Jim Keller, creador y responsable del éxito de la arquitectura Zen y los procesadores Ryzen de AMD que fichó por Intel en 2018, ha hablado en una entrevista del futuro de los procesadores Intel Core, y más concretamente sobre su arquitectura. Según Keller, las futuras CPUs Intel serán modulares y empezaríamos a ver este diseño ya desde el año 2022.
Si hay una figura importante dentro de Intel relacionada con la arquitectura de sus CPUs, esa es Jim Keller. Conocido como «el padre de Zen» (o Ryzen), Keller se unió a Intel hace dos años para liderar el desarrollo de CPUs de siguientes generaciones. No obstante, para ese momento los planes a futuro de la compañía ya estaban hechos, y no ha sido hasta ahora que la influencia de Keller ha empezado a tener efecto en los futuros lanzamientos de la compañía.
Las próximas CPUs de Intel serán modulares
En una entrevista exclusiva con la revista Fortune, Keller habló sobre algunas de sus ideas para el diseño de los futuros procesadores de Intel, ideas que por supuesto deben estar como mínimo siendo trabajadas desde su fichaje en 2018. Según ha comentado, esperan diseñar módulos flexibles para satisfacer las necesidades de rendimiento y eficiencia que se espera de los procesadores de la marca, e incluso consideran la integración de módulos centrales de terceros hasta para procesadores de servidores.
Desde el punto de vista del contenido, Jim Keller dijo que este diseño deberíamos empezar a verlo en los procesadores Alder Lake que llegarán, si todo va como tienen planeado, hacia 2022 junto con su nueva tecnología de fabricación a 10 nm y bajo el socket LGA1700.
Estos datos van en la línea de lo que ya llevamos tiempo comentando; por un lado, la posibilidad de que Intel empiece a utilizar arquitectura MCM (multi chip module) en sus procesadores, algo que los dotaría de una mayor versatilidad, y por otro lado los procesadores con arquitectura heterogénea del tipo big.LITTLE que integra núcleos de bajo consumo para tareas cotidianas y núcleos más potentes cuando se demanda una mayor potencia del procesador.
Ahora faltaría ver cuándo se implementa esto realmente, o si realmente llega a implementarse ya que lo que ha dicho Keller son puramente sus «ideas», y no hay confirmación oficial de la compañía como tal. En todo caso, Keller tiene una amplia experiencia en cuanto a la arquitectura de procesadores de alto rendimiento y si hay alguien con autoridad para realizar dichas afirmaciones, debe ser precisamente él.
¿Qué podemos esperar de los futuros procesadores de Intel?
Como hemos mencionado al principio, es normal que aunque Keller llegara a Intel con una gran experiencia y muchas ideas innovadoras, no las hayamos visto implementadas todavía porque solo han pasado dos años desde su «fichaje», y por supuesto la compañía ya tenía sus planes hechos para los próximos años. Sin embargo, ya se está empezando a notar su influencia, y el futuro de Intel ahora parece más prometedor que nunca (especialmente si consideramos el bajo volumen de ventas que están teniendo actualmente, con AMD destrozándolos en todos los mercados).
Contestando a la pregunta, lo que podemos esperar para la próxima generación de procesadores es una mera mejora de eficiencia, representada en un incremento de rendimiento a base de aumentar las frecuencias de funcionamiento, y puede que un poco en el IPC. Pero según estos datos que ha dado ahora Keller, será en la 12ª generación de procesadores Intel Core donde de verdad empezaremos a ver cambios sustanciales en la arquitectura, que por supuesto deberían representar unas mejoras ahora sí mucho más notables.
Más rendimiento, mejor eficiencia y más versatilidad. Ahora falta saber si Intel mantendrá su política de precios o si, por el contrario, se dan cuenta de que AMD les está comiendo todo el terreno a este respecto y deciden cambiar de postura.