempre funciona a máximo rendimiento a expensas del consumo, y que no cuenta con sensor de temperatura.
Vamos con las pruebas.
HD Tune.
HD Tune realiza una prueba de transferencia pura y dura (es decir, que no es una prueba de lectura o escritura), y arroja un rendimiento de 260 MB/s de media, ciertamente mucho más bajo del rendimiento que esperábamos viendo las características técnicas del SSD.
En la siguiente gráfica podéis ver este rendimiento comparado con algunos SSDs de los que han pasado por nuestras manos:
CrystalDisk Mark
Aquí encontramos otro datos interesante, y es que este SSD nos da una tasa de escritura muy superior a la de lectura. Esta última se aleja bastante de los 550 MB/s teóricos que tiene, y sin embargo la de escritura sí que se acerca bastante a los 530 MB/s que dicen las especificaciones. De hecho, en la siguiente gráfica vais a poder ver cómo la velocidad de escritura de este AMD Radeon R7 SSD está casi a la par con el poderoso Corsair Neutron GTX, bastante más caro.
Aida64 Disk Benchmark (Read test suite).
En una prueba intensa de lectura como la de Aida64, el SSD sí que nos da unos valores de lectura más aproximados a los teóricos, en torno a 500 MB/s.
AS SSD Benchmark.
En IOPS:
Y comparado con el resto de SSDs:
De nuevo nos encontramos con un rendimiento bastante inferior al que debería tener teóricamente, pero en esta ocasión sí que se muestra unas tasas bastante decentes en comparación con otros dispositivos.
AS SSD File Copy Benchmark.
Un dato curioso en esta prueba. Si comparamos este Radeon R7 SSD con un Intel SSD 730, dispositivo que Intel vende como ideal para Gaming, encontramos que en esta prueba precisamente el SSD de AMD es más rápido que el de Intel: 6.92 segundos frente a 7.64 s del Intel.
AS SSD Compression Benchmark.
Esta es una de las pruebas que mejor definen el rendimiento real de un SSD con respecto a los archivos no comprimibles, y el Radeon R7 SSD ha mostrado un rendimiento sobresaliente. Básicamente este es el tipo de archivos que nos encontraremos a la hora de manejar juegos.
ATTO Disk Benchmark.
ATTO nos vuelve a mostrar un rendimiento de escritura superior al de lectura, dato curioso, no recuerdo ningún SSD que haya pasado por nuestras manos con mejor rendimiento de escritura que de lectura. En cualquier caso si os fijáis en el rendimiento de 4096 y 8192 KB, tenemos en torno a 511 MB/s de escritura y 480 MB/s de lectura, ahora sí datos excelentes de rendimiento.
CONCLUSIÓN.
Parece que AMD ha acertado al asociarse con Toshiba y OCZ para lanzar al mercado su primera línea de dispositivos de estado sólido. Este AMD Radeon R7 SSD de 240 GB ha mostrado un rendimiento bastante decente en las pruebas, especialmente en escritura, cosa curiosa puesto que es donde más flojean todos los SSDs generalmente, y sin embargo es el punto fuerte de éste sin lugar a dudas.
Además, y aunque esto es algo que no podemos comprobar nosotros mismos y tenemos que creer en la palabra del fabricante, estos SSDs son los «Reyes de la durabilidad», con una tasa de 30 GB escritos diarios durante 4 años de esperanza de vida, bastante más elevada que la de la competencia. Otro de los puntos fuertes será su precio, que si bien no sabemos todavía qué conversión harán a Euros, el modelo de 120 GB cuesta 75 dólares, 120 dólares el modelo de 240 GB y finalmente 240 dólares el de 480 GB.
PROS:
- Buen rendimiento, especialmente en escritura, ideal para aplicaciones Gaming.
- Formato slim.
- Gran esperanza de vida.
- Carcasa de aluminio que ayuda a la disipación de calor de los componentes internos.
- Relación calidad / precio.
CONTRAS:
- Flojea en cuanto al rendimiento de lectura.
- No incluye adaptador para portátiles con bahías para discos de 9 mm de grosor.
Por ello, este AMD Radeon R7 SSD de 240 GB se hace merecedor de nuestro galardón de Platino y de nuestra recomendación por su buena relación calidad / precio y por su rendimiento, tomando en consideración especialmente el de escritura.


