Falta poco más de un año para que Microsoft se despida oficialmente de Windows 10. A partir del 14 de octubre de 2025, esta versión de Windows dejará de recibir el cariño de la compañía que fundó Bill Gates, siempre y cuando no contrates el soporte extendido que no será precisamente barato y tendrá una duración máxima de 3 años.
Utilizar un sistema operativo que no recibe actualizaciones es un riesgo para la seguridad, riesgo del que muchos usuarios son conscientes. Debido al fin del soporte de Windows 10, muchos son los usuarios que no quieren esperar al último momento y ya está actualizando sus equipos con Windows 11.
PCs con IA que no se utiliza
Este movimiento está impulsando las ventas de PCs con IA, también denominados Copilot+ PC por parte de Microsoft. Pero, lo más llamativo de todo es que los usuarios no están comprando estos nuevos equipos con IA, por sus capacidades para realizar tareas de Inteligencia Artificial de forma local, sino porque no hay otras opciones en el mercado, al menos si hablamos de procesadores de última generación.
Esto es lo que afirma el último estudio publicado por IDC Research quien afirma que la adopción de los PCs con IA está motivada por la necesidad de comprar nuevos equipos o actualizar los equipos ya existentes, no porque los usuarios tengan la intención de sacarle el máximo partido a sus capacidades de Inteligencia Artificial.
En los últimos meses, hemos visto como la nueva generación de procesadores para portátiles de Intel y AMD integran una NPU que se encarga de realizar tareas de Inteligencia Artificial que trabaja de forma independiente a la gráfica. A esta nueva oferta de procesadores con IA, tenemos que sumar la entrada de Qualcomm al mercado con los procesadores con arquitectura ARM que también incluyen una NPU dedicada.
Si bien es cierto que con la primera generación de los procesadores Intel Core Ultra ya incluía una NPU al igual que con las APU de AMD, esta no cumplía con los requisitos mínimos que Microsoft ha impuesto para que un equipo pueda entrar dentro de la denominación Copilot+ PC.
IDC Research afirma que son los fabricantes quienes tienen que hacer más hincapié en explicar a los usuarios que supone integrar una NPU dedicada para realizar taras de Inteligencia Artificial junto con las ventajas que ello supone y que no se basen en añadir el término IA en sus equipos sin explicar cómo se le puede sacar un mayor partido.
Según afirma Jitesh Ubrani, gerente de investigación de Worlwide Mobile Device Trackers.
Las empresas ciertamente reconocen la importancia de la IA, aunque muchas luchan por ver el caso de uso inmediato y, en cambio, están optando por las PC de IA como un medio para prepararse para el futuro.
Se espera que, para finales de este año, las ventas de equipos con NPU integrada para realizar tareas de Inteligencia Artificial de forma local, sin depender de una conexión a Internet alcance los 7,8% puntos del total de casi 400 millones de unidades de equipos que se venderán.