El PC en forma de consola portátil de Valve con reminiscencias de una Nintendo Switch es uno de los dispositivos más esperados. No obstante ha tenido que pagar un pequeño precio, y es que la Steam Deck está desfasada en cuanto a su hardware, lo cual hace que nos hagamos la siguiente pregunta: ¿vamos a ver una versión mejorada de la consola basada en Steam OS?
Cuando Valve presentó su Steam Deck hace unos meses por primera a muchos se nos dibujó una sonrisa de oreja a oreja, ya que el único hardware para juegos totalmente portátil y asentado era la Nintendo Switch. El problema de la consola de los de Kioto es que por motivos de limitaciones técnicas o desavenencias entre el fabricante japonés y algunos editores de juegos hacían que no se pudiese jugar a ciertos títulos en cualquier parte que no fuese nuestro escritorio o salón de estar.
Por suerte, la Steam Deck trae un potente hardware basado en una APU de AMD, no obstante, pese a que se trata de un sistema más que decente, no podemos decir que sea perfecto. Y es que los de Gabe Newell parece que hayan optado por piezas que no serían las más modernas del mercado, lo cual podría pasarles factura.
Un hardware ¿qué no está a la última?
Antes de nada hemos de aclarar que desfasado no significa poco potente o de bajo rendimiento, sino que había piezas modernas disponibles que tenían mucho más sentido. ¿Y cuáles son esas piezas en la Steam Deck? Un rápido análisis de sus especificaciones técnicas nos revelan el uso de una CPU de arquitectura Zen 2, cuando AMD ya tiene en su porfolio Zen 3 desde hace tiempo.
¿El motivo por el cuál escoger una generación anterior? El hecho de que no existe una versión para 4 núcleos de la arquitectura Ryzen más avanzada hasta el momento. Por ello, que la CPU sea de cuatro núcleos en un dispositivo pensado para jugar es un desacierto enorme, ya que Valve podría haber optado por un Zen 3 de seis núcleos, el cual sería mucha mejor opción. Y más teniendo en cuenta la reciente revisión optimizada para bajo consumo.
En cambio, en la GPU al contrario de lo que ocurre con el resto de APU con arquitectura Zen 2 no nos encontramos con que esta utilice una iGPU con arquitectura Vega, sino que hace uso de la misma gráfica integrada que los Ryzen 6000 y los recientemente presentados Exynos de Samsung. Es decir, trae una gráfica con arquitectura RDNA 2 en el interior de su APU, siendo, por tanto, una configuración atípica, ya que AMD empareja RDNA 2 con los nuevos Zen 3+.
En todo caso nos preguntamos si vamos a ver una versión futura de la Steam Deck con una APU RDNA 2 con una mayor cantidad de compute Units, ya que en la versión actual es de 8, mientras que en las nuevas Ryzen 6000 podemos ver configuraciones de 12. No olvidemos tampoco que la última revisión de la arquitectura RDNA 2 tiene un rendimiento por vatio mucho más alto, lo que significa alcanzar la misma potencia con un consumo menor, conseguir más horas con la misma batería o una potencia gráfica más alta a mismo TDP.
En cuanto a la RAM, no podemos acusarles de llegar tarde, pero es otro de los elementos que nos hace pensar que Valve podría haberse esperado un poco y utilizar la LPDDR5X en el diseño de su consola portátil, ya que esta consume menos que LPDDR5 convencional.
¿Lanzará Valve una Steam Deck en 2023?
La respuesta a la pregunta no es simple, se podría decir que sí y que no al mismo tiempo por lo argumentado justo arriba, debido a que en PC sabemos que siempre hay un hardware mejor a la vuelta de la esquina y para nosotros la Steam Deck es un ordenador para gaming totalmente portátil. Por lo que pese a su factor forma no estamos hablando de una consola portátil al uso y si Valve lanza una Steam Deck con una APU con RDNA 2, Zen 3 y memoria LPDDR5X en unos meses no deberíamos verlo como algo malo, sino como el funcionamiento normal en el mundo del hardware para PC donde todos sabemos que nuestro equipo ya está desfasado y hay siempre otro mejor en cuanto a especificaciones a la vuelta de la esquina.
La Steam Deck es un hardware increíble, e independientemente del uso que le vayas a dar va a ser un lujo poder verla funcionar entre nuestras manos y en cualquier lugar juegos que carecían de portabilidad por limitaciones técnicas. Si Valve lanza versiones con mejor hardware será la norma habitual, y es posible (y esperable) que tu Steam Deck quede desfasada, pero lo mismo ocurre con tu PC o tu móvil.