Activision y sus Call of Duty tienen una arraigada tradición y un sistema de desarrollo a prueba de inclemencias que ha permitido a los norteamericanos alimentar una máquinaria engrasada que les facilita poner un AAA todos los años en las tiendas. Y claro, cuando llegamos al ecuador de la vida útil de la actual entrega, Black Ops 6, muchos se preguntan ya qué será lo sigiueinte que veremos aterrizar en las tiendas en los meses de octubre o noviembre. ¿Será un nuevo reinicio o el regreso de una vieja trama?
Call of Duty, recordad, tuvo unos comienzos muy enfocados en la Segunda Guerra Mundial. No en vano, parte de su equipo inicial venia del éxito de los Medal of Honor de Electronic Arts (y Dreamworks) pero pronto tuvo claro que había que pasarse a las guerras modernas. Aunque en el caso del primer Black Ops, la trama nos lleva a un pasado en el que la Guerra Fría era la principal protagonista. Una época de miedos planetarios a un enfrentamiento nuclear entre los EE.UU. y la URSS.
¿Qué será lo nuevo de Call of Duty para 2025?
El problema de que Call of Duty lleve más de 20 años lanzando juegos todos los años es que en la parte argumental tenemos ya suficientes personajes y lore como para disfrutar de argumentos repletos de referencias a otros juegos. Aunque para el lanzamiento de este año hay ya quien afirma que tiene información que le permite situar la historia después de los acontecimientos de Black Ops 2, con el retorno de Woods y Mason y una ubicación de la acción en el año 2035.
Además de esos datos que podrían fijar un poco más el cariz que toma la nueva entrega de Call of Duty, se sabe que la campaña podría tener un modo cooperativo para cuatro jugadores y un mapa algo más abierto de lo habitual. Si lo normal en esta saga son los mapas pasilleros, los de seguir de principio a fin para completar los objetivos, de cara a este futuro ¿Call of Duty Black Ops 7? podríamos disfrutar de una concepción más abierta, más sandbox dentro de las propias limitaciones narrativas.
Recordad que en Call of Duty Black Ops 2 la acción se movía entre operacionesc encubiertas en la década de los años 80 y otras en el futuro (que precisamente acabamos de alcanzar) que, en aquel entonces (2012 con Xbox 360 y PS3), fijaban para el año 2025, en una especie de segunda Guerra Fría que, todo hay que decirlo, casi han clavado las predicciones, porque entre la Guerra de Ucrania y los líos con los aranceles, está el mundo que parece en llamas. Eso sí, no tanto por una amenaza nuclear como por los enfrentamientos entre grandes potencias.
De confirmarse que este futuro Call of Duty Black Ops será una continuación argumental del 2, viajaríamos a un futuro cercano dentro de la próxima década, por lo que Activision tendrá que imaginar qué nuevos conflictos estarán golpeando el mundo… y con el tino que ha tenido en este tiempo, miedo nos da pensar qué se estarán imaginando.