La compañía que fundaron Steve Jobs y Steve Wozniak se ha caracterizado en los últimos años por tratar de imponer a los usuarios cómo deben interactuar con sus dispositivos, especialmente con los Macs, y, generalmente, nunca le ha salido bien.
Con el lanzamiento de la renovación de la gama MacBook Pro 2016, la compañía con sede en Cupertino se tiró a la piscina y se ahogó. Este modelo, uno de los peores que ha lanzado Apple al mercado en toda su historia, tuvo un gran número de problemas.
El primero, fue la implementación de la Touch Bar, una pantalla OLED situada en la parte superior del teclado y que sustituía a la fila de teclas de función. Y, aunque estética era preciosa, los desarrolladores de aplicaciones nunca apostaron por ella y en versiones posteriores acabó eliminándola. Pasar de botones físicos a una pantalla para interactuar con funciones del teclado fue una buena idea.
Otro problema de este equipo fue el teclado que utiliza un mecanismo de mariposa en lugar de diseño de tijera tradicional. Rápidamente se demostró que este mecanismo se estropeaba con facilidad, y, nuevamente se vio obligada a regresar al tradicional de tijera además de enfrentarse a un gran número de demandas que, obviamente, perdió viéndose obligado a devolver el dinero que había cobrado por los reemplazados.
El último aspecto importante a destacar dentro de esta renovación de la gama MacBook Pro fue el tipo de puertos que utilizaba: USB-C. Este equipo no incluía ningún puerto USB-A, obligando a los usuarios a comprar periféricos nuevos y/o a cargar con adaptadores de puertos. Nuevamente, viendo la metedura de pata que había metido, las siguientes generaciones volvieron a implementar puertos USB-A.
El Mac Mini M4 elimina los puertos USB-A
Han pasado 8 años desde entonces y el puerto USB-C es algo más que habitual en la mayoría de los dispositivos móviles, tablets y discos duros, por lo que, en Cupertino han decidido volver a intentarlo con la próxima generación del Mac Mini con el procesador M4.
Al menos eso es lo que afirma Mark Gurman desde Bloomberg, uno de los filtradores de Apple con mayor índice de aciertos, por lo que sus fuentes han demostrado estar muy dentro de Apple. La renovación del Mac Mini no solo afecta a los puertos de conectividad, sino que, además, también incluye un rediseño.
Esta nueva generación contará con hasta 5 puertos USB-C, uno más que la generación actual que ofrece 2 USB-C y 2 USB-A. De los cinco puertos que incluirá el Mac Mini con el procesador ARM M4, tres estarán situados en la parte trasera mientras que los otros dos se situarán en la parte frontal.
Esteo supone un cambio radical que ya romperá con la estética tradicional de este equipo, pero, sin duda, será de agradecer por los usuarios ya que no tendrán que pelearse con el dispositivo con encontrar un puerto USB-C para conectar un disco duro, móvil, webcam o cualquier otro dispositivo.
De momento, se desconoce cuántos de estos 5 puertos serán compatibles con Thunderbolt 4. Según rumores previos, este modelo contará con 4 controladores Thunderbolt, el doble del que ofrece actualmente el Mac Mini con el procesadore M2.
Si estás pensando en comprar el nuevo Mac Mini M4, y todavía utilizar periféricos que utilizan el puerto USB-A, ya puedes ir buscando en Amazon dongles para poder utilizarlo. O bien, optar por el modelo M2 Pro que, a buen seguro, bajará de precio ya la diferencia de rendimiento con el M4 no debería ser mucha y dispone de 2 puertos USB-C y 2 puertos USB-A.