Análisis de rendimiento gráfico en Elite: Dangerous
Aunque Elite: Dangerous lleva ya un tiempo estando disponible, hace bien poquito que lo está para Steam, motivo por el que en seguida se ha ubicado en la lista de los 10 juegos más vendidos de la plataforma. Se trata de un juego con unos requerimientos de hardware bastante elevados, así que nos hemos puesto manos a la obra y a continuación os presentamos nuestro particular análisis de rendimiento gráfico, de la misma manera que lo hicimos con Battlefield: Hardline por ejemplo.
En Elite: Dangerous nos ponemos en la piel de un piloto espacial que pretende llegar a lo más alto. Se trata de una aventura espacial de mundo abierto en la que han logrado realizar la representación a escala más exacta hasta la fecha de la vía láctea en un videojuego, y como buen juego espacial tiene una gran cantidad de físicas y partículas (planetas, lunas, cinturones de asteroides, planetas de gas…), motivo por el que entre otros tiene unos requerimientos de hardware tan elevados.
Los requerimientos mínimos para Elite Dangerous exigen un procesador de cuatro núcleos a 2 Ghz, 4 GB de memoria RAM y una GeForce GTX 260 / Radeon HD 4870, algo que seguramente casi todos nuestros lectores puedan permitirse. Pero lo verdaderamente exigente viene cuando leemos los requisitos recomendados para poder disfrutar de todo el potencial del título: un Intel Core i7-3770K o superior, 8 Gb de memoria RAM y una GeForce GTX 770 / Radeon R9 280X, que ya empiezan a ser palabras mayores.
El entorno de pruebas
Todas las pruebas las hemos realizado con el mismo sistema, cambiando únicamente la tarjeta gráfica y como es lógico, los drivers utilizados dependiendo de la marca de ésta. Así pues, para las gráficas de AMD hemos hecho uso de los controladores Catalyst 15.3.1 BETA y para las tarjetas gráficas de NVIDIA los ForceWare 350.12. En todos los casos, el sistema operativo ha sido Windows 8.1 x64 con todas las actualizaciones instaladas, además del siguiente hardware que ya conocéis de sobra:
- Intel Core i7-2600K @ 4.4 GHz.
- Asus Sabertooth P67 B3.
- Noctua NH-D15.
- 2×8 GB Kingston HyperX Savage 2133 Mhz.
- Thoshiba HG6 512 GB SATA3.
- Cooler Master Silent Pro Hybrid 1050W.
- 2x WD Black 2Tb SATA3.
Las tarjetas gráficas empleadas en nuestras pruebas han sido las siguientes:
- NVIDIA:
- MSI GeForce GTX 970 Gaming 4G.
- Gigabyte GeForce GTX 770 OC WindForce 3X 2Gb.
- PNY GeForce GTX 760.
- AMD:
- AMD Radeon R9 290X (4 GB).
- Gigabyte Radeon R9 285 WF2 OC.
- AMD Radeon R7 260.
Así hemos realizado las pruebas
Para probar Elite: Dangerous, en todos los casos hemos jugado en resolución Full HD y con los ajustes gráficos en modo «Ultra», por supuesto con la sincronización vertical desactivada (clic en las imágenes para verlas ampliadas):
También en todos los casos hemos utilizado la última parte del tutorial, consistente en salir de la estación, alejarnos un buen puñado de kilómetros utilizando el «superdrive» que pone la nave a casi 100 Km/s, dar la vuelta y volver a entrar en la estación.
No es una escena cargada de asteroides, que sobrecargarían más la tarjeta gráfica, pero sí es lo bastante larga y tiene suficientes elementos en el entorno como para poder hacernos una idea del rendimiento global que tendremos.
En la siguiente imagen podéis ver la vista desde la estación.
Y en ésta otra una vez que estamos fuera, cerca de un planeta.
Resultado de rendimiento gráfico
Los resultados obtenidos en Elite: Dangerous con el equipo, las gráficas y en las condiciones que hemos detallado han sido los que podéis ver en la siguiente gráfica. Para obtener los datos de rendimiento hemos hecho uso, como siempre, de la herramienta Benchmarking de FRAPS, reflejando los FPS (frames por segundo) máximos, mínimos y la media durante toda la escena.
Conclusión.
A pesar de que los requerimientos de sistema recomendados asustan un poco, finalmente Elite: Dangerous parece que está estupendamente optimizado, ya que incluso con una gráfica de gama media-baja como la Radeon R7 260 hemos tenido una experiencia de juego bastante satisfactoria. En este título, que hace uso de DirectX 11 como base, por cierto, la GTX 970 se ha ubicado como la que mejor ha desempeñado su trabajo de entre las gráficas que tenemos disponibles, incluso por encima de la actual tope de gama (mono GPU) de AMD, la Radeon R9 290X.
Por ello, si os gustan los juegos de exploración y combate espacial, no tengáis reparos si no tenéis un equipo de última generación; Elite: Dangerous os funcionará a buen seguro a una buena tasa de FPS que os permitirá tener una excelente experiencia de juego.
Recordad que si os gusta Elite: Dangerous ya podéis haceros con él en Steam.