Los mandos inalámbricos de las consolas PS4 y Xbox One son de muy buena calidad, y están diseñados específicamente para sus respectivas consolas. Sin embargo, si te ves en la tesitura de que necesitas comprar un nuevo mando, por el motivo que sea, verás que estos tienen unos precios bastante elevados, cuando por contra puedes comprar un mando USB bastante más barato. La pregunta es: ¿se puede utilizar cualquier mando USB con PS4 o Xbox One?
Tanto la PS4 como la Xbox One tienen puertos USB a los que podemos conectar periféricos, y de hecho es curioso que se pueden conectar incluso algunos teclados y ratones de PC y funcionan sin demasiados problemas -especialmente en Xbox One en este caso-. Así pues, es inevitable hacernos la pregunta de si vale cualquier mando que se conecte por USB para estas consolas, ya que podemos encontrarlos a precios que suponen una cuarta parte de lo que cuestan los mandos originales en muchos casos (o incluso menos).
¿Funcionará cualquier mando USB con PS4 o Xbox One?
Hemos de partir de que dado que las consolas se venden a un precio muy por debajo de lo normal, sus fabricantes han de capitalizar con la venta de juegos, cargando una regalía sobre los hechos por tercera empresas que repercute en su precio final. Pues bien, lo mismo ocurre en los periféricos y en especial los mandos de control y no todos los que se venden tienen compatibilidad total ni acceso a todas las funciones del sistema.
El caso es que hay muchos mandos en el mercado que imitan el diseño de los mandos originales de PS4 o Xbox. No obstante, si SONY y Microsoft cobran unos 60 euros por sus mandos (sin tener en cuenta posibles ofertas, ya que han estado incluso por 30 euros), ¿por qué podemos encontrar alternativas por apenas 10 euros? Pues por el hecho de que están licenciados. Aunque algunos de esos fabricantes son lo suficientemente hábiles como para hacer ingeniería inversa y hacer una copia, a menor coste, de los mandos oficiales.
Peor calidad en los materiales
La diferencia está casi siempre en la calidad de los materiales y por supuesto en cuanto a la funcionalidad, porque sin ir más lejos hay muchos mandos que dicen ser compatibles con PS4, pero que luego no tienen el panel táctil, necesario para muchos juegos. Por ejemplo, en la imagen de abajo podéis ver un mando de apenas 10 euros que dice ser compatible con PC y PS4, pero que en realidad tiene el diseño del mando de PS3. Además, como no tiene licencia oficial y Sony tiene registrados los símbolos de su botonera, tienen que incluir números (a pesar de que sí que respetan el color, como por ejemplo el 2 que está en la posición del círculo y es rojo).
Compatibilidad y funciones limitadas
En términos de compatibilidad, la enorme mayoría de mandos USB del mercado (y, de hecho, incluso muchos inalámbricos siempre y cuando su conexión sea Bluetooth y no mediante un receptor USB 2.4 GHz, ya que en este caso no todos son compatibles) son compatibles tanto con PS4 como con Xbox One, pero el problema como os decíamos lo encontraremos en cuanto a la calidad de materiales y de construcción, así como en cuando a la funcionalidad. Pero funcionar, salvo algunos «raros» de marchas chinas, todos funcionan sin demasiados problemas.
Eso sí, por experiencia propia os diremos que algunos mandos que presumen de ser compatibles con PS4 luego tienen un panel táctil que realmente no lo es, ya que simplemente funciona como un botón sobredimensionado. Cuidado con eso. De igual manera, hay algunos mandos que presumen de ser compatibles con PC y cualquier consola, y a pesar de que tienen un diseño que claramente copia al de los modelos originales, luego carece de muchas de sus facultades aparte del panel táctil, como por ejemplo el altavoz integrado o el conector para auriculares.
En líneas generales, la mayoría de mandos USB «funcionan» con las consolas, pero carece de muchas de las características que sí que tienen los mandos originales, por no hablar de una calidad de materiales que, generalmente, deja bastante que desear (y de ahí su precio, bastante más barato).
¿Y los mandos con «licencia oficial»?
Ya anteriormente hemos hablado de los periféricos específicos para consolas que tienen licencia oficial, como por ejemplo los mandos del fabricante Nacon para PS4. Esta licencia les da permiso para utilizar los logos de PlayStation tanto en el embalaje como en el propio mando, por ejemplo, pero también garantiza una compatibilidad total con la consola, algo que al fin y al cabo no tenemos garantizado con un mando USB barato.
Algunos de estos productos con licencia oficial pueden incluso tener mayores funcionalidades que los originales de las consolas, como gatillos o botones adicionales, más opciones de configuración y personalización, etc., pero en estos casos muchas veces su precio es incluso superior al de los mandos originales de las consolas. Por ejemplo, solo tenemos que ver productos como el Razer Wolverine Ultimate, un mando para Xbox One con botones adicionales, iluminación RGB y una amplia personalización, pero cuyo precio es de 180 euros normalmente.
Oficialidad no significa calidad
Eso sí, ten en cuenta que aunque tengas la compatibilidad garantizada al tratarse de un producto con licencia oficial, eso no quiere decir que tenga una calidad igual o superior y, de hecho, es frecuente que los fabricantes escatimen en ello para abaratar los costes y vender el producto más barato. De hecho, podríamos incluso perder alguna de las funcionalidades del mando en estas «copias» oficiales (obviamente no siempre es así, dependerá del modelo y el fabricante).
Conclusión final
En resumidas cuentas, los productos con licencia oficial sí que nos garantizan la compatibilidad, pero respondiendo finalmente a la pregunta de este artículo, el 99% de los mandos USB modernos funcionarán sin problemas en las consolas PS4 y Xbox One. Otra cosa es que luego la calidad y la funcionalidad pueda dejar que desear en muchos casos.
Nuestra recomendación final es que, si no quieres complicarte la vida, optes siempre o bien por los modelos oficiales del fabricante de la consola, o bien por alguno con licencia oficial pero de un fabricante que te dé confianza, ya que un mando de consola es un elemento de desgaste con mucho uso y, si no tiene una buena calidad, a la larga te arrepentirás porque terminará estropeándose más pronto que tarde.