Aunque Nintendo Switch es cierto que ha diseñado su nueva Switch 2 desde cero, resulta que se parece mucho a la primera máquina y que todos sus juegos funcionan sin problemas (la mayoría). Hay pequeños elementos que se diferencian bastante y que van a obligarnos a pasar por caja para adquirir los modelos más modernos. Es el caso de las actualizaciones de ciertos juegos, pero también algún que otro complemento del que tarde o temprano vas a tener que tirar.
Ese elemento del que vais a tener que tirar —sobre todo si compráis juegos en digital— es el del espacio en Switch 2. Aunque internamente ha crecido bastante respecto de la primera Switch, al final no os va a servir nada más que para meter unos pocos títulos de la nueva generación, porque estos ocupan muchísimo más espacio que aquellos pírricos 5, 6 ó 10 GB de los de la máquina original. Así que la solución a eso pasa por comprar una nueva tarjeta microSD.
Olvídate de la microSD de tu vieja Switch
La primera Switch ya tenía esta posibilidad y lo cierto es que le daba bastante vidilla añadirle medio tera de almacenamiento. Cabían una burrada de juegos y nos garantizábamos llevar con nosotros prácticamente lo más destacado de nuestra colección. Por lo que, si piensas trasvasar esa tarjeta de la primera a la segunda Switch, vete olvidando. Al arrancar la consola, habrá un paso en el que Switch 2 te pida que insertes esa tarjeta, pero ojo, te especifica claramente que tiene que ser un modelo Express.
Los modelos Express son más rápidos y modernos que los viejos de Switch, así que tendrás que pasar por caja para hacerte con algún modelo específico. Aunque hay muchas marcas que ya fabrican ese estándar, si quieres contar con una microSD personalizada con los colores y personajes oficiales de Switch 2, tendrás que irte a por los modelos que vende Samsung, a imagen y semejanza de los que vimos en la anterior generación de SanDisk.
Ahora mismo, un modelo de tarjeta microSD como el que veis justo encima, para Switch 2 y 256 GB de almacenamiento, os puede salir por unos 55-60 euros. Es algo más caro que los modelos de la primera consola, pero es lo que tiene pagar la novedad. Aun así, tampoco tenéis que correr: ahora mismo los 128 GB que posee vuestra Switch 2 internamente os dan de sobra para lo que vais a jugar, que es como mucho un Super Mario Kart World y luego otros títulos de la generación anterior que no os van a ocupar demasiado.
Recordad, cuando vayáis a adquirir una nueva tarjeta microSD para Switch 2, verificar que es compatible con la consola, no sea que se os vaya el dedo y acabéis por comprar una tarjeta que no os va a funcionar. Y luego es un lío andar con devoluciones y esas cosas. Por ejemplo, este modelo de SanDisk es un poco más caro y también tiene 256 GB de almacenamiento, y es compatible con la nueva consola de Nintendo. Así que… tú mismo.