Los juegos de barcos han sido siempre un terreno propicio para lanzamientos sencillos, prácticamente arcade y si no recordad aquel Overboard! para PlayStation que llegó en el año 1997. Pero no fue hasta Assassin’s Creed III y sus fases marítimas que ya trajeron algo de realismo… aunque nada comparado con lo que pretende este Ultimate Admiral Dreadnoughts que tenéis ya disponible en Steam.
La guerra naval en su máxima expresión
Como os decimos, la intención de este juego no es ponernos las cosas sencillas, ni siquiera facilitarnos el trabajo para que podamos comandar uno de estos acorazados de la forma más intuitiva posible. Al revés, aquí el objetivo es la simulación más áspera y real posible, una que nos ponga en el centro de una acción donde la respuesta de la embarcación y la flota entera sea la que podríamos esperar en un escenario de combate real.
A ver, esto tampoco hay que tomárselo al pie de la letra porque pocos pueden afirmarnos con rotundidad que Ultimate Admiral Dreadnoughts respete hasta la última gota de agua del océano para convertir la experiencia de juego en una simulación total, pero sí que se tienen en cuenta elementos que las armadas de todo el mundo manejan cuando van a entrar en combate en mar abierto.
Por ejemplo, los enemigos no serán simples sparrings puestos ahí para que los zurremos ya que el desarrollador nos avisa de que tendremos detrás una afilada inteligencia artificial que nos buscará las cosquillas con tácticas reales en cualquiera de los escenarios de guerra que contempla, y que ascienden a un total de 58. Resolverlos con habilidad y, sobre todo, conocimiento, será uno de los principales retos de este Ultimate Admiral Dreadnoughts.
Modo academia y astillero
Pero existen dos elementos que diferencian a este juego y es la presencia de un modo de Academia Naval donde podremos aprender los principios de la guerra en el mar, con muchas clases y simulaciones de situaciones a las que nos podríamos enfrentar, y un curioso astillero donde será posible construir nuestros propios barcos de guerra para después probar su eficacia en el combate.
Se trata de un modo que, como podéis ver en el vídeo que tenéis más arriba, nos facilita ir intercambiando módulos para añadir nuevas funciones de ataque y defensa. La idea no es mezclar a lo loco sino construir una flota que sea capaz de enfrentarse a todos los escenarios imaginables: en caso de vernos las caras con un enemigo muy bien armado o contra los que prefieren escaramuzas rápidas donde la velocidad y la maniobrabilidad debe superar en muchas ocasiones el tonelaje y el mayor potencial de fuego.
Ya os avanzamos que este Ultimate Admiral: Dreadnoughts no es un juego para dedicarle unas pocas horas y ya está. Ha sido diseñado para ponernos con él y jugarlo prácticamente en exclusiva, como si fuera un único hobby. A cambio, os recompensará con una profundidad sin parangón en el género y un contenido que se irá ampliando con el paso de los meses. Recordad que el juego llevaba en early access desde finales de 2021 y no ha sido hasta ahora que Game-Labs ha decidido lanzarlo definitivamente. ¿Lo vais a probar?