AMD arremete contra NVIDIA y sus acuerdos exclusivos de optimización
Ya conocéis esta historia. Muchos desarrolladores de videojuegos llegan a acuerdos con algunas compañías para lanzar parches que optimizan el rendimiento de sus juegos en exclusiva para estas marcas. Es el caso de NVIDIA, y de lo que AMD se queja, ya que hace muy poco hemos visto dos casos, Call of Duty: Ghosts y Watch Dogs, precisamente lanzado hoy al mercado.
En Forbes denuncian esta situación y se hacen eco de las palabras de Robert Hallock, portavoz de AMD, quien dijo que este tipo de acuerdos solo perjudican a los propios usuarios: «Sistemas como Gameworks de NVIDIA son una clara amenaza para los jugadores y el ecosistema de juegos de PC, ya que se reduce deliberadamente el rendimiento con productos de AMD, (la cual tiene una cuota del 40% en gráficas dedicadas para PC), dándole un trato de favor a la competencia». Hemos de recordaros que, además de la industria del PC, tanto la PlayStation 4 como la Xbox One equipan hardware de AMD, por lo que también se ven perjudicadas las consolas next-gen por este tipo de acuerdos.
Otros juegos que pertenecen a NVIDIA Gameworks son por ejemplo Batman: Arkham Origins o Assassin’s Creed IV: Black Flag, desde luego títulos con gran repercusión mediática. Por supuesto, que un juego forme parte de Gameworks solo son buenas noticias para NVIDIA, sus socios desarrolladores, y los usuarios con gráficas de su marca. Para más INRI, Hallock no se mordió la lengua a la hora de denunciar la raíz del problema: «La participación en el programa Gameworks a menudo impide a los desarrolladores aceptar sugerencias de AMD con respecto a los juegos que están creando, las cuales mejorarían el rendimiento del juego para cualquier tipo de hardware a través de la optimización del código, es decir, la mejor forma de optimización».
Podéis ver a lo que se refiere Hallock en este ejemplo con Watch Dogs, donde podéis ver la diferencia de rendimiento entre una NVIDIA GeForce GTX 770, una gráfica que ya casi se puede considerar de gama media-alta, en comparación con una AMD Radeon R9 290X, la gráfica mononúcleo más potente de AMD.
Como podéis apreciar, la gráfica de NVIDIA, cuyo precio es de unos 300 dólares, supera o iguala prácticamente al buque insignia de AMD, que cuesta 200 dólares más. Solo en las situaciones de gráficos más sobrecargados destaca la R9 290X, pero no lo suficiente como para justificar el sobreprecio, al menos no en este juego especialmente optimizado para gráficas NVIDIA.
Si tenéis buenos conocimientos del idioma anglosajón os recomendamos encarecidamente leer el artículo completo de Forbes, que no tiene desperdicio.