La controversia sobre le hecho de que Apple haya cambiado Intel por procesadores propios bajo arquitectura ARM está lejos de acabarse. Estrategia aparte, lo cierto es que el reto de los de Cupertino es gigantesco en cuanto al apartado de software se refiere, ya que poco tienen que ver X86 y sus procesadores con ARM y los suyos, ¿por qué es tan difícil cambiar de arquitectura y cuánta importancia tiene en ello el software?
Apple va a jugar mucho más fuerte que en aquel 2006 cuando por fin dejó IBM para irse a los brazos de Intel. Saltó de una compañía asentada y con músculo para irse con el gigante a una arquitectura donde todo el sector trabaja. En cambio, ahora apuesta por ARM en un entorno que ni mucho menos es similar al de aquella época y las dudas surgen entre sus usuarios.
¿Qué aspecto consume más tiempo en este cambio de Apple e Intel?
Sin duda el diseño e I+D que incluirá el procesador A13 será digno de estudio, puesto que se implementará en 5 nm con 12 núcleos y una serie de mejoras de las que solo hay rumores. Pero esto es algo donde Apple puede decidir en cada momento tanto los tiempos de desarrollo como de optimización de su arquitectura. En cambio, todo lo relacionado fuera de su «burbuja» sea hardware o software les está trayendo serios problemas
Por lo tanto, el aspecto donde Apple va a echar más de menos a Intel no es en el hardware como tal, sino en el apartado de software. Sin querer profundizar demasiado en conceptos técnicos, hay ciertas partes del proceso de optimización que Apple no solamente va a tener que portar en su sistema operativo, sino que todo aquel que quiera ofrecer soporte en su programa tendrá que hacer.
En primer lugar, un simple instalador de dichos programas tendría que poder dar a elegir entre distintas compilaciones según la arquitectura o elegir la correcta de forma automática. Además, tiene que portar una ingente cantidad de código para terminar corrigiendo mucho de él debido a los errores de compilación y sus herramientas.
¿Cómo forzar a millones de desarrolladores a portar su código para tu hardware ARM?
Apple conseguirá portar su código para sus sistemas operativos y entendemos que los fabricantes tendrán que hacer lo propio para con sus drivers. Pero el reto no es ese, el reto está en la comunidad y profesionales que hay detrás del ecosistema Apple.
¿Van a emular la mayor parte del software? ¿Se tendrá que reescribir en parte y perder tiempo y recursos en ello? y por último, ¿les merecerá la pena a estas compañías hacerlo para seguir en el negocio de la manzana?
El tipo de lenguaje usado, compilador y un sin fin de variables pueden hacer que el portar un programa sea tan complicado como ineficiente, donde por mucha potencia que se tenga se consiga un rendimiento paupérrimo. Microsoft e Intel llevan tiempo trabajando en una especie de traductor para ejecutar programas X86 en ARM sin tener que reescribirlos, quizás Apple esté trabajando en algo similar, pero no sabemos si llegará a tiempo y si funcionará tan bien como se espera.
Los desarrolladores tienen que portar millones de aplicaciones para adaptarse a los nuevos dispositivos, y eso cuesta tiempo y dinero, algo que podría encoger el ecosistema de Apple en un gran número. Como vemos, las dudas siguen y seguirán hasta que no veamos el primer dispositivo con ARM funcionar y comprobemos cómo de maduro está todo.
Lo que parece claro es que el salto entre X86 y ARM en Apple será pausado y al parecer irreversible, pero ¿es la opción realmente correcta? ¿qué valor aporta la marca ahora para su hardware? Quizás el diseño e implementación personalizada, algo que no se justificaría si comienzan los problemas de rendimiento, falta de software o mala optimización del mismo.