No cabe duda de que estamos en la «era de la movilidad«, con cada vez más dispositivos pensados para llevar encima (o puestos, como los «wearables«), y donde el principal problema es sin duda la autonomía de batería de estos dispositivos, por lo que el uso de las baterías externas está casi a la orden del día. En Ampy han tenido una brillante idea: crear una batería portátil que se recargue mientras caminamos. ¿Cómo? Os lo contamos a continuación.
Los desarrolladores de esta batería portátil lo definen como un dispositivo «wearable», aunque parece bastante exagerado e incluso pretencioso a decir verdad. En cualquier caso, es una batería pensada para llevar con nosotros, sobre todo en el bolsillo, ya que es capaz de recargar su batería interna gracias al movimiento, capturando la energía cinética cuando caminamos (o lo agitamos) y siendo capaz de almacenarla en su interior para después utilizarla.
Según los desarrolladores, Ampy es capaz de ofrecer 3 horas de autonomía a un smartphone normal caminando 10.000 pasos (la media que hacemos al día), montando en bicicleta durante una hora o corriendo durante 30 minutos. No es que sea mucho, pero ya es bastante más de lo que ofrecen las baterías externas convencionales, y a decir verdad la idea tiene bastante buena pinta en esencia, aunque la ejecución está todavía evidentemente por pulir un poco.
Hay que decir que Ampy comenzó, cómo no, con una campaña de kickstarter, la cual tuvo una gran acogida y lograron triplicar el objetivo propuesto para su creación. Ahora ya están preparando el lanzamiento, y calculan que llegará al mercado a mediados de 2015. Su precio de partida será de 95 dólares, un poco caro, la verdad.