Cuando se lanza una nueva versión de Windows, la mayoría de los usuarios actualizan sus equipos y aceptan, sin rechinar, los cambios que la compañía que fundó Bill Gates ofrece. Sin embargo, también hay usuarios que, a pesar de ser minoritarios, hacen mucho ruido y protestan por cualquier cambio que no sea de su agrado.
Este es uno de los motivos por el que podemos encontrar aplicaciones que nos permiten recuperar el diseño de Windows 10, modificar el funcionamiento de algunas opciones entre otros. Siempre me he negado a utilizar este tipo de aplicaciones ya que, para lo único que sirven es para consumir recursos y para prolongar la agonía, ya que Microsoft nunca dará marcha atrás con los cambios, así que, lo mejor que podemos hacer es acostumbrarnos.
Sin embargo, a pesar de llevar 4 años utilizando Windows 11, todavía hay algunas cosas con las que choco frontalmente y me cuestan una barbaridad interactuar con ellas.
Utilizar una cuenta de Microsoft
Con el lanzamiento de Windows 8, Microsoft añadió la Microsoft Store (anteriormente conocida como Windows Store). Para poder descargar aplicaciones y/o juegos era necesario utilizar una cuenta de Microsoft para así asociarlo la compara a una ID y no tener que volver a comprarla.
Conforme ha ido pasando el tiempo, Microsoft ha ampliado la utilidad de estas cuentas para registrar los datos de hardware del equipo (ya no es necesario apuntar el número de licencia), almacenar las contraseñas y las contraseñas de redes Wi-Fi entre otros.
Aunque existen métodos para saltarse este requisito (que la compañía se encarga de ir cerrando), para sacarle el máximo partido a Windows 11 es necesario una cuenta de Microsoft.
El único método que podemos utilizar para no hacerlo es crear una cuenta con un usuario de Microsoft, y posteriormente, crear a una cuenta de administrador sin cuenta para, finalmente, eliminar el usuario con cuenta de Microsoft.
Los widgets son inútiles
Con Windows 11 regresaron los widgets que Microsoft implementó en Windows Vista. Sin embargo, el número de opciones disponibles es tan limitado como inútil siendo la información del tiempo lo único que se salva.
No estaría nada mal que Microsoft o cualquier otro desarrollador lanzara un widget con información relevante acerca del funcionamiento de nuestro PC como la temperatura de la CPU y GPU, velocidad de los ventiladores, el espacio en disco libre entre otros cuya información se pudieran mostrar en el botón del widget sin tener que acceder a este menú.
Menú contextual
Reconozco que en más de una ocasión me he visto tentado a modificar el registro de Windows para modificar el número de opciones que muestra el menú contextual del botón derecho del ratón, ya que, en la mayoría de las ocasiones, no muestra las opciones que realmente necesito (los atajos de teclado con de mucha ayuda).
Aunque sigo sin acostumbrarme, finalmente he optado por pulsar el botón Mayús cada vez que tengo que acceder a este menú contextual. Al presionar este botón, en lugar de mostrarse el diseño habitual de Windows 11, se muestra el menú que lleva acompañándonos desde hace más de una década.
No existe un panel de configuración único
Con Windows 11, seguimos obligados a ir saltando entre las opciones de configuración de Windows (para realizar tareas sencillas) y el panel de control (para cambios más avanzados) lo que implica acabar con la pantalla llena de ventanas para cambiar cualquier configuración. Personalmente considero que Microsoft podría implementar un modo de uso básico y otro avanzado y así unificar todas las opciones de configuración en un único menú.
El menú de inicio sabe a poco
Cuando accedemos al menú de Inicio, se muestran dos apartados. El superior muestra las aplicaciones ancladas que utilizamos con frecuencia, mientras que en la parte inferior se muestran los archivos que hemos abierto recientemente.
No estaría nada mal que, al pulsar en este botón se mostrara parte de la información que se muestra cuando accedemos a las opciones de configuración como el espacio de almacenamiento disponible, si estamos utilizando la aplicación Enlace móvil, consultar las suscripciones que tengamos en otros.
Demasiado bloatware
Cuando instalamos Windows 11, junto con lo necesario para que el sistema operativo funcione, Microsoft incluye aplicaciones como Spotify, Netlix y un sinfín de juegos y otras aplicaciones que, la mayoría de los usuarios no utilizamos.
Estas aplicaciones no están instaladas, sino que lo hacen cuando las ejecutamos por primera vez, por lo que realmente no ocupan espacio en el disco duro, sin embargo, para lo único que sirven es para tardar más tiempo en encontrar la aplicación que quiero abrir a través del menú de Inicio.
Afortunadamente, el proceso para eliminarlas en tan sencillo como situar el ratón encima la aplicación que queremos eliminar y pulsar el botón derecho para seleccionar la opción Desinstalar.