Desde hace mucho tiempo, los desarrolladores Open Source de Linux se quejan de que los drivers que NVIDIA desarrolla para dicha plataforma son cerrados. Por ello, se creó hace tiempo el proyecto Nouveau, cuyo objetivo es la creación de drivers Open Source para gráficas NVIDIA, y hasta ahora han mantenido un buen rimo lanzando controladores casi al mismo ritmo que los de verde. Lo malo es que con los drivers para la nueva serie GeForce GTX 900 las cosas han cambiado, ya que NVIDIA ha cambiado el modo de firmar los drivers para Linux y ahora los desarrolladores ven imposibilitado su trabajo.
El problema radica en que a partir de los drivers lanzados para las GeForce GTX 900 Series (Maxwell), NVIDIA exige imágenes del firmware firmado digitalmente (según ellos para evitar fraudes con gráficas antiguas cambiadas de nombre). La compañía prometió proporcionar este firmware firmado específicamente para que los desarrolladores de Nouveau pudieran utilizarlo, pero hasta ahora no lo han hecho, lo que está imposibilitando el desarrollo de drivers actualizados. Esto significa que a día de hoy, las gráficas Maxwell no pueden proporcionar aceleración por hardware en Linux ya que el driver Nouveau no puede acceder completamente a la GPU (de hecho solo puede acceder a modificar las salidas de vídeo).
Este problema es ya casi tradición
Éste no es el primer «enfrentamiento» entre NVIDIA y la comunidad Open Source, ya que como seguramente todos sepáis, hace tiempo el propio Linus Torvalds, creador del kernek de Linux, criticó el soporte de NVIDIA para Linux diciendo que «era la peor empresa con la que habían tratado» y que era un «foco contínuo de problemas para Linux», además del famoso «Fuck you NVIDIA» enfatizado con un gesto un tanto desapropiado.
El problema no es terminal
En cualquier caso, el problema no deja de ser eso, un problema, y no imposibilita el utilizar gráficas de NVIDIA con Linux. De hecho, éste problema solo sucede a partir del Kernel 3.19 de Linux, que solo proporciona soporte básico para las gráficas Maxwell de NVIDIA, y por supuesto los usuarios de Linux no tienen por qué dejar de utilizar gráficas NVIDIA. El driver propietario de los de verde sigue estando ahí, aunque ya sabéis cómo son los usuarios de Linux por regla general, para ellos utilizar un driver «closed source» en una máquina completamente «open source» es casi un sacrilegio.
Lo que sí es cierto es que NVIDIA nunca le pone las cosas fáciles a la comunidad Open Source, y por ello cada vez más usuarios están utilizando gráficas AMD, que sí brinda un gran apoyo al software libre, en su lugar.