Intel dice que AMD EPYC no es el doble de potente que los Xeon, sino «sólo» 1,7 veces más
A Intel no le gustaron demasiado las declaraciones que Lisa Su realizó durante la presentación de los nuevos procesadores AMD Zen 2 durante la celebración del Computex 2019. En estas declaraciones, la compañía afirmaba que sus nuevos procesadores EPYC con el núcleo Rome (sucesor del actual Naples) con la nueva arquitectura AMD Zen 2, eran el doble de potentes que un procesador Intel Xeon Platinum 8280. Sin embargo, Intel no ha tardado en intentar refutar las afirmaciones de AMD, realizando las mismas pruebas y obteniendo un resultado algo diferente.
Está claro que, para todos los amantes del hardware, la compañía que realmente ha triunfado durante la celebración del Computex 2019 ha sido AMD. La presentación de la nueva gama de procesadores AMD Ryzen 3000 era una de las más anheladas, al tratarse de una arquitectura algo diferente a la Zen y Zen+ que se había empleado hasta ahora. Similares, pero diferentes. De hecho, en las redes podemos ver un montón de rumores sobre cómo rendirían estos nuevos procesadores, como el próximo AMD Ryzen 5 3600, que tendría un incremento bastante sustancial de éste frente al procesador que sustituye, el AMD Ryzen 5 2600.
Pero, lo que realmente no le ha gustado demasiado a Intel de los datos aportados por AMD durante su presentación tiene más que ver con el rendimiento que tendrían los nuevos procesadores AMD EPYC con el núcleo Rome. Hay que recordar que estos nuevos procesadores integran 64 núcleos y 128 hilos de proceso. El hecho es que, durante la presentación de AMD, este fabricante lo comparó con uno de los procesadores topes de gama de Intel en el segmento de servidores: el Intel Xeon Platinum 8280. Este procesador de 28 núcleos y 56 hilos salió muy mal parado de la comparativa: el procesador AMD EPYC era el doble de potente que el de Intel.
Intel volvió a realizar el test con sus propias optimizaciones
El programa que utilizó AMD para su benchmark es NAMD, que es un programa que se emplea para doblar proteínas, y que destaca sobre el resto por la gran optimización que posee para realizar tareas en paralelo. Sin embargo, parece ser que existen una serie de optimizaciones que permiten que los procesadores de Intel sean capaces de rendir bastante más con este programa. No sabemos si por desconocimiento de su existencia o por algún otro motivo, AMD realmente no empleó estas optimizaciones para su benchmark. Y, desde luego el empleo de estas optimizaciones permiten un incremento en el rendimiento del procesador Intel Xeon Platinum 8280 de hasta un 30%. El problema es que, incluso con este incremento de rendimiento, en este benchmark el procesador de Intel sigue quedando a gran distancia del de AMD.
Es decir, en vez de ser el doble de rápido, el AMD EPYC es «solo» 1,7 veces más rápido que el procesador de Intel.
Pero Intel no se conformó solo con estos datos, sino que también hizo correr este mismo benchmark a los nuevos procesadores Intel Xeon Platinum 9000, los Intel Cascade Lake-AP. Estos procesadores no son nada más que dos procesadores Cascade Lake en configuración MCM. Lo que significa que su procesador más potente, el Intel Xeon Platinum 9282 tendrá 56 núcleos, 112 hilos y memoria RAM de 12 canales. Con estas configuraciones, el modelo inferior, el Xeon 9242 (con 48 núcleos y 96 hilos) solo le sacaba un 1,5% de ventaja al procesador de AMD. El modelo tope de gama, del que acabamos de hablar, sí le sacaba un 23% de ventaja.
Los números no cuentan toda la historia
Nadie niega que la plataforma Intel Cascade Lake-AP será una gran plataforma en el entorno de servidores y cálculo matemático con tantísima potencia bruta a la disposición de las empresas que la usen. Pero un aspecto que no se puede obviar es el monstruoso TDP de esta plataforma: 350 W para el procesador con menor consumo, y 400 W para el modelo tope de gama. Con unos TDP tan exageradamente elevados, las empresas que los compren van a necesitar invertir en soluciones de refrigeración mucho más potentes. De hecho, no sería de extrañar que esas empresas tuvieran que invertir en soluciones de refrigeración bastante exóticas para mantener el rendimiento de estos procesadores en un punto óptimo.
Cierto es que AMD no ha proporcionado datos sobre el TDP de sus nuevos procesadores EPYC. Pero hay rumores que su TDP podría rondar los 240 W. De ser verdad, estaríamos hablando de una diferencia de 110 W con respecto al Intel Cascade Lake-AP menos potente. Sí, el modelo que solo le saca un 1,5% de rendimiento de diferencia al modelo de AMD.
Porque también hay que tener en cuenta otro aspecto: el coste de refrigerar los procesadores de Intel podría no hacerlo económicamente viables salvo en circunstancias muy particulares. Sin embargo, y a falta de conocer el precio que tendrán los procesadores AMD EPYC con núcleo Rome, sí sabemos que los actuales AMD EPYC Naples, concretamente el 7601, cuesta 4.200 dólares. Por contra, el Intel Xeon Platinum 8280 cuesta entre 10.000 y 17.000 dólares. Un procesador equivalente a dos de éstos, probablemente acabe costando unos 20.000 dólares.
Está claro que la batalla en el mercado de servidores entre Intel y AMD va a acabar siendo tan interesante como la que vamos a vivir en el mercado de escritorio.