La Radeon VII no ha cumplido con las expectativas, hasta tal punto que ya ha entrado en EOL y se retirará en breve de las estanterías. En cambio, Navi ha producido el efecto contrario gracias a su arquitectura RDNA, pero actualmente no dispone de GPU de gama alta. Para paliar esto, AMD introduciría con RDNA2 las nuevas memorias HMB2E en sus GPUs top de cara a competir con NVIDIA Ampere.
RDNA2 llegará en 2020 con nuevas novedades
La semana pasada ya adelantamos la nueva hoja de ruta de AMD para sus procesadores y tarjetas gráficas, donde los tiempos se habían acortado algo y todo parece ir según lo planeado por la compañía.
Esto implica que RDNA solo ha sido el primer pelotón de ataque hacia NVIDIA en lo que respecta a tarjetas gráficas, donde como bien sabemos han llegado con el último proceso litográfico de TSMC, sus 7 nm.
RDNA2 en cambio, llegará con el nuevo proceso litográfico de los taiwaneses (7nm+) el cual no será una simple reestructuración para mejorar eficiencia, sino que introducirá más mejoras y, sobre todo, más densidad por mm2 (+-20%). Esto, unido a las mejoras de la propia arquitectura (por ahora desconocidas) deben de suponer un salto de prestaciones más que notable.
Pero AMD no se quedará ahí, ya que según podemos saber hoy planea introducir otra mejora, al menos en sus tarjetas gráficas de gama alta. Y es que los de Lisa Su pasarían de implementar GDDR6 a una nueva y remodelada HBM2E, la última versión de este tipo de VRAM que incluye dos mejoras muy notables.
En primer lugar y según informó SK Hynix, este nuevo tipo de memoria tendrá el ancho de banda de transmisión más alto de la industria, donde superará ampliamente a la HBM2 actual aun siendo solamente una versión mejorada.
La compañía ha ofrecido datos concretos al respecto: una velocidad de transmisión pin a pin de 3,6 Gbps con un bus de 1024 bits, lo que daría un ancho de banda de 460 GB/s
HBM2E casi dobla el rendimiento de la HBM2 original
Lo cierto es que el rendimiento con HBM2E ha aumentado en gran medida, donde, por ejemplo, si comparamos lo que puede hacer una Radeon VII con HBM2 y lo que podría llegar a hacer con HBM2E, la diferencia es apabullante.
En el primer caso, tal y como vimos en su momento, la tarjeta gráfica era capaz de lograr 1 TB/s de ancho de banda mediante un bus de 4096 bits, pero con la nueva HBM2E a mismo bus el ancho de banda se vería incrementado hasta los 1,8 TB/s. Las mejoras no terminan aquí, ya que la capacidad también se ha visto aumentada.
Gracias a las nuevas técnicas de TSV, HBM2E podrá apilar hasta 8 chips de 16 GB, lo que siguiendo con el símil anterior de la Radeon VII, no daría una capacidad total de 64 GB repartidos en 4 pilas verticales de memoria.
El problema, como suele venir arrastrando AMD en los últimos tiempos, será el coste.
Las memorias HBM en cualquiera de sus versiones siempre han ofrecido una gran eficiencia y un gran rendimiento, donde su único problema es el coste que ostentan, donde AMD siempre ha jugado con márgenes más estrechos de ganancias debido a esto.
La pregunta, en el caso de que efectivamente RDNA2 incluya HBM2E es simple ¿influirá en el precio de la gama alta de AMD y con ello veremos GPUs más caras al estilo de NVIDIA con Turing? o ¿AMD volverá a la estrategia de mínimos beneficios pero máxima competencia en precios?