Dentro de la API DirectX 12 Ultimate, una de sus novedades más importantes es que va a ser clave en la transición del uso de discos duros convencionales a unidades SSD NVMe para el almacenamiento de los juegos. Pues bien, por fin, después de mucho esperar y con las Xbox Series teniendo ya dicha función, por fin los Microsoft acaba de lanzar la API DirectStorage para Windows 11.
En el mundo del hardware veréis siempre repetida la siguiente frase: «tu sistema es tan rápido como le permita su componente más lento». Durante años el disco duro no ha sido el mayor cuello de botella en los juegos, pero a medida que los juegos se iban haciendo más complejos, la necesidad de transferir grandes volúmenes de datos y con la menor latencia posible se hizo cada vez más palpable. Lo cual dejo totalmente fuera de circulación el almacenamiento óptico como Blu-Ray y el DVD como formato para juegos.
Por lo que evolutivamente el siguiente formato en desaparecer de nuestros PC será el disco duro y es que los SSD NVMe tienen varias ventajas. El primero y más obvió es la capacidad de poder transferir datos no solo a varios gigabytes por segundo, sino a decenas con las futuras interfaces. Mientras que el disco duro no puede saturar siquiera la interfaz SATA debido a la naturaleza física de este.
La API DirectStorage ya se encuentra disponible en PC
Después de una larga espera por fin los desarrolladores de aplicaciones en Windows 11 ya pueden utilizar la API DirectStorage, la cual forma parte de DirectX 12 Ultimate y se convertirá en la fuerza principal para dos fenómenos que ocurrirán en los próximos años. El primero es la transición a Windows 11 de los diferentes juegos del mercado, el segundo será el abandono del disco duro en los juegos por los SSD NVMe. Este último punto ya lo estamos viendo en los nuevos portátiles gaming que se han lanzado últimamente, ya que ninguno de ellos viene con disco duro, sino SSD NVMe.
Pese a que la API DirectStorage tiene una capa de compatibilidad hacia atrás que permite el uso de SSD SATA en Windows 10, su máximo potencial lo alcanza con los SSD NVMe conectados a través del puerto PCI Express. Esto le permite a la tarjeta gráfica acceder de manera directa a los contenidos de dicha unidad sin que se los tenga que proporcionar la CPU. Lo cual significa un recorte considerable en el acceso a los datos gráficos de los juegos y, por tanto, una ganancia de rendimiento. Por el momento solo las GPU con total compatibilidad con DX12 Ultimate pueden usar esta función. Esto son las RTX 20 y RTX 30 de NVIDIA a través del mecanismo RTX IO y las AMD RX 6000 de AMD.
Desgraciadamente, los códecs de compresión y descompresión por hardware incluidos en las consolas de nueva generación son inéditos en el PC. Dado que las soluciones de NVIDIA y AMD funcionan distintas. No obstante, es completamente normal, más que nada por temas de compatibilidad.
No solo para juegos
Pese a que DirectStorage es una API que se la relaciona mucho con los juegos, al formar parte de DirectX, en realidad va a potenciar a varias aplicaciones multimedia. El más claro de todos será el de los editores de vídeo que verán su velocidad de acceso a la línea de tiempo acelerado y las plataformas de streaming, ya sea para la emisión de contenido audiovisual continuo o a través del Cloud Gaming. De cara a la edición de fotografías nos permitirá acceder a archivos muy grandes a una gran velocidad y sin problemas de rendimiento.
En todo caso y ya para terminar, se espera que sean los juegos a través del requisito de utilizar el SSD los que van a acabar liderando el cambio. Al mismo tiempo, no nos podemos olvidar la existencia de otros formatos de memoria flash que están adoptando la interfaz PCIe y que se beneficiarán también de la API DirectStorage. Por lo que estamos no solo ante un cambio para los PC Gaming, sino para todas las gamas del mercado.