Después de muchos meses en los que NVIDIA ha dominado el mercado de las «novedades» en tarjetas gráficas en solitario, por fin podemos mostraros la nueva generación de tarjetas gráficas de AMD, y lo hacemos con el unboxing de la AMD Radeon RX 7900 XT que ya tenemos en nuestras manos. ¿Quieres ver de cerca cómo es y lo que podemos esperar de ella? Pues entonces sigue leyendo, que esto te interesa.
En este momento, AMD no nos permite hablar sobre especificaciones o datos de rendimiento de esta tarjeta gráfica, pero resulta obvio que ya tenemos una en nuestras manos y que la estamos probando, así que muy pronto podremos mostraros en nuestro habitual análisis cómo funciona a la hora de la verdad. Pero, para ir abriendo boca, lo que sí podemos hacer es enseñaros cómo es esta tarjeta gráfica, así que vamos a ello. Eso sí, os recordamos que AMD ya presentó en sociedad las Radeon RX 7000 Series hace unos días, así que algunas de sus características ya son públicas y las podéis consultar sin problema.
La AMD Radeon RX 7900 XT posa para la cámara
En este caso, AMD no nos ha enviado una tarjeta gráfica de un ensamblador como suele hacer frecuentemente, sino que la gráfica es BBA (Built By AMD), el equivalente a las Founders Edition de la competencia. Viene embalada en una caja negra de cartón duro en cuya parte exterior ya podemos ver una imagen de la tarjeta gráfica, al menos en parte, donde sí que se pueden ver los dos conectores PCIe de 8 pines de alimentación que necesitaremos.
Viendo la parte trasera ya podéis adivinar que la caja se abre en forma de cofre; en esta zona, podemos ver cómo AMD habla de sus drivers y su estabilidad y rendimiento, pero no encontramos más información importante.
En el interior, nos encontramos la tarjeta gráfica embutida en una estructura protectora, y un mensaje en la parte superior nos da la bienvenida al «equipo rojo».
Estamos ante una tarjeta gráfica bastante grande y pesada (aunque desde ya os podemos confirmar que es bastante más pequeña y ligera que las RTX 40 de NVIDIA, pero BASTANTE), totalmente de color negro y dominada por tres grandes ventiladores que girarán todos en la misma dirección.
En la zona inferior, además del conector PCI-Express, podemos ver que el disipador de láminas de aluminio que ha utilizado AMD en esta gráfica no está dividido en dos secciones como suele ser habitual, sino que en este caso es un bloque compacto y casi homogéneo: solo se reduce un poco su tamaño en la parte trasera para hacer sitio al conector de los ventiladores. Esto, como ya supondréis los duchos en gráficas de AMD, significa que posiblemente utilice tecnología de cámara de vapor para la refrigeración. También podemos ver aquí que el PCB llega prácticamente hasta el final de su longitud total.
Los ventiladores son relativamente grandes y cuenta con tres unidades, todos ellos girando en la misma dirección. Tienen 9 aspas pequeñas pero bastante inclinadas para generar una gran presión estática y así fomentar una buena disipación de calor.
En esta zona final, además del conector del ventilador también vemos que hay un conector vacío de dos pines. Posiblemente sea para que los ensambladores lo puedan utilizar en sus modelos personalizados.
En la parte trasera no encontramos nada destacable, salvo cuatro perforaciones que con toda probabilidad serán para anclar un soporte como los que ya hemos visto en otras tarjetas gráficas de gran longitud y peso, y que sirve para anclar la gráfica a los tornillos de la placa base y así evitar que su peso pueda provocar daños.
En la parte superior volvemos a ver el enorme disipador homogéneo de la gráfica, en este caso con tres de sus láminas de aluminio negras pintadas en rojo para darle un toque de color. También aquí podemos ver, como adelantábamos viendo el embalaje, los dos conectores PCIe de 8 pines cada uno y, en este caso, también el logo de Radeon que seguramente se iluminará con la gráfica conectada.
Aquí podemos ver los conectores de cerca. En este caso, AMD sigue utilizando los conectores PCIe estándar de las fuentes de alimentación, no es necesario el uso de cables especiales ni nada que no tengamos ya en el PC. Por el conteo de pines, si cada pin proporciona 12,5W y sumamos lo que da el zócalo PCIe, podemos adivinar que su consumo máximo será de 275W.
Vamos a la zona exterior, donde tenemos las salidas de vídeo, en este caso consistentes en dos DisplayPort, un HDMI y un USB-C. Recordemos que por algún motivo, NVIDIA ha decidido prescindir de USB-C en las últimas dos generaciones de gráficas, algo que no logramos comprender, así que nos alegra ver que AMD sí que lo incluye. Por cierto, que al contrario de lo que es habitual, no hay una rejilla de ventilación aquí sino que AMD ha serigrafiado la información de la gráfica en esta zona. Por cierto, que este es el primer lugar en el que AMD nos indica que estamos ante una Radeon RX 7900 XT, ya que en el embalaje no lo decía.
La parte trasera de esta Radeon RX 7900 XT está completamente dominada por un backplate de aluminio pintado de negro y adornado con diversas formas y unos acentos en rojo. Con solo quitar cuatro tornillos podríamos retirarlo para ver el PCB y el bracket de sujeción del disipador a la GPU.
¿Cómo de grande es esta tarjeta gráfica?
Uno de los grandes inconvenientes de las tarjetas gráficas TOP de esta generación es, sin duda, su tamaño, y es algo que hemos visto cuando en esta web hemos analizado tanto las RTX 4090 como las RTX 4080, gráficas con las que por cierto competirá en términos de rendimiento -al menos en teoría- esta Radeon RX 7900 XT de AMD. Así pues, vamos a ver su tamaño físico medido.
Esta RX 7900 XT de AMD mide tan solo 27 centímetros de largo, algo que contrasta y mucho con los más de 35 cm de las RTX 4090/80 de la competencia. También es interesante ver que solo ocupa 2 slots PCI con sus 51,4 mm de grosor, algo que de nuevo contrasta con los tres slots y 75,1 mm de la competencia. En cuanto a la altura, tenemos 98,4 mm frente a 132,8 mm de la contrapartida de NVIDIA.
Todas estas dimensiones lo que vienen a decirnos es que AMD ha creado una tarjeta gráfica que ya de inicio es más barata que las RTX 4080 y RTX 4090 de NVIDIA, que (de nuevo sobre el papel) consume bastante menos, que no necesita cables de alimentación especiales, y que tiene un tamaño bastante estándar, ocupando solo dos zócalos PCI y con 27 cm de largo.
A primera vista, todo son ventajas y esta RX 7900 XT tiene muy pero que muy buena pinta pero, ¿qué tal funcionará a la hora de la verdad? ¿Podrá competir de verdad con las RTX 40 de NVIDIA? Esto es algo para lo que tendremos que esperar un poco más para salir de dudas, pero en breve lo haremos en nuestro propio análisis que publicaremos en cuanto AMD levante el embargo sobre ello. Permaneced atentos.
