Más de una vez nos encontramos con que de repente la imagen parece emborronarse mientras jugamos con nuestro PC provocando que la calidad de imagen y, por tanto, la experiencia para el usuario empeora en el proceso. Os explicamos cómo solucionar el problema del Ghosting de forma fácil y sin gastar dinero.
De todos los artefactos de imagen que resultan molestos a nuestra vista uno de los más comunes el del problema del Ghosting. Sin embargo, el problema del Ghosting es el que menos complicaciones tiene a la hora de ser resuelto por parte del usuario y es algo que puede hacer cualquiera, a pesar de las muchas molestias que despierta y que, normalmente, hace prácticamente injugable cualquier videojuego que ejecutamos con el PC.
Ghosting en un monitor, ¿qué es eso?
Se trata de lo que llamamos un artefacto u error de imagen y, por tanto, de algo que no deberíamos ver en nuestras pantallas. Este se da cuando aparece un rastro de píxeles detrás de un objeto en movimiento y que en consecuencia ha cambiado su posición en pantalla de un fotograma a otro. Esto emborrona la definición de la imagen y es molesto a nuestros ojos, ya que nuestro cerebro detecta fácilmente esta incoherencia visual y le produce incomodidad. Eso sin contar lo mucho que afecta a la propia partida en aquellos títulos donde dependemos de apuntar a objetivos que deberíamos poder ver nítidos.
No obstante, no estamos ante un problema que se traduzca en un desperfecto o un mal estado de salud de nuestro monitor. En comparación con otros, como por ejemplo el quemado o la retención de imagen que significan daños irreversibles en el panel, el Ghosting es relativamente benigno. Aunque resulta relativamente molesto especialmente cuando estamos jugando.
¿Cuáles son las causas del Ghosting?
El motivo principal es el tiempo de respuesta del monitor, es por ello que los monitores con cifras altas en este aspecto tienden a producir este problema. En este punto si hemos comprado un monitor LCD deberemos mirar qué tipo de panel llevan, ya que si hemos optado por uno del tipo VA entonces habrá más posibilidades de que veamos este problema respecto a si hemos escogido uno del tipo TN o IPS.
No obstante pueden existir otras causas, las cuales son totalmente externas y que describiremos a continuación, así como su solución, que tiene que ver con un diagnóstico claro y una aplicación de un remedio a través de Windows.
Cómo reparar un monitor con Ghosting
En primer lugar, no te preocupes si no tienes ni idea de montar y desmontar piezas de electrónica, ya que no te hará falta sacar ni un solo destornillador para solucionar el problema del Ghosting, aunque claro está, primero lo tendrás que diagnosticar.
Es por ello que lo primero que haremos será hacer el test UFO para saber si tu monitor sufre de problemas. ¿Cómo lo interpretamos? Pues si ves la señal Ready en verde entonces no tendrás ningún problema, pero el benchmark te avisará de algunos problemas visuales que pueda haber en tu pantalla aparte del Ghosting. En el caso de que no supere el test entonces es que tu monitor tiene dicho problema. Veamos a continuación lo que has de hacer para repararlo.
Todas las soluciones que os vamos a mostrar a continuación son jerárquicas, por lo que cada solución que veréis a continuación depende si la anterior que ha sido propuesta no ha servido para solucionar el problema. Así que nuestra recomendación es que las probéis una por una y en el orden que os describimos a continuación.
Actualiza los drivers de la tarjeta gráfica
Cada vez que NVIDIA, Intel y AMD lanzan actualización de sus drivers mencionan de tanto en cuanto problemas relacionados de sus GPU con ciertos monitores en concreto o de la tarjeta gráfica con todos los monitores en general. Aunque el Ghosting no es un problema que se mencione no está de más que tengas los drivers de la gráfica actualizados. Cada nueva actualización de los drivers implica mejoras de rendimiento y, en ocasiones, es necesaria para poder disfrutar de algunos juegos, especialmente lo que tienen elevados requisitos gráficos.
Lo mismo podemos decir de los del monitor, ya que algunos modelos hacen uso de controladores propios que nos permiten acceder desde el PC a sus características únicas, así como le marcan al hardware gráfico como comunicarse. Un driver en mal estado puede ser la causa del problema del Ghosting en tu monitor, así que mantenlo bien actualizado. Para actualizar los drivers de la tarjeta, tan solo debemos abrir la aplicación para que esta compruebe en ese momento si existe una nueva versión para invitarnos a descargarla.
Ajusta los parámetros del monitor
Si actualizar los drivers no da resultado entonces lo que tendrás que hacer es ajustar los parámetros del monitor. Todos ellos deben tener un botón que te permita acceder al menú de configuración del mismo. Pues bien, una mala configuración de ciertos parámetros del monitor puede llevar al problema del Ghosting, así que deberás probar diferentes ajustes hasta que veas que el problema ha desaparecido por completo.
¿Y cuáles debería comprobar? Pues especialmente la reducción de ruido, el contraste dinámico, la suavidad al movimiento y el Perfect Clear. Los cuales si están a ciertos niveles pueden provocar un problema de Ghosting en tu monitor. Recuerda que muchas tecnologías de suavizado de imagen que añaden los fabricantes de pantallas suelen producir movimientos suaves pero que a la hora de jugar no nos sirven. Desactívalos si los tienes en tu modelo.
Si el monitor incluye de forma predeterminada diferentes perfiles de juego, como la mayoría de los monitores gaming, es recomendable, antes de realizar un cambio en los ajustes de configuración probar estos perfiles dedicados dependiendo de a qué tipo de juegos estén enfocados. Si el monitor no incluye perfiles ya creados, entonces si debemos adentrarnos en las opciones de configuración que hemos mencionado y acordarnos de guardarlo en el monitor.
Comprueba el cable de vídeo
Tanto si utilizas DisplayPort como HDMI puede que el problema del Ghosting no se encuentre en el monitor, sino en el cable que envía la señal de vídeo hacía el mismo que puede estar defectuoso. En dicho caso el problema sería que no se envían los datos con la suficiente velocidad provocando que el tiempo de respuesta con el monitor aumente. ¿La solución? Es sencilla, simplemente has de cambiar el cable por otro con especificaciones iguales o superiores al que tenías antes y revisar si el problema persiste.
Si buscamos un cable HDMI, veremos como en el mercado hay modelos compatibles con HDMI 1.4 y HDMI 2.1. Mientras que los primeros están diseñados para enviar la señal a un monitor externo con hasta 1080p de resolución, los cables HDMI 2.1 permiten enviar la señal en resolución 4K. Si tienes pensando renovar el cable HDMI que va del monitor al PC, por un poco más, es recomendable optar por el que sea compatible con HDMI 2.1. De esta forma, también vamos a evitar problemas de calentamiento en los puertos, algo que, desgraciadamente, es bastante habitual en los cables económicos de este tipo y que, con el tiempo puede afectar tanto al monitor como a la gráfica a la que está conectado.
Comprobar que el conector no está dañado
Si hemos reemplazado el cable HDMI o DisplayPort que utilizamos para enviar la señal del PC a un monitor, y seguimos con el mismo problema, otro apartado que también debemos comprobar es los puertos de la gráfica y del monitor están dañados.
Si se trata de un monitor con diferentes entradas de vídeo, ya sean HDMI o DisplayPort, debemos comprobar si el problema de Ghosting se reproduce utilizando otros puertos. Si no es así, el problema está en el puerto que estamos utilizando.
Pero, sino es así, debemos probar utilizando alguna de las otras salidas de la tarjeta gráfica, ya que estas generalmente incluyen un puerto HDMI y varias DispalyPort. Si solucionamos el problema, habremos encontrado el motivo. Pero, sino es así, la última opción que nos queda es comprobar el siguiente apartado.
Verifica los periféricos inalámbricos
Aunque pueda parecer sorprendente, a veces ocurre que el problema del Ghosting en tu monitor se puede dar por interferencias provocadas por otros periféricos, en especial por los que utilizan interfaces inalámbricas para comunicarse como WiFi, Bluetooth o conexión por radiofrecuencia. La solución en este caso es simple si quieres evitar el problema del Ghosting, ya que solamente tendrás que alejar los periféricos inalámbricos del monitor para eliminar el problema. Haz pruebas quitando unos y otros hasta que verifiques que ese problema está ocasionado por uno de ellos.
También debemos evitar que el cable esté cerca de un dispositivo electrónico o electrodoméstico ya que este también puede afectar a la calidad de la señal que se envía presentado el efecto Ghosting o cualquier otro que afecte a la calidad de la señal.