Siempre que vamos a adquirir un nuevo ordenador, queremos tener la mejor solución posible dentro de nuestro presupuesto. Realizar la combinación de componentes perfecta no siempre es sencillo, por la variedad de oferta. Nosotros te vamos a facilitar el trabajo explicándote qué debes tener en cuenta antes de comprar un procesador AMD Ryzen.
Lo más importante que debes saber sobre las soluciones de AMD es que se dividen en dos grandes grupos. El primero, son las APU Ryzen, unos procesadores que incluyen una pequeña tarjeta gráfica integrada. Por otro lado, tenemos los Ryzen «normales» que carecen de gráficos integrados, y que por lo tanto necesitarás conjuntar con una tarjeta gráfica dedicada.
Sin más dilación, vamos a explicarte lo que necesitas saber para elegir correctamente.
Qué generación AMD Ryzen elegir
Igual que otros fabricantes, periódicamente AMD lanza una nueva generación de procesadores. Estos nuevos procesadores tienen cambios de diseño internos, cambios en el proceso de fabricación e integran nuevas tecnologías. Un ejemplo pueden ser los Ryzen 7000, que cambian el socket al AM5 e integran soporte para memoria RAM DDR5 y PCIe 5.0.
Lo interesante de AMD es que tarda mucho en descatalogar una familia de procesadores. Es más, en ocasiones no la descataloga del todo y opta por lanzar, incluso, nuevos procesadores. Un ejemplo sería el Ryzen 3 1200 AF, un procesador que se incluye dentro de la primera generación Ryzen, pero que tiene un proceso diferente de fabricación a dicha generación.
Actualmente, aún podemos encontrar en el mercado procesadores AMD Ryzen 1000 (1a generación) y Ryzen 2000 (2a Generación).
Sin duda, una de las generaciones más interesantes que podemos adquirir a precio de risa son los Ryzen 3000. Estas CPU están muy bien valoradas por parte de los usuarios y se siguen vendiendo muy bien.
Pero sin duda, la familia de procesadores que más venden actualmente son los AMD Ryzen 5000. Esta familia está muy bien considerada y podemos decir, que es la «culminación» de un camino. Si bien AMD ha seguido lanzando nuevas gamas de procesadores, estos son los mejores.
Recientemente, han llegado los Ryzen 7000 que introducen muchos cambios. Ya los hemos comentado al principio, cambia el socket e introducen soporte para nuevas tecnologías. Debido a su reciente lanzamiento, tienen precios aún algo elevados.
Y, ¿qué gama es mejor elegir?
Todas las generaciones de procesadores Ryzen se dividen en cinco «sabores» o gamas. La más sencilla serían los Ryzen 3; luego, tenemos las gamas intermedias Ryzen 5 y Ryzen 7; y finalmente, los Ryzen 9. Además, con cada generación se lanzan nuevas APU que, si bien se integran en las otras gamas, podríamos decir que son una gama «a parte».
Es normal en este punto que te preguntes que gama de procesadores es la perfecta para mí. Pues bien, vamos a explicártelo de la manera más sencilla posible:
- APU: procesadores con gráficos integrados pensados para ofimática, multimedia y gaming casual. Estos procesadores suelen estar «integrados» en las gamas Ryzen 3, 5 y 7
- Ryzen 3: soluciones de gama de entrada enfocadas en la productividad
- Ryzen 5: ideales para gaming en resoluciones 1080p e incluso 1440p
- Ryzen 7: procesadores muy potentes para gaming que soportan resoluciones 4K con facilidad
- Ryzen 9: gama para uso intensivo y/o extremo, siendo ideales para jugar en 4K con elevada tasa de FPS y para tareas pesadas como edición de fotografía y/o vídeo
Núcleos, hilos y velocidad
Sin duda, estos tres parámetros son lo más importante a la hora de elegir un procesador. La potencia o rendimiento final es una combinación directa de estos tres elementos.
Actualmente, no hay procesador de AMD que cuente con la tecnología SMT (Simultaneous Multi-Threading) o hilos de procesamiento. Esto permite que cada núcleo del procesador pueda realizar dos tareas simultáneamente. Un aspecto que aumenta hasta un 30% el rendimiento del procesador.
Los núcleos son los que harán el trabajo pesado, los cálculos y operaciones necesarios básicos para que se ejecuten nuestras órdenes. Cuanto mayor cantidad de núcleos, obviamente, mayor potencia.
Una potencia que viene regulada por la frecuencia de trabajo. Esto es sencillamente la cantidad de instrucciones u operaciones que se realizan en un ciclo de reloj. Dicho de una manera sencilla, la cantidad de pasos que darías entre tu casa y tu trabajo.
Decir que los procesadores (sean de AMD o Intel) tienen dos frecuencias de funcionamiento. La base es la mínima a la que trabajara el procesador y la «Turbo», «Boost» o máxima, es la más alta, la que no pasara nunca de manera natural.
Al final, ningún parámetro por sí solo es importante, es una conjunción de todos. Pero, si tenemos que destacar uno, es la frecuencia. Aunque no lo creas, la mayoría de juegos dependen más de la frecuencia que del número de núcleos.
Conclusión
Lo primero que te vamos a decir es que no te lances a por el procesador con más núcleos o mayor frecuencia, porque no necesariamente será lo mejor para ti. Primero, ten claras las necesidades que tienes y tu presupuesto, y acto seguido, investiga y busca para saber qué hay en oferta y las posibilidades existentes. Debes tener claro el tipo de utilización que le vas a dar al equipo, ya que sería absurdo por ejemplo comprar un Ryzen 9 para un equipo que vas a utilizar para ofimática, o adquirir un Ryzen 3 para un PC que pretendes utilizar para edición de vídeo.
Es mucho trabajo, pero igual estas gastando 100 euros de más en un procesador que desaprovecharás. ¿No sería mejor invertirlos en la memoria RAM, fuente de alimentación o tarjeta gráfica?
