Centralita virtual vs centralita física para telefonía, ¿Cuál es mejor?

Centralita virtual vs centralita física para telefonía, ¿Cuál es mejor?

Rodrigo Alonso

Es posible que muchos de vosotros hayáis oído hablar de las centralitas virtuales o en la nube, una tecnología que permite disgregar equipos en las empresas -o incluso hogares- para ahorrar costes y mantenimiento, y a su vez implementar tecnologías de integración con software, como por ejemplo Skype. En éste artículo vamos a discernir las diferencias entre las centralitas físicas y las virtuales, y determinar qué opción es mejor en cada caso.

La centralita física

Es el tipo que hasta hace unos años había en todos lados. Toda la telefonía se centralizaba en un solo equipo, que distribuía de manera física las conexiones de los teléfonos (si hablamos en una oficina, por ejemplo). Esto supone que tenemos que tener, obligatoriamente, la propia centralita física con su consumo eléctrico y su mantenimiento correspondiente, además de todo el cableado necesario para distribuir la línea hacia todos los terminales que queramos conectar.

La ventaja de éste sistema es que, tras la inversión inicial de los equipos y la instalación del sistema de cableado, el mantenimiento es escaso, si bien es cierto que con el paso de los años quedará obsoleta o se estropeará y tendremos que cambiarla.

La centralita virtual

Con un sistema de centralita virtual en la nube, un tercero se ocupará de todo, literalmente. Nos proporcionará un número de teléfono asociado y unos terminales que simplemente conectaremos a la red para tener acceso a Internet, y las llamadas se realizarán y recibirán bajo el protocolo VoIP. Cualquier modificación o nueva implementación es más sencilla puesto que no necesitaremos hardware ni cableado de por medio que dificulte todo, sino que cualquier modificación es a nivel de software.

La desventaja de esto es que si por cualquier motivo (fallo, avería, router que se muere, etc.) nos quedamos sin Internet, también nos quedaremos sin teléfono. No obstante la mayoría de sistemas de telefonía IP cuenta con la opción de que si el cliente se queda sin Internet puede habilitar un desvío a través del teléfono tradicional, así que tampoco es un gran problema. Y por cierto, por si tenéis curiosidad, el ancho de banda que consume una oficina con 15 puestos con telefonía IP no llega a 1 Mbps.

Las ventajas de la centralita virtual – Ejemplos

Claro, hoy en día todo tiende hacia las centralitas virtuales. Es ley de vida, pues nos proporcionan una mayor integración, más versatilidad ante cualquier cambio, no requieren mantenimiento y además no hay que hacer una inversión inicial, pues simplemente pagaremos las cuotas mensuales que acordemos y listo.

Por ejemplo, hay empresas que ofrecen soluciones que permiten integrar la telefonía con sistemas de mensajería instantánea como Skype, Telegram o Facebook Messenger, de manera que en el mismo chat podremos recibir notificaciones de llamadas perdidas, SMS, buzón de voz, etc. También podremos integrarlo con otras soluciones como Skype for Business que nos permitirá incluso llamar desde el ordenador.

Las soluciones avanzadas – y algunas “gratuitas”

Hay soluciones avanzadas y relativamente gratuitas (con esto me refiero a que tú creas la centralita y todas sus gestiones son gratis, pero lógicamente sí tienes que pagar por el número de teléfono asignado y por el consumo que hagas con las llamadas) como la que ofrece Zadarma (Telefonía IP Zadarma). Permite crear una centralita virtual en un sencillo proceso que no lleva más de 5 minutos e incluso conectar varias oficinas a la misma red telefónica.

Se asignará un número de teléfono, y dentro de éste tendremos tantas extensiones internas como necesitemos, pudiendo realizar varias llamadas al mismo tiempo desde el mismo número sin problemas. Ofrecen además la posibilidad incluso de programar un call-center si se quiere, y cuenta con integración con Bitrix24AmoCRMPlanfix e interfaz API para otros sistemas.

En conclusión

Como palabras finales, nosotros nos quedamos con la centralita en la nube, pues salvo por el punto de que si te quedas sin Internet también te quedas sin teléfono (y para eso en las empresas se contratan líneas redundantes o similares) todo son ventajas: es más barato, no requiere mantenimiento, las modificaciones son más rápidas y sencillas de realizar, y hay unas grandes posibilidades de integración con software.

Echadle un vistazo a la web de Zadarma, que es la que hemos utilizado para el ejemplo, si queréis más información.

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