Sin duda Corsair es, a día de hoy, uno de los principales fabricantes de hardware del mundo, y en su catálogo actual podemos encontrar prácticamente cualquier tipo de producto a excepción de procesadores, placas base y tarjetas gráficas. Dentro de este catálogo, las soluciones de refrigeración líquida para PC tienen ya solera, y de entre estas si os hablamos del Hydro H115i que analizamos en el día de hoy ya son palabras mayores, puesto que hablamos del tope de gama del fabricante.
Así es, hoy entra en nuestro banco de pruebas el disipador de refrigeración líquida tope de gama de Corsair, el Hydro H115i, con un gran radiador de 280 mm y toda la tecnología del fabricante puesta en práctica para brindar el disipador que, teóricamente, nos proporcionará el mejor rendimiento posible dentro de las soluciones de refrigeración líquida de su catálogo, y no es decir poco.
Así, éste disipador de refrigeración líquida todo en uno cuenta con un radiador mejorado de 280 mm de longitud que, por supuesto, está refrigerado por una pareja de ventiladores de 140 mm de alta presión estática para maximizar el rendimiento de disipación de calor. El bloque de CPU tiene también la bomba, y se conecta a un cabezal USB interno de la placa para poder manejar temperaturas, velocidad de funcionamiento y color de la iluminación desde el software unificado Corsair Link.
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS
Tomadas de la web del fabricante.
Como podemos ver, el H115i tiene unas dimensiones considerables en su radiador, así que habrá que tener cuidado a la hora de ver si es compatible con nuestra caja pues necesitaremos que ésta tenga como mínimo 31,2 centímetros de espacio y anclajes para dos ventiladores de 140 mm en serie para que podamos instalarlo. Por lo demás, es compatible con todos los sockets de procesador moderno (incluyendo, aunque no lo pone, AM4 y LGA2066).
ANÁLISIS EXTERNO
El Corsair Hydro H115i viene embalado en una caja sorprendentemente pequeña; he visto sistemas de refrigeración líquida de 240 mm con embalajes mucho más grandes que éste. Encontramos el habitual diseño en negro, blanco y amarillo y en la cara principal podemos ver una imagen del dispositivo junto con sus principales características resumidas.
En la parte trasera tenemos un croquis con las dimensiones, las carácterísticas técnicas a la derecha, y una explicación detallada de los ventiladores, la base de la CPU, el radiador y Corsair Link.
En el resto de los laterales encontramos información adicional, como contenido del paquete, características detalladas, compatibilidad, etc.
Abrimos el paquete y, como es habitual, con lo primero con lo que nos topamos es con el manual de instalación y el panfleto de la garantía.
Así viene embalado el H115i, aprovechando bastante el espacio de la caja.
Vamos como siempre a ver primero los accesorios, y comenzamos con los dos ventiladores SP140L de 140 mm que se incluyen. Cuentan con 9 aspas de superficie mediana y bastante separación pero muy inclinadas para crear una gran presión estática y poder sacar el aire eficientemente a través de las láminas del radiador.
No tienen, lamentablemente, inserciones de goma para absorber vibraciones, algo que veo necesario para un mayor nivel de silencio máxime cuando se trata de ventiladores cuya velocidad máxima de giro es de 2000 RPM, por lo que son bastante ruidosos. El cable no tiene mallado salvo el habitual plástico y terminan en un conector PWM de 4 pines, aunque como veremos más adelante están pensados para ser conectados directamente a un adaptador que trae la bomba de agua y así ser gestionados con Corsair Link.
El resto de accesorios incluye toda la tornillería y herramientas de montaje necesarias para instalar el disipador en cualquier socket moderno de Intel o AMD, a excepción del TR4.
Vamos a ver ya el H115i, y aquí lo tenéis fuera de la caja.
Tiene unas dimensiones considerables, pero por suerte como es habitual los tubos son bastante flexibles a pesar de su diámetro, por lo que es bastante sencillo de instalar.
El lateral del radiador tiene como siempre un adorno estético de color plata y con el logo de Corsair.
Los tubos salen de la cara interior en uno de los extremos para facilitar su instalación en el sentido que mejor nos convenga. Los tubos sí están protegidos por un mallado de hilo de nailon para protegerlos de rozaduras.
El radiador, de 280 mm, tiene la habitual estructura con tubos que van de un lado a otro, unidos con láminas de aluminio en zigzag.
La bomba, que viene con el adaptador para sistemas Intel ya instalado, tiene unas dimensiones no demasiado grandes. Los tubos entran por la zona superior a un lado, dejando espacio para otro embellecedor plateado con el logo de Corsair que se iluminará cuando el sistema esté encendido.
En uno de los laterales tenemos un conector mini USB para conectarlo a un cabezal USB de la placa base y así poder usar Corsair Link.
La base es de cobre, y viene con pasta térmica ya pre aplicada.
Y este es el montón de cables que salen de la base. Tenemos un conector SATA para alimentación, un conector de 3 pines (aunque solo un cable) para dar alimentación a la bomba, y otro conector que nos permitirá enchufar ambos ventiladores.
INSTALACIÓN
La instalación del Corsair Hydro H115i es, igual que en otros sistemas de refrigeración líquida del fabricante, muy sencilla, y solo el tamaño nos puede crear alguna complicación pero dependiendo del espacio que tengamos en la caja. En mi caso, instalándolo en una Corsair Obsidian 750D, ha sido coser y cantar, cero complicaciones.
El primer paso es desisntalar el disipador que tuviéramos antes si es el caso y dejar limpio el procesador y zona del socket.
Ahora preparamos el backplate y la tornillería que vamos a usar. En nuestro caso vamos a instalarlo en el banco de pruebas habitual, con socket LGA1151.
Colocamos el backplate por detrás de la placa y lo anclamos con los tornillos correspondientes.
Ya tenemos preparada la zona del socket, pero el bloque de CPU lo vamos a instalar al final del todo para mayor comodidad. Así pues, preparamos la tornillería para instalar el radiador.
Vamos a instalar los ventiladores sacando aire caliente hacia fuera, así que primero anclamos el radiador al techo de la caja con los tornillos pequeños con arandela.
Una vez anclado, ahora sí anclamos los ventiladores por dentro con los tornillos largos.
Ya anclado el radiador y los ventiladores, tan solo tenemos que colocar el bloque de CPU encima de los tornillos que instalamos al principio y anclarlo con las roscas grandes. Podemos ponerlas con la mano y luego apretarlas más con un destornillador.
Más de cerca.
Ya lo tenemos anclado y colocado, casi listo para funcionar.
El último paso es, lógicamente, las conexiones. Cuesta un poco canalizarlo todo sin que queden por medio, pues tened en cuenta que tenemos tres cables saliendo del bloque de CPU (SATA de alimentación, 3 pines de alimentación y conexión de ventiladores) mas el USB para Corsair Link. Sigo sin entender por qué los fabricantes no ponen todo esto en el radiador y no en el bloque de CPU, facilitaría mucho las cosas.
Ya lo tenemos instalado y listo para funcionar, así que vamos a proceder con las pruebas.
TESTEO
El equipo empleado para las pruebas ha sido nuestro equipo habitual:
- Intel Core i5-6600K @ 4,2 Ghz.
- Asus Z170 Deluxe.
- 4×8 GB Corsair Vengeance RGB DDR4 3000 Mhz.
- Corsair Obsidian 750D.
- Corsair RM1000i.
- Corsair MP500 480 GB.
- Corsair Neutron XTi 480 GB.
- MSI GeForce GTX 1080 Ti Gaming X.
Antes de las pruebas, como siempre, hemos dejado que la pasta térmica se asiente entre el disipador y el procesador durante 12 horas más o menos, con una utilización normal del equipo mientras tanto. Pero antes de realizar las pruebas de rendimiento térmico, vamos a ver qué posibilidades nos ofrece Corsair Link.
El software
Ya conocemos Corsair Link, el software unificado del fabricante que es compatible a día de hoy con casi todos los productos de la marca. Este es el aspecto que tiene en nuestro sistema. El H115i está a la derecha del todo.
Podemos pulsar sobre la bomba (Pump) y configurar su perfil de velocidad. De serie viene en silencioso (Quiet).
Pero sinceramente, en modo rendimiento (Performance) no hace nada de ruido, así que prefiero tenerlo así y las pruebas las hemos realizado con la bomba en Performance.
También podemos configurar la iluminación, incluyendo que cambie de color cuando el líquido alcance cierta temperatura.
Nos permite por supuesto monitorizar la temperatura de manera individual del líquido refrigerante.
Y claro, también podemos configurar el perfil de los ventiladores. Vienen vario preconfigurados: Balanceado, Silencio y Máximo, pero también tenemos el Fixed, que nos permite poner un porcentaje fijo de velocidad (mínimo 40%), y el personalizado.
Incluso en el perfil silencioso los ventiladores me parece que hacen demasiado ruido, así que decido configurar un perfil personalizado con los ventiladores casi al mínimo, y aun así de manera normal estarán girando a unas 1000 rpm, velocidad a la que son casi inaudibles.
Prueba de rendimiento
El rendimiento lo hemos medido en dos escenarios distintos: uno con el perfil personalizado que os hemos mostrado antes, que es un perfil en el que el H115i es prácticamente inaudible, y otro con los ventiladores al máximo. Lógicamente con los ventiladores al máximo las temperaturas mejoran bastante, pero convertiremos nuestro equipo en una turbina de avión: son extremadamente ruidosos funcionando a tope de velocidad.
Mirad cómo queda el asunto de las temperaturas, pasando Prime95 al equipo con el perfil personalizado: la temperatura es más que aceptable, y los ventiladores apenas están girando a 1000 RPM.
Finalmente, el dato de temperatura (como siempre es el delta de temperatura, es decir, temperatura medida menos temperatura ambiente) comparado con otros disipadores que han pasado por éste mismo banco de pruebas.
CONCLUSIÓN
Salta a la vista a tenor de los resultados mostrados que el Corsair Hydro H115i es uno de los sistemas de refrigeración líquida con mejor rendimiento del mercado, incluso con el perfil configurado en modo silencioso. Y no solo es uno de los mejores disipando el calor, sino que además nos proporciona la habitual calidad de Corsair, una facilidad de instalación que es coser y cantar, y un excelente nivel de personalización gracias al software.
Teniendo en cuenta que éste dispositivo no tiene un precio demasiado superior con relación a otros productos de similar categoría en el mercado (149 euros en tiendas de España), la verdad es que sin duda merece la pena para todos aquellos usuarios que busquen el mejor rendimiento sin compromisos.
PROS:
- Excelente rendimiento.
- Muy sencillo de instalar.
- Gran calidad de construcción.
- Altísima personalización a través del software.
CONTRAS:
- Ventiladores muy ruidosos funcionando al máximo.
- Demasiado cableado, y pierdes un cabezal USB 2.0 de la placa para usar Corsair Link.