Muchas veces podemos encontrar que dos compañías que llevan bastante tiempo colaborando para lanzar tecnologías realmente novedosas tienen problemas, lo que les lleva a pasar por unos procedimientos legales para tratar de solucionar todo lo que sucede sin tener que llegar a ciertos extremos. Pero al parecer, desde ARM quieren forzar a Qualcomm a dejar de utilizar chips basados en su arquitectura, y es que han anunciado que cancelarían la licencia que tiene la marca para fabricar todo tipo de componentes relacionados con la propiedad intelectual de esta compañía.
Desde hace un tiempo ARM se encuentra en una pelea legal con Qualcomm, todo ello debido a que la marca creadora de los Snapdragon compró una compañía que no llevaba mucho tiempo en el mercado, Nuvia, que consiguió llamar lo suficiente la atención como para convertirse en un factor clave en las acciones de la empresa. Con la adquisición de dicha compañía, desde Qualcomm aseguraron que podían utilizar las patentes de ARM ya que tenían una licencia, pero la marca representante de esta arquitectura no estaba de acuerdo y propuso renegociar los términos, aunque no se llegó a ninguna parte.
ARM está en una batalla con Qualcomm, quieren quitarles la licencia para fabricar sus chips
Uno de los aspectos principales que encontramos en el mundo de la tecnología es la propiedad intelectual que tiene cada empresa, y es que en muchas ocasiones podemos pensar que es algo que puede utilizarse sin más, pero las patentes y desarrollos son uno de los activos más importantes de las compañías. Es por ello que a ninguna le gustaría que se utilizase alguna de sus creaciones sin tener unos términos que puedan beneficiar a ambas partes, haciendo que se llegue a cuestiones legales para evitar que una de las dos partes implicadas pierda dinero.
En este caso, tal y como hemos comentado antes, la empresa ARM está enzarzada en una batalla con Qualcomm debido a que han estado utilizando su propiedad intelectual de forma ilegítima al no haber renegociado la licencia tras comprar Nuvia. Ahora, los creadores de la arquitectura utilizada en todos los procesadores Snapdragon han enviado a Qualcomm una notificación obligatoria indicando que les retirarán la licencia en el plazo de 60 días, la cual les permite a crear sus propios chips basados en estándares propiedad de ARM.
Desde Qualcomm obviamente no se lo han tomado demasiado bien, indicando que es una estrategia para tratar de interrumpir el juicio que tendrá lugar en diciembre:
«Esto es más de lo mismo por parte de ARM: más amenazas infundadas diseñadas para forzar a un socio de larga data, interferir con nuestras CPU líderes en rendimiento y aumentar las tasas de regalías sin tener en cuenta los amplios derechos bajo nuestra licencia de arquitectura».
En el caso de que Qualcomm pierda la licencia para fabricar y comercializar chips basados en ARM podría perturbar en gran medida los ingresos de la compañía, ya que no solo les impediría comercializar sus chips obligando a parar toda la producción y venta de los mismos, sino que también incluiría a sus 20 socios comerciales, incluido Microsoft, al tener que detener los envíos de los nuevos portátiles basados en los procesadores Snapdragon.