Puertos de la tarjeta gráfica: cuáles son y qué diferencias hay
Puede que para muchos de los que nos leéis, hablar de los puertos de la tarjeta gráfica pueda parecer algo demasiado obvio, pero también es cierto que, para muchos usuarios, solamente buscan el HDMI y listo, dejando siempre el resto de los puertos olvidados y puede que por mero desconocimiento. Por este motivo, en este artículo te vamos a explicar cuáles son los puertos (salidas de vídeo) que te puedes encontrar en cualquier tarjeta gráfica y cuáles son las diferencias entre ellos.
Cinco son los puertos de salida de vídeo que podremos encontrar habitualmente en una tarjeta gráfica hoy en día, si bien es cierto que dos de ellos están ya prácticamente en desuso. Así que, para poner un cierto orden, vamos a enumerarlos desde el más antiguo hasta el más moderno.
Conector VGA o D-Sub15
Este conector es el más antiguo de todos los existentes en la actualidad, dado que es el sucesor de los antiguos conectores de vídeo EGA que se empleaban con los primeros ordenadores de escritorio. Está compuesto por tres filas de 5 pines (en el caso del macho) o taladros (en el caso de la hembra).
A diferencia de los otros tres tipos de conectores que veremos después, el conector VGA es un conector completamente analógico, lo que significa que para usar un adaptador desde este conector al HDMI y al DisplayPort, deberá de ser un adaptador activo que transforme la señal analógica en digital.
Este tipo de conector solo se emplea en tarjetas gráficas muy antiguas o de gama muy baja. Algunas placas base de gama de entrada lo incorporan, así como algunos sistemas Mini PC o equipos rugerizados (de carácter industrial), pero es poco común. Se suele mantener por si los monitores que se usan no dan soporte a nuevos estándares, como es el caso de la industria.
Se considera un conector obsoleto por ser de tipo analógico y por tener limitaciones importantes de resolución. Actualmente, ha sido relegado por los conectores HDMI y DisplayPort. Es importante señal que este tipo de conector únicamente transmite el vídeo no el audio, por lo que únicamente se mostrará la imagen sin el sonido, sonido que se envía a través de otro tipo de conector.
Conector DVI
El conector DVI es el primer modelo de conector de datos completamente digital que se empleó para transmitir la imagen desde la gráfica hasta el monitor, superando bastante la calidad de la imagen analógica que proveía el conector VGA.
En tarjetas gráficas podremos encontrar dos tipos principales de este conector:
- El DVI-D es un conector completamente digital.
- El DVI-I es un conector digital y analógico.
También, dependiendo del número de pines que tenga el conector, éste puede ser Single Link (SL) o Dual Link (DL). La diferencia es que los conectores (y cables) DL son capaces de transmitir mayor cantidad de datos, consiguiendo alcanzar mayores resoluciones de pantalla para la imagen, habiendo sido los primeros que permitieron legar a la resolución 2K.
En la actualidad, y al igual que el puerto VGA, el conector DVI está completamente en desuso y a día de hoy es bastante complicado encontrar una tarjeta gráfica que cuente con esta salida de vídeo. Aún se puede ver en algunas placas base de gama media y, de entrada, por ser «compatible» mediante adaptador con el HDMI.
Al igual que con el puerto VGA, el puerto DVI tampoco es capaz de transmitir audio, únicamente puede transmitir vídeo a una resolución de 1.920 x 1.200 a un máximo de 60 Hz.
Conector HDMI
Este conector digital se ha convertido, desde su introducción en el ámbito del hardware, en el sucesor de facto del antiguo conector VGA, incorporándolo ahora mismo casi todas las tarjetas gráficas y monitores del mercado.
Introducido cuando comenzó la fiebre por la alta definición, por ser el único cable que era capaz de transmitir tanto imagen como sonido a la vez por un mismo cable (el DVI solo podía transmitir imagen), también se convirtió en un favorito de los productores de entretenimiento dado que admitía perfectamente las restricciones anticopia del HDCP.
Actualmente hay hasta 7 versiones diferentes de este conector, cada una ellas ampliando las resoluciones de imagen que se pueden mostrar y rara es la tarjeta gráfica que no emplea este tipo de interfaz gráfica para conectarse a un monitor.
La versión más reciente de este conector es el HDMI 2.1 que agrega nuevas características y resoluciones. Destaca la tecnología Variable Rate Refresh (VRR) que es una tecnología que sincroniza la cantidad de frames con la frecuencia de refresco para eliminar problemas como parpadeos o desgarro de la imagen.
Respecto a la resolución, este nuevo estándar agrega soporte para resolución 4K con una frecuencia de refresco de hasta 120 Hz sin compresión. Además, con compresión ofrece: 5K @ 120 Hz, 8K @ 120 Hz y 10K @ 120 Hz.
Conector DisplayPort
El DisplayPort es el tipo de conector que más recientemente ha llegado al mercado de hardware informático y pretende ser el sustituto del actual HDMI y al más antiguo DVI, aunque la verdad es que no se ven todavía muchos monitores de la gama media y baja con este puerto todavía.
Esencialmente, este conector también puede transmitir audio y vídeo de manera simultánea entre la tarjeta gráfica y el monitor y, aunque para las interfaces digitales no se necesitan adaptadores activos, sí es necesario en caso de querer convertir una señal analógica como la del conector VGA al estándar de datos que entiende el DisplayPort.
Cinco son las versiones que tiene este conector ahora mismo, siendo la última la que permite la transmisión de imagen a resolución 4K a 120 Hz, 5K a 60 Hz e incluso 8K a 60 Hz. Este es el tipo de conector que debemos utilizar si queremos disfrutar de la mayor tasa de refresco posible, ya que, además, algunos monitores únicamente son capaces de ofrecer utilizando este conector.
Conector USB-C
Se introduce en las tarjetas gráficas gaming para la realidad virtual, aunque su integración es más bien corta. NVIDIA lo introduce en las RTX 20 Series (no en todos los modelos), aunque después lo retiraría en las RTX 30 Series de manera definitiva. AMD le sigue dando soporte en sus tarjetas gráficas, pero rara vez se puede ver integrado.
El principal motivo, como hemos comentado, son las gafas de realidad virtual que utilizan este conector. Pero, son un producto minoritario y esto hace que muchos usuarios no lo utilicen. Aunque, realmente, tiene una enorme cantidad de posibilidades este conector.
No solo se podía usar para conectar gafas de VR, también monitor al ser un USB-C con tecnología Alt Mode, que agrega soporte para DisplayPort. También permitía conectar periféricos como unidades de almacenamiento y así funcionar a elevadas velocidades.
El número de monitores que ofrecen soporte para USB-C es muy reducido y nada parece indicar que los fabricantes tengan la intención de cambiar, siendo el puerto DisplayPort el que se plantea como el futuro a corto y medio plazo.
¿Cuál de las salidas de vídeo es mejor utilizar?
Si dejamos un poco de lado la salida de vídeo a través de USB-C por ser quizás demasiado específica, nosotros siempre te recomendaríamos utilizar DisplayPort como primera opción, siempre y cuando por supuesto tu monitor la admita de manera nativa (es decir, que tenga una entrada de vídeo DisplayPort o mini DP y no tengas que utilizar un adaptador). El uso de DisplayPort es uno de los más recomendados para aquellas personas que buscan conseguir el mayor rendimiento junto con la mejor calidad posible, siendo uno de los más utilizados en sectores como el de los videojuegos.
Pero es posible que no tengamos un puerto de DisplayPort en nuestra gráfica o en el monitor, por lo que tendríamos que recurrir a un conector que está más normalizado, aunque actualmente es complicado encontrar una gráfica o pantalla nuevas que no incorporen DP. Con esto nos referimos a que tendríamos que recurrir a la salida HDMI, la más típica y habitual y que prácticamente todos los monitores tienen. Sin embargo, algunos monitores un poco antiguos no tienen ni siquiera HDMI, así que el siguiente en la lista sería el puerto DVI, dejando el VGA como última alternativa por ser el que técnicamente es peor.
Para resumirlo, siempre que tengamos una GPU y un monitor de última generación lo mejor que podemos utilizar es DisplayPort, ya que ofrece un ancho de banda superior a HDMI, mientras que si tenemos otros que resulten más antiguos deberíamos recurrir en primera instancia a HDMI y si no podemos, a VGA. También debemos tener en cuenta que el cable afecta a esto, por lo que necesitaremos tener un cable que nos ofrezca la última versión de cada una de estas interfaces para disfrutar al máximo de la calidad.