Hay una gran cantidad de proyectos alrededor de la impresión 3D, muchos usuarios buscan crear objetos que luego pueden vender como son las figuras, mientras que otras personas directamente crean planos específicos que luego ofrecen de manera gratuita para compartir su pasión por esta tecnología. Pero también hay quienes directamente buscan modificar una impresora 3D para hacer que tenga un uso muy distinto del que tienen de normal, como en este caso, ya que han logrado transformar un dispositivo de este tipo en una máquina de tatuajes automática.
Uno de los puntos fuertes que tienen las impresoras 3D está en la gran capacidad que pueden tener los usuarios de personalizarlas, las versiones que no tienen una estructura demasiado compleja pueden contar con una serie de modificaciones que logran cambiar por completo su uso. En la mayoría de los casos estos cambios suelen estar relacionados con varios complementos que pueden permitir, por ejemplo, utilizar varios tipos de filamento distinto para poder crear objetos con diversos colores, pero este proyecto es muy distinto, ya que busca reemplazar el uso tradicional de una impresora 3D para permitir hacer tatuajes, algo que no es recomendable hacer en casa (aunque ha quedado bastante bien).
Este proyecto convierte una impresora 3D antigua en una máquina de tatuajes
Para muchas personas el hecho de encontrar diversos usos para un dispositivo en concreto es algo en lo que merece la pena invertir el tiempo, la capacidad de poder transformar algo que tiene una función específica en otra cosa completamente distinta logra alimentar la curiosidad de muchas personas. Y hay ideas que resultan realmente extrañas pero que tras darle una vuelta tienen bastante sentido, como el hecho de poder utilizar una impresora 3D modificada para hacer tatuajes, ya que debido a la precisión que tienen a la hora de imprimir, realmente no es algo tan extraño una vez lo piensas.
En este caso la Youtuber e ingeniera, Emily The Engineer ha desarrollado un proyecto que convierte una impresora 3D antigua en un sistema creado específicamente para hacer tatuajes, demostrando que es algo posible y que además, no tiene una calidad que resulte mala. Según podemos observar en el vídeo, Emily necesita hacer una serie de modificaciones tanto al hardware de la impresora 3D así como a su firmware, ya que los aspectos principales que necesita pasan por incorporar una máquina de tatuajes mientras que cambia el funcionamiento de la impresora para hacer que únicamente use un eje.
Tal y como indica en el vídeo, para el modelo de impresora que utilizan resulta bastante complicado hacer un cambio de firmware, por lo que utiliza un panel modificable completamente distinto para permitir que utilice un solo eje, de forma que pueda hacer dibujos en 2D. Aunque el resultado es bastante mejor de lo que se podía esperar, como bien podéis imaginar no es algo recomendable de probar, ya que no solo es el hecho del trabajo que lleva detrás, si no que al final seguramente sale más barato pagar a un profesional por el tatuaje que comprar una impresora de este tipo y modificarla, obviamente.