Es curioso cómo funciona la industria de los semiconductores y cómo de hermética es entre ella misma y sus subsidiarias. Mientras que el mundo necesita chips, materias primas y ciertos compuestos clave para poder bajar los precios, las NAND Flash estaban en el camino contrario rebajándolos. Ahora que los primeros comienzan a ver la luz llegan los segundos y cambian de tercio, porque según se ha filtrado estamos ante el comienzo de algo problemático para los usuarios: los precios de los SSD subirán.
Las previsiones van a fallar y no porque estuvieran mal ejecutadas, sino porque al igual que la pandemia no era previsible para casi cualquier persona de este mundo, lo ocurrido en las fábricas de Western Digital y KIOXIA tampoco lo era. Hace semana y media lo veníamos advirtiendo y se hará realidad como si esto fuese una predicción: mal momento para los SSD.
El precio de las obleas de 512 GB sube
Nos referimos por supuesto a las obleas que están destinadas para los chips de 512 GB de capacidad y en concreto para las que integran la tecnología TLC. Según el gráfico mostrado el precio en diciembre por chip estaba situado en 4,1 dólares, mientras que terminando febrero ya había alcanzado nada menos que 4,4 dólares por unidad.
Esto significa que a falta de un mes para volver a renegociar los contratos el precio ya ha subido un 7%, pero esto solo es una muestra. Las fuentes indican que el precio para las obleas de chips TLC de 128 GB y 256 GB también han aumentado de precio, por lo que el error que cometieron Western Digital y KIOXIA al perder 6,5 Exabyte en producto va a arrastrar a la industria.
Algunos fabricantes como Lenovo mediante su director de producto ya han deslizado que si queremos un SSD entonces seamos rápidos en adquirirlo, otro síntoma más de que la escalada ha comenzado.
¿Hasta dónde llegarán los precios de los SSD?
Pues no queremos ser alarmistas, pero hay ciertos rumores sobre el hecho de que los fabricantes, WD y Micron inclusive, han dado la voz de alarma para aumentarlos entre un 10% y un 25%. Esto todavía no se ha traducido porque los contratos tienen que ser firmados en las próximas dos semanas para el Q2 de 2022, pero sí que empezamos a ver pequeños movimientos haciendo un scout rápido de los precios, donde en la mayoría ya vemos incrementos minúsculos de dos a cinco euros según el modelo y la capacidad.
El problema es que ahora llega abril en un abrir y cerrar de ojos, una temporada donde recuperada la normalidad tras el virus siempre ha sido de grandes ventas para la industria de las NAND Flash, así que es probable que, como bien dijimos en su momento, los problemas de WD y KIOXIA sean interpretados por sus rivales siguiendo el aumento de precio para generar más beneficios y al mismo tiempo pudiendo ser competitivos dejando el precio justo por debajo del que ambas compañías firmen.
Por lo tanto, todavía estás a tiempo de comprar tu SSD a un precio correcto antes de que empiece la subida y de librarte de la especulación con ello.