Hay juegos que destacan por su desarrollo, otros por su historia y hay un ramillete muy exclusivo que lo hace prácticamente por todo. Es el caso de este Harold Halibut que, desde que conocimos que se iba a poner a la venta a mediados del mes de abril, ha cosechado una cantidad incréible de buenas reseñas y referencias. Sobre todo gracias a la presencia de una demo en Steam que ha sido como mano de Santo.
El caso es que este juego de nombre muy extraño y complicado de pronunciar bien ya está entre nosotros, disponible, porque fue ayer 16 de abril cuando salió oficialmente para todo ordenador y consola viviente, porque lo tenéis disponible tanto en Nintendo Switch como PlayStation y, por supuesto, PC y Xbox. Y es precisamente a estas dos últimas plataformas que nos vamos a referir concretamente.
Ya te estás bajando Harold Halibut
Aunque está disponible en todas las plataformas, nuestro imperativo para que te lo bajes lo vamos a circunscribir a todos los que tengan Xbox Game Pass, que es donde ha llegado sin coste alguno adicional. Obviamente, si te atrae –que debería hacerlo– y tienes una Nintendo Switch en tus manos te recomendamos que lo compres, pero es solo bajo el amparo de Microsoft que no tendremos que pasar por caja.
¿Y por qué tanta urgencia para jugarlo? Bueno, antes de nada hay que decir que no va a marcharse del servicio pasado un mes, ni cuatro, pero lo cierto es que dentro de un mercado cada vez más anodino con apuestas clónicas de ciertos géneros, se agradece este intento por ofrecer puntos de vista originales. No ya porque Harold Halibut sea un título donde la narrativa tiene un gran peso, sino porque además su puesta en escena es deliciosamente extraña.
En esta aventura vamos a vivir una extraña experiencia por la que una nave con aspecto de casa descuidada y casi en ruinas, queda artrapada en lo más profundo de un océano alienígena. Nuestro objetivo será el de encontrar el camino para salir de allí y continuar la búsqueda de un planeta en el que la Humanidad pueda desarrollarse de nuevo.
Un portento visual stop-motion
Al margen de esa historia de ciencia-ficción casi costumbrista, Harold Halibut cuenta con una forma de juego muy de las aventuras clásicas (aquí seguro que no tienes ghosting) de hace ya muchos años, donde lo que hablamos y nos cuentan tiene una importancia capital. Tanto como resolver puzzles o explorar todos los confines de la nave buscando indicios que nos hagan avanzar en la historia. Un argumento en el que los personajes tienen un gran peso y nos mueven a desconfiar de algunos que no parece que estén buscando el bienestar de los que viven en la nave.
Por si fuera poco, gráficamente también es llamativo, porque se ha utilizado la misma técnica de animación que pelis como Chicken Run o el Pinocho de Guillermo del Toro. Un stop-motion que lleva a los animadores a rodar fotograma a fotograma cada movimiento del personaje y que luego vemos en la pantalla integrado también en escenarios de un apsecto realista increíble. Así es Harold Halibut. Así que sí, tienes que bajártelo –o comprarlo– ya.