Una de las funciones de la tecnología es la de hacernos la vida más fácil. Es decir, reducir el esfuerzo a la hora de hacer un trabajo o permitirnos cosas que por nosotros mismos por nuestras limitaciones físicas no podríamos hacer. Pues bien, una de las funciones básicas es el comer y es por ello que os vamos a hablar de la interacción entre nuestro PC y los aparatos de cocina. Concretamente de los hornos inteligentes que ya están cambiando la forma de preparar comidas para mucha gente.
Todavía falta mucho para que tengamos un robot encargado de hacernos la comida; sin embargo, nada podrá cambiar jamás el trabajo, esmero y mimo de alguien a quien le gusta cocinar. Sin embargo, nosotros no preparamos nuestros platos como lo hacían las generaciones anteriores y buena parte de la culpa la tienen las nuevas tecnologías que han ido apareciendo con el tiempo. Sin embargo, es gracias al internet de la cosas y la capacidad para poder interconectar los dispositivos entre sí que se abre la posibilidad de poder estar tranquilamente desde el ordenador y cocinar.
¿Qué son los hornos inteligentes?
Un horno inteligente es un aparato de cocina con las mismas funciones básicas que un horno, pero que aprovecha la tecnología actual para añadir nuevas características a las que ya tienen los convencionales. Su principal particularidad es que disponen de una conexión Wi-Fi Direct que nos permite comunicar nuestro horno con un ordenador; sin embargo, el funcionamiento es a la inversa que una impresora. Dado que son los hornos inteligentes los que envían información a nuestro PC, en forma de vídeo.
Su particularidad es que disponen de una serie de sensores internos, los cuales permiten controlar la temperatura dentro del horno, el nivel de humedad y demás informaciones que son claves para conseguir un plato perfecto. Al mismo tiempo nos permiten crear programas y por ejemplo ir haciendo variaciones de temperaturas concretas con el tiempo, decidir el lado por el cual se cocina un plato y con qué intensidad. Aunque la mejor característica de todas es que disponen de una cámara de alta resolución que nos da una visión a tiempo real de lo que se cuece.
También tienen algunas características que no se encuentran en un horno convencional y son mejores que un microondas, ya que por ejemplo podemos precalentar de forma controlada la comida que tengamos guardada. Además, muchos de ellos son compatibles con asistentes de voz como Alexa, lo que facilita todavía más su uso.
Más simples de usar que un botijo
La enorme cantidad de sensores que tienen en su interior harán que estos evolucionen con el tiempo para facilitar al máximo el poder cocinar sin necesidad de intervención humana en todo el proceso. No en vano, gracias a algoritmos de reconocimiento de imagen a través de inteligencia artificial pueden saber qué ingredientes estamos colocando en su bandeja y saber que platos pueden preparar con ello. Algunos además son tan avanzados que tienen mecanismos de control de la humedad. Algo que solo se encuentra en restaurantes profesionales y es por estas cosas que terminarán por jubilar a los clásicos microondas, más que nada por el hecho que suelen ser más pequeños que un horno convencional.
¿Lo malo de todo ello? No se han prodigado en España y es que no se encuentran a la venta en nuestro país, a excepción de sitios especializados muy concretos. Sin embargo, usarlos supone un antes y un después. Y es que los hornos inteligentes son excelentes para introduciros en la cocina si sois torpes.