No es fácil batir un récord del mundo en un sector como el del overclocking profesional, pero a medida que avanza la tecnología se comienzan a ver mejores registros, permitiendo cifras más altas. En el caso de la memoria RAM, actualmente y hasta la salida de los nuevos chips por parte de Samsung, la innovación se encontraba en stand by, por lo que el récord de ADATA tiene mucho mérito.
En overclock extremo cada detalle y MHz cuentan
Si echamos un vistazo al TOP 10 dentro de HWBot nos daremos cuenta de lo apretado que está todo el ranking: todo se decide en 57,6 MHz. Además, cuanto más subimos en el ranking menores son las diferencias.
Esto quiere decir que es realmente complicado exprimir hasta el último MHz, llegar a esa frecuencia máxima y poder validar dicho registro. El récord anterior pertenecía a Toppc, que con unas Kingston HyperX 4266 MHz lograron la increíble cifra de DDR4 5608 MHz en frecuencia efectiva y 2804 MHz real, arrebatándole en ese momento el récord vigente a los actuales reyes de la velocidad: el grupo ADATA_XPG.
Han sido de nuevos dichos overclockers de ADATA_XPG los que han vuelto a tomar la corona del rendimiento con otra frecuencia digna del logro: DDR4 5634 MHz (efectiva) o 2817,1 MHz (real). Dichas frecuencias se consiguieron con un i9-9900K (LN2), los nuevos módulos ADATA Spectrix D60G (bajo LN2) y una MSI MPG Z390i Gaming Egde AC por aire.
Como curiosidad, la GPU escogida fue una NVIDIA GeForce GT 610 que se mantuvo totalmente de stock.
Para los más neófitos en esto del overclock extremo para las memorias RAM, hemos de decirles que las configuraciones usadas son algo extrañas, ya que para llegar a tales frecuencias los settings son totalmente contrarios a lo que podríamos esperar.
La CPU llevada a su mínima expresión para poder empujar la memoria
Estos overclocks nos dejan muchos detalles que podrían pasar por alto. Comenzando por la elección de la CPU, la cual es parte igualmente importante del proceso para conseguir el fin, ya que debe ser bineada para escoger el mejor IMC posible. Además, este IMC debe ser capaz de trabajar con un número de núcleos y frecuencia muy reducidos, algo que no es sencillo si se lleva a su máximo exponente.
En este caso, los chicos de ADATA solo habilitaron dos núcleos sin HT en su i9-9900K, donde bajaron la frecuencia hasta los 819,53 MHz con un BCLK de 102,44 MHz, cerca del límite que implica un cambio de divisor. Además, esta CPU porta el nuevo stepping P0, lo que evidencia que hay mejoras más allá de un simple número.
Sobre el voltaje, para esos dos núcleos a 819,53 MHz, solo hizo falta 0,674 voltios, cifras que solo se consiguen por normal general con undervolt manual para sus 8 núcleos y 16 hilos y estando en reposo.
Entrando de lleno en la memoria, vemos que se ha usado un único módulo de RAM de 8 GB, el cual se seteó a la citada velocidad de 2817,1 MHz con un divisor ya visto anteriormente de 1:55, lo cual es a su vez un múltiplo casi perfecto del tan buscado 1:1.
Por último, tenemos las latencias conseguidas: 31-31-31-46-3, cifras realmente apretadas para albergar un tCR 3. Por desgracia no se especifica el voltaje necesario para llegar a estos números, pero en cualquier caso habrá sido bárbaro, al igual que el del IMC y VCCIO.