Las noticias y especificaciones sobre la séptima generación de procesadores de Intel, Kaby Lake, son bastante escasas y por lo tanto aunque ya conocemos la mayoría de características que nos deparan ninguna ha sido confirmada de momento. Una nueva filtración que ha tenido lugar en éstos días nos ha dado a entender que los próximos procesadores Kaby Lake están lejos de suponer una revolución con respecto a los actuales Skylake, pues serán una mera evolución en el proceso tick-tock habitual del fabricante y solo encontraremos algunas optimizaciones, pero ningún cambio significativo.
Un documento PCN (Product Change Notification) que se ha filtrado directamente desde un fabricante informa a los consumidores de un cambio en el proceso de fabricación de los nuevos procesadores. En éste PCN Intel detalla una nueva fábrica en Vietnam que trabajará para «mantener la continuidad y el abastecimiento de los próximos Intel Xeon E3-1205, Core i5-7400, Core i5-7400T, Core i5-7500, Core i5-7500T, Core i5-7600, Core i5-7600K, Core i5-7600T, Core i7-7700, Core i7-7700T y Core i7-7700K».
De acuerdo a lo que dice el documento, que podéis ver un poco más abajo en imágenes, Intel lanzará de inicio 11 procesadores quad core. Los chips mantendrán la nomenclatura habitual del fabricante teniendo en cuenta sus núcleos y si tienen o no hyper threading. Como ha sucedido en el pasado, Intel tendrá variantes de alto rendimiento «K» con multiplicador desbloqueado y 95W de TDP, variantes «T» de 35W de TDP y los procesadores estándar de 65 vatios de TDP.



En términos de arquitectura, no hay mucha diferencia con respecto a la generación actual, Skylake, y solo encontraremos algunas optimizaciones y mejoras aquí y allí, pero nada sustancial. Por lo tanto la conclusión final que podemos sacar es que Kaby Lake será tan solo una evolución con respecto a Skylake, con algunas mejoras sobre todo de eficiencia pero poco más. No existe una revolución en la séptima generación de procesadores de Intel.