Una impresora 3D no funciona por sí sola. De la misma manera que es necesario crear documentos para imprimir en una convencional, también necesitamos hacerlo en estos modelos. Aunque, obviamente, vamos a necesitar aplicaciones especializadas. Es por ello que hemos decidido hacer una guía rápida acerca de las aplicaciones para impresora 3D que necesitas para poder trabajar con estos dispositivos.
Una de los mitos comunes a la hora de utilizar una impresora 3D es que a la hora de realizar la impresión es igual que con un documento normal. Es decir, creamos la composición y la enviamos de manera directa a la impresora con darle a una opción. No obstante, con la impresión 3D no es así y existe un nivel de complejidad adicional. Esto se debe a que se necesita crear un documento que le diga a la impresora 3D como ha de efectuar la impresión de la figura. En realidad, el concepto es el mismo que el del formato PostScript para la impresión convencional. Es decir, una serie de instrucciones que le indican como ha de hacer su trabajo.
¿Cuál es el software que necesitamos para nuestra impresora en 3D?
Cuando nosotros mandos a imprimir un documento, el archivo que recibe nuestra impresora convencional no es el mismo con el que guardamos el archivo. Dado que mientras uno describe el archivo, el otro describe que se ha de hacer para generar una versión en papel del documento. Pues bien, la gran mayoría de programas de diseño 3D no se basan en los mismos principios para componer una figura que una impresora en 3D y por eso es necesario una serie de aplicaciones adicionales que lo que hacen es transformar dicha información para que la impresora pueda hacer su trabajo correctamente. Así pues, de cara al diseño para imprimir en 3D tenemos una serie de etapas clave que son siempre las mismas. Esto significa que necesitamos un tipo de aplicación distinta para las diferentes etapas de creación.
Aplicaciones para diseñar para una impresora 3D
La primera de ellas creación del modelo 3D a través de una aplicación especializada para ello. Hemos de partir de que en el mundo del diseño en 3D podréis ver que existen una gran cantidad de aplicaciones distintas. Por lo que al contrario que en otros mundos no se ha tendido a un monopolio como ha ocurrido con Photoshop en diseño u Office en ofimática. Esto es debido a que hay aplicaciones que si bien son muy buenas para diseñar personajes de videojuegos, son nefastas para piezas mecánicas. Un ejemplo de este tipo de aplicaciones es Autodesk TinkerCAD.
Aplicaciones para el slicing de los modelos
El segundo paso es lo que en inglés se llama slicing o rebanado. No nos olvidemos que la impresión 3D se basa en ir acumulando partículas calientes para crear un sustrato que se va acumulando hasta conseguir la figura final. Lo cual requiere el uso aplicaciones toman la información de cada modelo y crean una versión en rodajas para la impresora en 3D. Un ejemplo de estas aplicaciones Ultimaker Cura.
Este tipo de aplicaciones nos permiten controlar una serie de parámetros clave como preprogramar la forma en la que trabajará la impresora en las diferentes partes. La cantidad de material, la velocidad de funcionamiento y muchas otras. Los usuarios más noveles no necesitarán más que esta sección y darle toda la confianza a la impresora 3D que se encargará de imprimir lo que hemos diseñado previamente.
Aplicaciones para controlar la impresora 3D
Ya para terminar, tenemos la impresión final. Los usuarios con menos conocimientos dejarán que el sistema imprima por sí solo y no se preocuparan de lo que ocurra durante la impresión de la pieza. Sin embargo, por la naturaleza de los diferentes filamentos o materiales utilizados en la impresión 3D, se hace necesario controlar la impresora 3D mientras esta se encuentra trabajando. Hablamos del control a tiempo real sobre el ventilador, la cama caliente, etcétera. Y más cuando tenemos una gran cantidad de filamentos y materiales distintos. Un ejemplo de aplicación para esta tarea es Octoprint.
La monitorización no es obligatoria para todos los materiales de impresión, pero en algunos casos es necesario que haya un control sobre la misma. Ya que ciertos materiales necesitan de un control a tiempo real mientras se está imprimiendo con ellos. Como se puede ver no es tan simple como mandar a imprimir y olvidarse, dado que se requiere un conocimiento mucho más exhausto.
¿Cómo hacer la elección correcta?
Por lo que el empleo de varias aplicaciones distintas trae consigo un problema clave que tiene que ver con la cadena de trabajo. Desde nuestro punto de vista, te será mucho más fácil si ante la enorme cantidad de aplicaciones disponibles realizas una criba:
- ¿Cuál es el sistema operativo que utilizas normalmente o tienes pensado usar para la impresión en 3D?
- ¿Cuáles son tus conocimientos? Si dominas un programa de diseño en 3D, entonces no te recomendamos empezar desde cero. En caso contrario, valora mucho lo que quieres hacer y el tiempo que tienes disponible para aprender.
- Si vas a usar varias aplicaciones en el proceso, procura que todas soporten los mismos formatos de archivo, al menos desde una etapa a la siguiente.
- ¿Cuál es tu capital? Esto es importante, ya que si lo que buscas es aprender para probar, entonces no deberías empeñar tus riñones.
Con todo ello ya podrás escoger cuáles es la aplicación que más te conviene entre las diferentes existentes en el mercado.