Hace unos días os contábamos que había escasez de chips de 14 nanómetros, razón por la que la industria podría resentirse. Un nuevo informe revela que esta situación ya está sucediendo, pues los procesadores más populares de Intel de su octava generación ya están quedándose sin stock en los principales distribuidores y tiendas, y las pocas unidades que quedan están viendo su precio incrementado.
La octava generación de procesadores de Intel, Coffee Lake, parece que no deja de tener problemas de stock de una u otra manera, puesto que ya desde su lanzamiento hubo escasez de stock y no fue hasta pasados dos meses desde su lanzamiento que pudimos encontrar unidades disponibles en las tiendas. Ahora, tal y como indicábamos al principio, parece que hay de nuevo escasez de stock y el precio se está resintiendo en muchas de las tiendas que todavía tienen unidades en stock; otras muchas, ni siquiera tienen ya unidades disponibles.
Los Core i5-8400, Core i5-8600K y Core i7-8700K suben de precio
Estos tres modelos de procesador de Intel son los más populares entre los usuarios, y por ende los que más se han vendido desde su lanzamiento. Y como tal, son los que más demanda tienen y los primeros en agotar existencias, produciendo como consecuencia que las tiendas que todavía tienen unidades a la venta hayan engordado sus precios.
En las siguientes gráficas podemos ver la evolución del precio de estos tres modelos de procesador desde el 15 de Mayo de este año hasta el 4 de Septiembre en algunas de las principales tiendas de Estados Unidos, principal mercado de Intel.



En las gráficas de evolución de precios podemos ver claramente un incremento de precio desde finales de julio, siendo el Core i7-8700K el menos afectado por el momento porque también es el más caro de los tres y, de nuevo entre estos tres modelos de procesador, el que menos se vende.
Intel podría estar haciendo hueco para la novena generación
Una explicación bastante plausible para esta situación es que Intel esté haciendo hueco para el nodo 14 nm++ que utilizará en la novena generación de procesadores Intel Core, que debutará con tres modelos: Core i5-9600K, Core i7-9700K y Core i9-9900K. Probablemente Intel querrá lanzar estos tres procesadores no solo a precios competitivos, sino con suficiente volumen disponible para que no suceda lo mismo que cuando lanzaron Coffee Lake.
Sin duda Intel querrá vender tantas unidades de la novena generación como sea posible para “ganar” la carrera a AMD en 2018, y reparar dentro de lo posible la pérdida de competitividad que han sufrido frente a la segunda generación de procesadores Ryzen que de momento se está llevando el gato al agua en este año.
Veremos cómo quedan las cosas finalmente, pero lo que es indudable es que Intel está pasando por un momento un poco complicado entre la escasez de chips y con AMD ganándoles cada vez más terreno, hasta el punto de que ya han vendido más procesadores que ellos en lo que va de año.