A la hora de conectarlos a un router para acceder a Internet o a una red local, tenemos dos opciones: utilizar una conexión inalámbrica Wi-Fi o bien utilizar un cable de red, siendo este último siempre la mejor opción en la mayoría de los casos ya que ofrece una mayor velocidad de transferencia de datos, menor pérdida en largas distancias y no se ve afectado por elementos del entorno.
Sin embargo, no siempre es posible utilizar un cable de red para conectarse directamente al router. Además, en algunos casos, es preferible utilizar una conexión inalámbrica por las ventajas que ofrece sobre la conexión de red.
Cuándo utilizar Wi-Fi en lugar de un cable de red
A pesar de las bondades de una conexión por cable, no siempre es la mejor opción.
Movilidad
La principal ventaja que nos ofrece la conectividad Wi-Fi frente a la tradicional por cable es la movilidad. Si trabajamos con un portátil en casa y tenemos la necesidad de movernos a otra habitación donde no hay un cable de red, es la mejor opción.
Instalar un cable de red por toda la casa o por unas oficinas, lleva un coste asociado que no siempre se puede rentabilizar ya que no es precisamente barato.
Conectar múltiples dispositivos
Utilizar un cable de red para conectarse a un router para acceder a Internet o una red local implica que este tenga suficientes puertos libres para poder hacerlo. La mayoría de los routers del mercado, incluyen un máximo de 4 puertos.
Si el número de dispositivo que queremos conectar es superior, tendremos que comprar un switch o bien utilizar la conectividad inalámbrica del dispositivo que queremos conectar. Los routers que podemos encontrar en el mercado permiten gestionar un máximo de 250 conexiones a la vez, una limitación muy difícil de alcanzar en un ámbito doméstico.
Crear un hogar inteligente
Si queremos adentrarnos en la domótica y crear un hogar inteligente, utilizar cables no es una opción ya que requiere de una importante inversión económica para distribuir el cable por cada rincón de la casa. Además, la mayoría de los dispositivos domóticos no incluyen un puerto RJ-45 para conectar un cable de red, sino que utilizan únicamente conectividad Wi-Fi y, en algunos casos, Bluetooth.
Acceder desde áreas con limitaciones
En determinados casos, utilizar un cable de red directamente no es una opción factible, ya sea por elementos insalvables del entorno o porque la instalación necesaria para poder llevarla a cabo requiere de una importante inversión en metros de cable. Si, además, debemos protegerlo del entorno, el coste económico se multiplica
Cuándo es recomendable utilizar un cable de red
Si habitualmente utilizamos plataformas de vídeo en streaming para reproducir contenido en 4K, la mejor forma de evitar que la imagen se congele o de tirones, es utilizar un cable de red. También es la opción que debemos utilizar si jugamos a títulos multijugador online para así reducir la latencia.
Si trabajamos con grandes cantidades de datos, el cable siempre será la opción recomendada por los mismos motivos. Este es uno de los principales motivos por el que los NAS solo tienen conectividad por cable y no inalámbrica.