¿Dónde quiere llegar Intel con el lanzamiento de los procesadores Core ix X?

Computex 2017 se ha convertido en el primer campo de batalla donde se ha empezado a dirimir la nueva guerra entre Intel y AMD. Una guerra de núcleos, en este caso. Pero tras la presentación de Threadripper por parte de AMD, ¿dónde van a quedar los procesadores Core ix X de Intel? Nadie tiene muy claro la función de estos en el ecosistema.
Puede que hace años la gran batalla que libraban AMD contra Intel (y viceversa) era por la frecuencia de sus procesadores. Luego la eficiencia pasó a un primer plano. Luego, el IPC. Pero ahora mismo, la batalla va a ser, visto lo visto, quién consigue meter más núcleos dentro de un mismo empaquetado. Y los hace funcionar correctamente.
Por un lado tenemos a los procesadores Threadripper de AMD, que ofrecerán desde 10 hasta 16 núcleos bajo el IHS. Con unos consumos bastante moderados para la cantidad de núcleos que tendrá que mover. Y todos ellos con 44 vías de datos para el PCIe. Todos. Hasta la versión más básica. Esto significa que los fabricantes de placas base lo van a tener muy fácil a la hora de desarrollar modelos para esta plataforma. Sin contar con que se rumorea que el procesador tope de gama, el 1998X, costaría tan solo $849. Que es más barato el el propio tope de agma de Intel actual, el 6900X.
Pero por el otro lado tenemos los procesadores Core ix X de Intel. Y en este caso, su línea de procesadores es un desbarajuste completo. Dos de los procesadores tienen solo 16 vías de datos PCIe, otros dos tienen 28 vías de datos y, finalmente, los topes de gama ya tienen 44 vías de datos. Ésto para desarrollarlo por parte de los fabricantes va a ser un auténtico infierno. Más que nada porque en función del número de vías y del modelo de procesador, tendrán que activar o desactivar funcionalidades de la placa base.
No sé, sinceramente, qué pretende hacer Intel con este lanzamiento. Como empresa ya con una cierta trayectoria en el mercado, ya deberían de saber que los productos lanzados a prisa y corriendo generalmente salen mal. No solo salen mal, si no que acaban dañando bastante la reputación de uno. Y ya hemos tenido ejemplos de ésto en el pasado por parte de Intel (¿alguien se acuerda de los Pentium D?). Pues parece ser que Intel ya no se acuerda y está dispuesta a tropezar de nuevo con la misma piedra, solo porque AMD le está comiendo un trozo del mercado. Un mercado que, hasta hace nada, Intel ha dominado con mano de hierro.
Sinceramente, me parece que Intel está teniendo una rabieta de niño pequeño. El problema es que estas rabietas suelen costar caras a los usuarios.