Un problema recurrente en muchos ratones de PC es que, sin querer, hacemos doble clic con ellos cuando queríamos hacer un clic simple. Esto puede ser un problema mecánico del ratón, que podría haberse estropeado, pero también podría ser un problema de software. Sea cual sea tu problema, si tu ratón a veces hace doble clic sin querer te enseñamos qué es lo que puedes hacer para solucionarlo.
Evidentemente, este problema podría tratarse de un fallo mecánico en el interruptor del ratón que podría no tener solución, y en este caso no quedará más remedio que o bien cambiar el interruptor (y tendrás que ser bastante manitas para ello), o bien tirarlo a la basura y comprar otro. Veamos, por tanto, las opciones que tenemos al respecto para intentar resucitar el ratón que hace doble clic.
El problema del doble clic
Uno de los comandos más comunes con el ratón es el doble clic, el cual consiste en pulsar dos veces y de manera sucesiva el botón izquierdo del ratón. Se utiliza habitualmente para abrir programas o documentos realizando su acción sobre el icono del documento, pero si este no funciona nos podemos encontrar con el sistema abriendo programas y documentos que no queremos.
Además, que este fallo elimina el arrastrar y soltar del ratón, así como la posibilidad de cualquier acción que requiera un solo clic. Algo que, además, puede hacer que, en caso de querer abrir un programa de verdad, este se nos ejecute por duplicado.
Dicho de otra forma, se trata de un problema que reduce enormemente la usabilidad de este periférico de entrada, el cual es crucial a día de hoy para el uso diario del ordenador.
El inconveniente es el diagnóstico del mismo, puesto que los factores que pueden estar produciendo este problema son variados y en algunos casos no pueden ser identificados más allá de decir que falla el software o el hardware, que grosso modo no es una respuesta en sí misma y requiere acciones más contundentes que veremos a final del artículo.
Solucionar el doble clic en el ratón
La causa más frecuente de este problema es un simple ajuste en Windows, el cual podrías haber habilitado por error, así que merece la pena verificarlo lo primero de todo.
Configuración del explorador de archivos
Para ello, accede a un explorador de Windows (WIN + E), y en el menú de arriba pulsa sobre «Vista» y luego sobre el botón de Opciones.
- En la ventana que se abre, comprueba que en la parte de en medio (Acciones al hacer clic en un elemento) está marcada la opción «Doble clic para abrirlo (un clic para seleccionarlo) como mostramos en la siguiente imagen.
- Si esto estaba configurado correctamente, vamos a ver la otra opción de configuración, puesto que el problema puede ser simplemente la velocidad a la que Windows detecta el doble clic.
- Para ello accede a Configuración (clic en el botón de inicio y pulsa sobre el icono de la rueda dentada).
- Desde ahí ve a Dispositivos -> Mouse, donde tendrás que pulsar sobre «Opciones de mouse adicionales».
- En la ventana que se abre, revisa cómo tienes configurada la opción «Velocidad de doble clic». Tienes un icono sobre el que hacer doble clic para verificar si la velocidad configurada está o no a tu gusto, así que lo ideal es que lo configures como mejor te convenga.
Hasta aquí llegan las opciones que tenemos en el ámbito del software. Si tras revisar estas dos cosas el ratón sigue con el mismo problema entonces es bastante probable que el problema esté en cuanto a hardware. De todos modos, para asegurarte de que el problema no está en el software siempre puedes probar a conectar otro ratón diferente y ver si tienes el mismo problema (si no lo tienes, entonces el problema no es del software, sino del ratón).
Probar en otro equipo
Si tras modificar la opción del explorador de archivos, seguimos sufriendo el mismo problema, cabe la posibilidad de que el problema se encuentre en otra parte de Windows. Para salir de dudas, y descartar o confirmar que el problema no está relacionado con el ratón, si tenemos otro equipo en casa, debemos conectar el ratón que está sufriendo el problema a otro equipo y comprobar si se repite el doble clic.
Si es así, significa que el problema está presente en el ratón, probablemente en el interruptor, por lo que la única solución que nos queda es comprar un interruptor y reemplazarlo por uno nuevo o bien, si todavía tiene garantía llevarlo al servicio técnico. Pero, si el problema no se repite, significa que este se encuentra dentro de Windows y no en el ratón, por lo que debemos seguir buscando el origen del problema para solucionarlo.
Reinstalar los drivers
Windows se encarga de instalar los drivers básicos de cualquier componente que conectemos a nuestro PC, pero si queremos sacarle todo el partido es necesario instalar los drivers del fabricante si este dispone los ofrece.
En ocasiones, solucionar cualquier problema que presente tanto el ratón como el teclado pasa por eliminar y volver a instalar los drivers del ratón, un proceso que podemos hacer directamente desde el Administrador de dispositivos, a través del apartado Mouse y otros dispositivos señaladores.
Dentro de esa opción, tan solo debemos seleccionar el ratón que se muestra y pulsar sobre esa opción con el botón derecho del ratón para marcar la opción Desinstalar el dispositivo (si se muestra más de un ratón instalado, debemos desinstalarlos todos). Segundos después, el equipo volverá a detectarlo y descargará el último driver disponible en la base de datos de Windows.
Una mala configuración del software propietario
Muchos ratones, por no decir casi todos a día de hoy a poco que tengan un mínimo de calidad, tienen un software que normalmente es propiedad de la marca del mismo. En ciertos modelos de gama alta o premium podemos encontrarnos con un problema bastante curioso y no es más que la velocidad del clic configurable por dicho software.
Esto quiere decir que el ratón puede tener distinta velocidad de clic en el botón derecho, izquierdo e incluso laterales o adjuntos. Si no somos los suficientemente rápidos para hacer los clics lo que tendremos es una falsa doble pulsación que el ratón y su software interpretarán así.
Esto ocurre porque con ganas de aumentar nuestro rendimiento bajamos el valor en milisegundos de dichos clics y lo que nos encontramos es con el descrito efecto de doble clic. Lo único que tenemos que hacer es meternos en el software y cambiar a valores más altos, ajustarlo hasta que estemos cómodos y que de forma inconsciente nuestra velocidad sea la ideal para todos los clics que nos permita.
¿Y si el problema es del hardware?
Lo primero que debes hacer es limpiar tu ratón, tanto por dentro como por fuera, ya que es posible que se haya introducido suciedad entre el activador y el interruptor y que eso esté causando el problema. Normalmente, los ratones tienen uno o más tornillos en la parte inferior, y es posible que tengas que despegar las patas de teflón para acceder a ellos. Simplemente, con el ratón desconectado, retira los tornillos para abrir la carcasa y acceder a su interior, donde podrás observar el PCB y los mecanismos.
Una vez abierto, limpia cuidadosamente con un paño de microfibra seco (nunca utilices ningún tipo de producto de limpieza para limpiar el interior del ratón), poniendo especial énfasis en el interruptor del clic izquierdo que es el que nos está dando problemas. Si puedes usar alcohol isopropílico mejor, ya que así garantizarás una mejor limpieza y además desinfección de lo que estás limpiando.
En la zona del interruptor, puedes ayudarte de un palillo de dientes para retirar la posible suciedad pegada al mecanismo del interruptor, aunque deberás hacerlo con sumo cuidado para no dañar nada. La solución de emplear un bastoncillo para los oídos con alcohol isopropílico es todavía mejor, ya que de este modo te asegurarás de limpiar bien toda la zona y además, igual que te hemos comentado antes, desinfectarla.
Tras la limpieza de rigor, vuelve a ensamblar el ratón y prueba de nuevo, preferiblemente en otro puerto USB diferente, para descartar a su vez que el problema estuviera en el conector o el propio puerto USB del PC.
Como consejo, este tipo de problema, si el causante es un botón a punto de estropearse, suciedad o cualquier factor externo que esté interviniendo en él, normalmente no va a sucederte siempre, y será un error recurrente, pero aleatorio, por lo que si, por el contrario, te pasa cada vez que haces clic sin excepción y de forma repentina, no un error gradual, es probable que no sea del hardware y tengas que mirar otro punto.
¿Doble clic a causa de malware?
Hay algunos programas con intenciones maliciosas que pueden infectar el ordenador y que causan, entre otras cosas, el efecto de un doble clic fantasma y, por tanto, involuntario. En este caso no es el ratón el que está mal, sino que el programa malicioso se encarga de enviar la falsa señal a un ratón en funcionamiento, y todas las soluciones pasan por ir a buscar el origen de esa anomalía y evitar, también, que se propague a otros rincones del sistema operativo.
El caso es que si nada de lo anterior ha funcionado no es una mala idea que compruebes esto analizando el equipo en busca de virus y programas malignos utilizando las herramientas propias de Windows o programas de terceros, como es el caso de Malwarebytes Antimalware, que es gratis y funciona bastante bien a este respecto y os evitaréis gastos innecesarios si, sobre todo, al final del proceso os dais cuenta de que no hay ningún virus ni malware involucrado.
Si nada de esto ha hecho que el problema desaparezca, entonces lamentablemente es bastante probable que tu ratón esté estropeado y tengas que cambiarlo, aunque también puedes como último recurso probar el ratón en un PC diferente y comprobar si tienes el mismo problema: si sigues teniendo el mismo problema de que el ratón hace doble clic, entonces el problema está obviamente en el ratón, pero si en otro PC dejas de tenerlo, entonces el problema está en el software de tu PC y debes buscar una solución por esa vía. Y ya os avisamos que, en determinados casos, seguramente se abran muchos caminos que seguir. Esperemos que esto no te ocurra en tu trackpad, ya que, todos los problemas se podrían multiplicar, y la solución, en caso de no encontrarla, sería más difícil.