Al igual que sucede con sus procesadores, parece ser que las tarjetas gráficas de Intel son bastante susceptibles a variaciones en su rendimiento derivadas de las mitigaciones de seguridad. Ya sabéis, esos «parches» en el micro código que lanza el fabricante para solucionar vulnerabilidades y que terminan haciendo que el dispositivo funcione peor. Ahora, Phoronix ha informado que desactivar estas mitigaciones en las gráficas de Intel puede suponer una ganancia de rendimiento de hasta el 20%, lo cual es una barbaridad, aunque por supuesto hacerlo supone poner en riesgo la seguridad. Vamos a verlo con más detalle.
Y es que hay que tener en cuenta que estas mitigaciones de seguridad siempre son para arreglar vulnerabilidades, vulnerabilidades que en muchos casos pueden ser muy peligrosas para los usuarios, porque en numerosas ocasiones suponen permitir accesos no autorizados a información sensible o incluso perder el control del equipo ante ataques maliciosos. Pero claro, es que perder un 20% de rendimiento por ello…
Desactivar las mitigaciones en gráficas de Intel es posible
Canonical, los creadores de la famosa distribución de Linux Ubuntu, está trabajando para intentar desactivar estas mitigaciones de seguridad en su sistema operativo debido, precisamente, al enorme impacto que tiene en el rendimiento de las gráficas de Intel. Al parecer, Intel permite realizar esta tarea a nivel de kernel, lo cual permitiría a Canonical lograr su objetivo sin tener que recurrir a métodos no oficiales.

La propia Intel publica su pila de computación OpenCL y Level Zero en su página de GitHub sin las mitigaciones activadas, por lo que realmente no solo Canonical sino cualquier usuario podría «trastear» con ello de forma completamente libre y legal. En el caso de Canonical es realmente interesante porque en realidad el kernel de Ubuntu ya cuenta con las mismas mitigaciones de seguridad que Intel implementa en sus gráficas, por lo que es tontería tenerlas por duplicado y perder un 20% de rendimiento en el proceso.
Además las mitigaciones de seguridad son específicas para cada arquitectura, y eso significa que el desactivarlas no solo afectará a las gráficas dedicadas Intel Arc sino también a las integradas, y con la cantidad de usuarios que utilizan portátiles básicos con iGPU, estamos hablando de que potencialmente podría afectar a miles de usuarios. Eso sí, no está del todo claro por ahora que Windows cuente también con estas mitigaciones en su kernel, por lo que usar una gráfica Intel sin éstas en un PC con Windows podría ser un riesgo bastante serio.
Spectre fue el inicio de todo
Las mitigaciones de seguridad empezaron a afectar seriamente a los procesadores de Intel cuando se descubrió por primera vez la famosa vulnerabilidad Spectre. Desde entonces, los ingenieros de Intel han tenido que desplegar constantes actualizaciones de seguridad en sus procesadores para combatir oleada tras oleada de nuevas vulnerabilidades de seguridad que se han ido descubriendo y que, por desgracia, cada una de ellas han ido reduciendo el rendimiento de sus productos.

Por ejemplo, ya solo las mitigaciones para combatir Spectre-v2 tuvieron hasta un 35% de impacto en el rendimiento de los chips de Intel parcheados. Es normal, porque las vulnerabilidades suelen afectar a componentes centrados en el rendimiento, como el predictor de bifurcaciones, y para mitigarlo se tienen que modificar estos aspectos, impactando al rendimiento.
Pero ojo, que los productos de AMD también se han visto afectados por esto mismo, aunque en general son menos sensibles a las caídas de rendimiento debido a que sus chips son menos susceptibles a la explotación de vulnerabilidades que los de Intel. No obstante hay excepciones, como por ejemplo Inception que afectaba a los chips Zen 3 de AMD.
En cualquier caso, la buena noticia es que las tarjetas gráficas no son las que ejecutan el sistema operativo, por lo que las medidas de seguridad en la GPU son mucho menos importantes que las que afectan al procesador, especialmente en el mercado de consumo.