Hace unas semanas ya os hablamos de este nuevo invento de Silverstone, el cable SATA acodado y ultrafino Silverstone CP11. Una de estas unidades ha caído en nuestras manos y como siempre os contamos nuestras impresiones de primera mano utilizándolo en nuestro banco de pruebas.
La principal función de este artilugio es ser utilizado en sistemas de factor de forma pequeño donde el espacio es crucial, pero sobre todo para usuarios que tienen tarjetas gráficas de gran tamaño que dejan los puertos SATA de la placa base tapados. Si las placas base tienen los SATA girados 90 grados no hay problema, pero todavía hay muchísimas placas que tienen estos puertos mirando hacia arriba. Para estos usuarios, el cable Silverstone CP11 es especialmente útil.
Hay poco que decir de estos cables en cuanto a características técnicas, salvo que tienen una longitud de 30 centímetros y su interfaz es SATA 6 Gbps. La peculiaridad es que son totalmente acodados y el cable es ultra fino, de manera que podríamos utilizar todos los puertos SATA de la placa base sin interferir unos cables con otros y, además, instalar tarjetas gráficas grandes que tapen estos puertos. En las siguientes imágenes lo vais a ver claramente.
Estos Silverstone CP11 vienen en un blíster de plástico individual para cada cable, dejando ver el propio producto ya desde el principio. Por si todavía no os habíais fijado, el conector es de color negro y el cable de color azul brillante.
En la parte trasera del embalaje encontramos las especificaciones y una breve descripción. Silverstone nos insta a prestar especial atención porque estos CP11 tienen una longitud de 30 centímetros, es decir, son 20 centímetros más cortos que los cables SATA normales que miden medio metro.
Aquí podéis ver el CP11 ya fuera de su blíster de plástico.
A pesar de lo pequeño que es, Silverstone ha encontrado sitio para poner su logotipo.
A continuación podéis ver el Silverstone CP11 ya conectado en la placa base. Como podéis ver ocupa muy poco sitio y no da ningún problema para utilizar los demás puertos SATA de la placa. Además, tal y como se muestra en la imagen de la primera explicación que dimos, deja espacio suficiente para instalar tarjetas gráficas que lleguen a tapar los puertos SATA de la placa base sin interferir.
Aunque los cables son flexibles, están bastante duros para doblarlo, no son precisamente endebles. Por cierto que en el conector que va a los discos duros también está acodado, es decir, se conecta de la siguiente manera.
Como véis, un producto muy útil que ayudará a mucha gente a evitar problemas en sus sistemas, pero eso sí, teniendo en cuenta que están diseñados para equipos de factor de forma pequeño ya que están limitados por sus escasos 30 centímetros de longitud.
En cualquier caso nos parece un producto muy interesante y le otorgamos nuestra recomendación por su diseño que, cuando menos, es innovador.