A nadie le cabe duda de que utilizar un disipador de refrigeración líquida tiene muchas ventajas: son capaces de disipar grandes cantidades de calor, son relativamente silenciosos, y además dejan el interior de la caja muy estético y despejado. Sin embargo, tras más de una década dedicándome a esto del hardware, al final he tomado una decisión: me quedo con los disipadores por aire. En este artículo os cuento por qué.
Lógicamente, y más cuando hablamos de componentes de PC, absolutamente todo tiene sus pros y sus contras; por ejemplo, un producto que es muy bueno, generalmente es caro, y los productos baratos suelen ser de baja calidad o poco rendimiento. Esto mismo se puede extrapolar a los disipadores de PC, y si lo aplicamos al eterno debate de disipador de refrigeración líquida vs disipador por aire, desde luego podemos sacar la clara conclusión de que los sistemas AIO de refrigeración líquida salen perdiendo en el sentido de que son mucho más caros.
No obstante, este no ha sido el factor determinando de haber tomado la decisión de no seguir utilizándolos, así que vamos a entrar en materia…
Disipador de refrigeración líquida, no gracias
Comenzaré diciendo que cuando hablo de un disipador de refrigeración líquida me refiero a los sistemas AIO, los que puedes comprar en casi cualquier tienda de informática y montarlo directamente en el PC. Ya los sistemas custom son otro mundo aparte, bastante más caro, complicado y solo apto para los más manitas y fanáticos.
Como sabéis, en esta web hemos tenido la suerte de analizar decenas y decenas de disipadores de todas las gamas y tipos a lo largo de los años, pero una cosa es lo que analizas en el trabajo y otra cosa lo que utilizas para tu propio PC, como es este el caso. Lo que os quiero decir con esto es que he probado seguramente unos 50-60 disipadores de todo tipo, por lo que tengo una base bastante buena en la que basar mi decisión.
El caso es que en estos años, y siempre hablando de mi PC particular que utilizo día a día para trabajar y para jugar, he tenido un poco de todo, incluyendo sistemas de refrigeración líquida AIO durante meses o años. Y es precisamente en el uso continuado cuando me he dado cuenta de que prefería un disipador por aire tradicional…
- Aunque la instalación de una refrigeración líquida AIO es sencilla, la de un disipador por aire lo es más. Y si como yo eres de los que desmonta el PC cada pocos meses para limpiarlo en profundidad, esto se agradece bastante.
- Con el tiempo y el uso, todas las refrigeraciones líquidas terminan dando problemas; sea porque la bomba empieza a hacer ruido, sea porque un tubo se ha agrietado, o sea porque ha perdido eficiencia térmica, al final es algo que se nota (y todo esto pasa antes o después, la evaporación del líquido refrigerante interno nunca es cero y eso con el tiempo termina siempre teniendo consecuencias). Un disipador por aire no tiene fecha de caducidad, y cuando el ventilador empieza a dar problemas, lo cambias y listo.
- Si eres un maniático del silencio (como lo soy yo), al final un disipador por aire hace bastante menos ruido que una refrigeración líquida; incluso en reposo es bastante raro no escuchar la bomba, aunque sea un poco. Sin embargo, prácticamente cualquier ventilador de 120 mm por debajo de 700 rpm es inaudible.
- En general, un disipador por aire TOP es bastante más barato que una refrigeración líquida medianamente decente, y las TOP de verdad cuestan más del doble.
Por estos motivos, y aun sabiendo que en términos de rendimiento seguramente una refrigeración líquida AIO me iba a dar mejor resultado, decidí hace un tiempo cambiar mi sistema de refrigeración líquida AIO (y era una H150i de Corsair, muy TOP) por un disipador por aire (concretamente un Noctua NH-D15 Chromax.black), incluso aunque con el cambio perdiera aproximadamente unos 3ºC de rendimiento térmico en el procesador.
Con esto no os quiero decir que no debáis comprar un sistema de refrigeración líquida ni mucho menos, pues como he mencionado al principio del artículo también tienen muchas otras ventajas que, dependiendo de tus necesidades y preferencias, pueden venirte mucho mejor que un disipador por aire. Lo que os he dado es mi opinión personal basada en mi experiencia también personal, y luego cada cual puede tomar la decisión que quiera.
También os digo que no me cierro a usar un kit AIO en el futuro: ya que analizo muchos de estos dispositivos, puede que en algún momento me tope con una líquida tan silenciosa, buena y duradera que me haga cambiar de opinión. Pero por ahora… me quedo con los disipadores por aire.
