Pues sí, la especificación del PCI Express 7.0 ya ha sido presentada y, por tanto, los futuros diseñadores de chips lo podrán utilizar. La séptima generación del PCIe llega cuando ni tan siquiera hay productos que usen la quinta. Es más, desconocemos en la actualidad que procesadores de Intel y AMD tendrán soporte para PCI Express 6.0 a día de hoy. Por lo que aún quedan muchos años para que veamos productos con el PCIe Gen 7. Sin embargo, lo que nos interesa son las especificaciones y como podría cambiar la forma en la que entendemos el hardware de nuestro PC.
No hay ninguna duda que PCI Express es la interfaz en paralelo, con la capacidad de enviar y recibir varios bits al mismo tiempo, más longeva de la historia del hardware informático y su vida va a ser larga con la aparición de su versión 7.0. La cual acaba de ser presentada por PCI-SIG, el consorcio de empresas que se encargan de acordar las especificaciones de las diferentes versiones del PCI Express. De tal manera que exista una compatibilidad total no solo entre los diferentes componentes y fuentes de alimentación que utilizan esta interfaz para comunicarse entre sí.
¿Qué nos trae de nuevo el PCI Express 7.0?
La séptima generación del estándar PCI Express continuará con la tradición de ir doblando el ancho de banda respecto a la anterior. En este caso será capaz de llegar a los 512 GB/s de ancho de banda transmitiendo datos en ambas direcciones en una configuración x16, típica de una tarjeta gráfica. A simple vista se trata de una evolución del PCI Express 6.0 y al igual que este usará codificación PAM4. Esta consiste en que en vez de codificar un valor 0 o 1 por cada pin de envío pueden codificar los valores 00, 01, 10, y 11. Lo que significa que se puede duplicar el ancho de banda sin subir la velocidad de reloj a través de simples variantes de voltaje. Sin embargo, al igual que con la Gen 6, la Gen 7 también mantiene la compatibilidad hacia atrás con las versiones anteriores del estándar.
Hemos de partir del hecho de que al igual que ocurre con las interfaces de memoria, las interfaces para periféricos se encuentran situadas en el perímetro del chip y, por tanto, en la parte más externa de los mismos. Es importante que las especificaciones se encuentren disponibles varios años por adelantado para así poder construirlas y que los diferentes fabricantes las puedan implementar en sus diseños. Aún quedan tres años para que veamos las primeras interfaces PCI Express 7.0 integradas en los chips que montaran nuestros PC. Por lo que por el momento no deja de ser una promesa sobre el papel.
¿Por qué podría cambiar la forma en la que conocemos los PC?
Una de las extensiones del estándar PCI Express 5.0 que se implementará en futuras extensiones es el llamado Compute Express Link. El cual permite que todos los dispositivos PCI Express compartan el mismo direccionamiento en cuanto a la memoria. De manera simplificada, esto significa que en un futuro podremos ampliar la memoria RAM de nuestro PC desde las ranuras PCIe, lo que dejará completamente inútiles las clásicas ranuras DIMM. Es más, con anchos de banda de 256 GB/s y 512 GB/s será más que suficiente para la mayoría de equipos.
Por lo que en un momento dado, podríamos ver un nuevo estándar de memoria que utilice los puertos PCIe, incluso es posible que veamos módulos de expansión de RAM en formato M.2 como en los SSD NVMe. En todo caso, el próximo paso seguro es el hecho de unificar el direccionamiento del SSD y la memoria RAM. Así como llevar el controlador flash a dentro del procesador, como ocurrió con el de la memoria RAM en su día. Al fin y al cabo se trata de dos piezas muy similares y las altas velocidades del PCI Express 7.0 podrían facilitar dicha transición.