Probamos el ASUS ROG Zephyrus G16 2024: un portátil con las tres B (bueno, bonito y bestial)
Generalmente, el concepto de «portátil gaming» suele ir asociado a equipos bastante grandes y generalmente ruidosos, cuya portabilidad queda en entredicho. Es realmente complicado encontrar un portátil gaming pero que sea portátil de verdad con unas dimensiones y peso que hagan fácil moverlo de lugar, pero que al mismo tiempo ofrezca un buen rendimiento en juegos y que no se convierta en una turbina de avión cuando estás jugando. Esto, aunado a una estética sobria y contemporánea, es lo que ASUS nos ofrece con el nuevo ROG Zephyrus G16 2024 que analizamos en el día de hoy.
Y es que como vais a poder comprobar a continuación, el nuevo ASUS ROG Zephyrus G16 no solo es un portátil equipado con hardware de altas prestaciones que garantiza un buen rendimiento en juegos, sino que además lo hace en un formato bastante compacto, con buena autonomía y con una estética que te permite tenerlo tanto en una LAN party para viciarte con amigos como en una biblioteca para ayudarte a estudiar.
ASUS ROG Zephyrus G16, especificaciones técnicas
ASUS ROG Zephyrus G16 | |
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Procesador | Intel Core Ultra 7 155H |
Memoria RAM | 32 GB LPDDR5X |
Tarjeta gráfica | GeForce RTX 4070 Laptop |
Almacenamiento | 1 TB PCIe 4.0 NVMe SSD |
Pantalla | ROG Nebula Display (16 pulgadas OLED) 2560 x 1600 240 Hz y 0,2 ms con G-Sync 100% cobertura DCI-P3 Dolby Vision HDR |
Teclado y touchpad | Teclado compacto con retroiluminación RGB Touchpad |
Sonido | Tecnología de amplificación inteligente Audio por Dolby Atmos Micrófono con cancelación de ruido por IA Smart Amp Tecnología Matriz de 3 micrófonos incorporada Sistema de 6 altavoces (dual-force woofer) con Tecnología Smart Amplifier |
Comunicaciones | Webcam 1080p de con función IR WiFi 6E 2x2 (802.11ax) Bluetooth 5.2 |
Conectividad | Conector de audio combinado de 3,5 mm 1x HDMI 2.1 2x USB 3.2 Gen 2 Tipo-A 1x USB 3.2 Gen 2 Tipo-C soporte DisplayPort / power delivery 1x Thunderbolt™ 4 soporte DisplayPort™ / power delivery Lector de tarjetas (SD) (UHS-II, 312MB/s) |
Batería | 90 Wh |
Alimentación | Adaptador de CA de 200 W |
Dimensiones | 35.4 x 24.6 x 1.49 ~ 1.64 cm |
Peso | 1,85 Kg |
Precio | Desde 2.299€ |
Aunque como siempre hay varias versiones con diferente hardware (especialmente el procesador y la capacidad de la RAM y el SSD), el modelo que ASUS nos ha enviado para que podamos probar está equipado con un procesador Intel Core Ultra 7 155H, un viejo conocido que ya hemos visto en otros portátiles modernos y que la verdad es que da un rendimiento excelente con sus 16 núcleos (6 P-Cores, 8 E-Cores y 2 LPE-Cores) y 22 hilos de proceso a una velocidad máxima de 4.8 GHz.
Por supuesto, este procesador incorpora gráfica integrada (una Intel Arc con 8 X-Cores a 2.25 GHz), pero en este caso el portátil de ASUS monta una RTX 4070 Laptop que aumentará la potencia gráfica del equipo en muchos enteros y, aun así, gracias a la tecnología Optimus nos servirá para que el portátil cambie a la gráfica integrada cuando esté en reposo o con tareas de baja demanda gráfica para reducir el consumo.
Este modelo tiene además 32 GB de memoria LPDDR5X a, ojo al dato, una velocidad de 7.467 MHz, que no es poca cosa. Para terminar con el hardware interno, monta un SSD PCIe 4.0 de 1 TB de capacidad.
Todo esto sirve para dar servicio a una excelente pantalla OLED (ROG Nebula Display) de 16 pulgadas y resolución 2560 x 1600, con 0,2 ms de tiempo de respuesta y una impresionante frecuencia de refresco de 240 Hz que, en este caso, está potenciada por la tecnología G-Sync de NVIDIA.
Por lo demás, lo habitual en portátiles de altas prestaciones de ASUS: WiFi 6, matriz de 3 micrófonos con cancelación de ruido por IA, altavoces con Dolby Atmos, Webcam 1080p, teclado retro iluminado, una conectividad que no está del todo mal y una enorme batería de 90 Wh para aumentar su autonomía, todo ello en un portátil de 1,85 Kg y apenas 1.64 cm de grosor (en su parte más gruesa).
Unboxing y análisis externo
Como es habitual en la mayoría de portátiles de ASUS, el ROG Zephyrus G16 viene embalado en una caja grande de color negro con forma de maleta en cuya parte exterior, aparte de motivos de la marca, solo encontramos el modelo de portátil que alberga en su interior a través de una pegatina.
En el interior encontramos dos pequeñas cajas, una con la fuente de alimentación y otra con el portátil, ambas de color negro sin detalles llamativos.
En la caja alargada encontramos el cable de corriente y la fuente de alimentación, en este caso de 200W de potencia máxima (20V y 10A).
Ojo que la fuente de alimentación de este portátil no lleva una clavija estándar.
En la otra caja, que se abre retirando la parte superior, tenemos el ROG Zephyrus G16 protegido de nuevo por una bolsa de plástico.
Bajo el equipo encontramos los habituales panfletos informativos y con información.
Ahora sí, aquí tenéis el ASUS ROG Zephyrus G16 2024; como podéis apreciar, su estética es bastante sobria, de color gris y con algunos adornos en color plateado.
Vamos a ver las demás partes del portátil por fuera, empezando por la zona inferior. Esta está dominada por una inmensa rejilla de ventilación que ocupa en torno al 60% de la superficie, pero también tenemos patas elevadoras engomadas y un par de rejillas adicionales tras las que se esconden los altavoces.
En la parte frontal no encontramos nada de nada, ni siquiera la habitual hendidura para facilitar la apertura de la pantalla.
En el lateral izquierdo tenemos el conector de alimentación, una salida de vídeo HDMI, un USB-C, un USB-A y el minijack combo para audio.
En el lateral opuesto lo que nos encontramos es el lector de tarjetas, otro USB-A y otro USB-C.
Finalmente, la parte trasera no tiene puertos de conexión, pero sí bajo el logo de Zephyrus tenemos los tres LED indicadores de estado habituales. Una ubicación un poco rara, la verdad, porque no están a la vista cuando estás usando el portátil.
Abrimos la tapa que despliega la pantalla, y lo primero que nos llama la atención es su estética, puesto que con los colores y con las rejillas para los altavoces se asemeja mucho a los MacBook Pro de Apple.
El teclado es compacto y sin pad numérico; la tecla ENTER es pequeña, estilo ANSI, pero por suerte ASUS ha colocado el botón de encendido aparte, encima del propio teclado, algo que agradecemos porque en muchos modelos parece un botón más y encima al lado del Supr, lo cual causa pulsaciones accidentales. En la parte izquierda tiene también cuatro botones adicionales que vienen con funciones específicas, pero que son programables mediante el software.
La tipografía de las teclas es relativamente grande (aunque podría serlo más) y está centrada, algo que fomentará una mejor iluminación y hace que se vea bien incluso sin la retroiluminación encendida.
El touchpad por su parte tiene una dimensiones considerables, y además está tan integrado (casi no tiene bordes) que da una sensación de muy buena calidad. Otro parecido con los MacBook Pro, por cierto.
En la zona de la pantalla, ya os habréis fijado en esos reflejos entre verdosos y azulados (depende del ángulo en el que incida la luz) típicos de las pantallas OLED que utiliza ASUS. En el centro tenemos un detalle con el nombre del modelo, y en la parte superior la webcam, micrófonos y sensor de luz, sin tapa de privacidad.
Visto el portátil por fuera, ha llegado la hora de encenderlo y ver qué tal funciona.
Probando el ASUS ROG Zephyrus G16
Como siempre, tras encender el equipo nos aparece el logo del fabricante, en este caso el emblema de ROG.
Es curioso que inicialmente sale el logo en blanco como podéis ver arriba, que es el que «tapa» el POST del equipo, pero luego cuando «carga» Windows nos sale el mismo logo pero en el habitual color rojo.
Inicialmente nos aparece el típico asistente para configurar Windows en el equipo, y tras unos minutos configurándolo estará listo para utilizar.
Como en casi todos los portátiles que nos llegan con pantalla OLED, tenemos que mencionar lo mismo: se ve impresionante, y ninguna foto que os pongamos aquí le hará justicia porque es algo que hay que ver en persona para poder apreciarlo. Eso sí, el acabado brillante dificulta la visión si tienes fuentes de luz detrás salvo que pongas el brillo a tope, algo que succiona bastante la batería del equipo.
El ASUS ROG Zephyrus G16 es un portátil que engaña bastante, porque tiene una estética sobria que como hemos mencionado se parece bastante a la de los MacBook Pro de Apple, pero luego en el interior alberga hardware TOP que hace que todo funcione muy fluido, desde la carga o instalación de programas hasta simplemente mover una carpeta, pasando por supuesto por los juegos. La sensación es de fluidez total, en parte por su potente hardware, en parte por la excelente pantalla con 240 Hz.
En cuanto a la autonomía de batería, utilizando el portátil dándole muchísima caña con benchmarks no ha empezado a quejarse hasta pasadas dos horas, por lo que podemos decir que podréis disfrutar de un par de horas de juegos sin tener que conectarlo sin demasiado problema. Con una utilización más racional (básicamente para trabajar), la batería nos ha aguantado unas 7 horas hasta que quedaba un 10% y Windows ya nos decía que teníamos que conectarlo a la corriente. Nada mal.
Para terminar de daros nuestras impresiones iniciales, hemos de decir dos cosas: la primera, es que el teclado nos gusta mucho, ya que es cómodo, rápido, preciso (las teclas no bailan) y la iluminación es excelente.
Lo segundo y último, es que nos parece una absoluta barbaridad que ASUS haya integrado este hardware y estas prestaciones en un portátil que es bastante liviano y cómo de llevar a cualquier parte. Vale, no es un portátil de poco más de 1 Kg, se acerca más a los 2 Kg, pero aun así para ser un portátil con pantalla de 16 pulgadas podemos considerarlo como bastante pero bastante ligero.
Ruido y temperatura
Una cosa que nos ha sorprendido bastante es que el portátil no es para nada ruidoso, ni siquiera sometido a máxima carga. A ver, cuando está dándolo todo algo de ruido hace, pero no es ni muy alto ni desagradable, por lo que nosotros le daríamos un sobresaliente en este aspecto.
En cuanto a la temperatura, tanto el procesador como la gráfica se mantienen a entre 45 y 55 grados de temperatura, y ambos llegan a los 85 y 87ºC respectivamente cuando le estás dando mucha caña. Es sorprendente que, aun así, el equipo ni haga mucho ruido ni sea desagradable de utilizar, ni siquiera si quieres estar en el sofá con el portátil encima de las rodillas. Sí que se nota bastante más calor en la parte superior del teclado, la más cercana a la pantalla, pero como normalmente no tienes las manos en esa zona pasará desapercibido.
Benchmarks sintéticos
Comenzamos a probar el equipo, pero antes de nada toca enseñaros la captura de CPU-Z de rigor para que podáis ver el procesador y la RAM que monta, aunque como suele suceder en todos los portátiles que usan LPDDR5X en combinación con un procesador Intel Core Ultra, no detecta bien la velocidad de la RAM.
En cuanto a las gráficas (la integrada y la dedicada), toda su información la podemos ver ayudándonos de GPU-Z.
Visto el hardware, ahora sí que comenzamos con los benchmarks, y como siempre gracias a CrystalDisk Mark vamos a ver qué tal rinde ese SSD PCIe 4.0 que monta el equipo.
Nada fuera de lo normal, y de hecho los valores son idénticos a los que hemos obtenido últimamente cuando hemos analizado portátiles de ASUS. Nada extraordinario, pero con estas velocidades conseguiremos tener un rendimiento excelente al transferir archivos o reducir los tiempos de carga de aplicaciones y juegos sin ninguna duda.
Ahora vamos a ver qué tal funciona la RAM, así como la caché del procesador utilizando Aida64.
Nuevamente, unos datos bastante habituales con memoria LPDDR5X, aunque la latencia es bastante alta, eso sí. Para verlo un poco mejor vamos a utilizar SuperPi, que obligará al procesador a calcular 32 millones de decimales del número Pi y almacenarlos en memoria en una tarea intensiva para ambos componentes.
Realmente, el resultado es el esperado, pero no deja de ser excelente. Ha tardado unos 35 segundos más que un portátil con un Core Ultra 9 y la misma RAM, así que como decíamos, el resultado es más o menos el esperado.
Pasemos ahora a medir el rendimiento más centrado en el procesador con Cinebench 2024, obligando al equipo a renderizar imágenes en tiempo real.
Bueno pues el resultado en este benchmark es impresionante, muy superior a lo obtenido con un Core Ultra 9 185H por mucho que sea sorprendente. Por ejemplo en la prueba de un solo núcleo ha obtenido 8 puntos más, mientras que en la multi hilo son 341 puntos los que le saca de ventaja.
Pasemos a una prueba más genérica con PCMark 10, que medirá el rendimiento global del portátil en tareas típicas de trabajo, como ofimática, videoconferencia o navegación por Internet.
Aquí nos encontramos con lo esperado, una puntuación muy buena en PCMark 10 que denota que podemos esperar una buena solvencia de este portátil en tareas típicas de trabajo.
Hablando de trabajo, veamos qué tal funciona este ROG Zephyrus G16 en Blender, tanto por CPU como por GPU.
La verdad es que viendo las puntuaciones de samples por minuto obtenidas en esta prueba podemos decir que este portátil ofrece un rendimiento extraordinario, ya que las puntuaciones son muy parecidas a las que obtiene un PC de sobremesa de gama media-alta. Ni tan mal, ¿no?
Como referencia, también hemos decidido hacerle una prueba de rendimiento en Octane Bench, y este ha sido el resultado:
Es el primer portátil al que sometemos a este benchmark, y por este motivo no tenemos ninguno con el que comparar para decidir si el resultado es bueno o malo, pero nos servirá de punto de partida para los próximos portátiles que vayamos analizando.
Nos queda ver el rendimiento 3D de este equipo, y para ello no hay nada mejor que la suite 3DMark, empezando por las pruebas Fire Strike que medirán el rendimiento utilizando la API gráfica DirectX 11 en diferentes resoluciones: 1080p, 1440p y 2160p.
Bueno pues el resultado obtenido aquí es más que excelente, y es que esta RTX 4070 Laptop que monta el ASUS ROG Zephyrus G16 ofrece un rendimiento sobresaliente y por lo tanto en juegos. Según la propia prueba, podemos esperar más de 95 FPS jugando a Battlefield V con todo al máximo y a resolución 1440p.
Pero veamos ahora qué pasa con la prueba Time Spy, que utiliza la más moderna API gráfica DirectX 12.
El resultado ha sido honestamente menor de lo que nos esperábamos, pero a pesar de ello sigue siendo bastante bueno. Esto mismo lo vamos a ver con el benchmark Speed Way de nueva generación.
Nos falta ver el rendimiento con trazado de rayos en tiempo real, y para ello tenemos la prueba Port Royal.
Como podéis apreciar, el resultado obtenido en todas las pruebas corresponde a un equipo de altas prestaciones listo para ofrecer una muy buena experiencia de juego, pero eso mismo lo vamos a comprobar por nosotros mismos a continuación en la siguiente sección.
¿Cómo van los juegos en el ASUS Zephyrus G16?
El ASUS ROG Zephyrus G16 es sin lugar a dudas un portátil gaming, y por ello solo podemos esperar una excelente experiencia en juegos. Por ese motivo hemos instalado algunos de los últimos y más exigentes juegos para ver qué tal se comporta. Nótese que todas las mediciones las hemos realizado utilizando la herramienta NVIDIA FrameView 1.5, a la resolución nativa del portátil (2560 x 1600) y con todos los ajustes gráficos al máximo, ya que quien se compre un portátil de esta gama y rango de precios seguramente aspire a jugar siempre con todo a tope.
Este ha sido el resultado, expresado en media de FPS.
Bueno, salvo en Cyberpunk 2077 con Ray Tracing (y DLSS 3.0) activo, el rendimiento en todos los juegos en los que hemos probado el portátil ha mantenido una media de FPS de más de 60, con notable rendimiento en títulos como Shadow of the Tomb Raider, Baldur’s Gate 3 o Doom Eternal. Pero más que el dato de la media de FPS, nos quedamos con que la experiencia de juego es muy buena porque todo se ve muy fluido, sin parones o «lagazos» y con tiempo reducido en las pantallas de carga.
Dicho de otra manera, este portátil se comporta fenomenal para jugar a tope a los últimos títulos que han llegado al mercado.
Conclusión y veredicto
La verdad es que ASUS nos ha sorprendido bastante con este nuevo ROG Zephyrus G16 2024, y no porque sea un portátil con hardware de última generación que ofrece un buen rendimiento, ya que eso es siempre lo esperable cuando te compras un portátil gaming, sino más bien porque han logrado justamente esto en un diseño bastante portable, elegante y apto para llevar tus juegos de un sitio a otro. Ah, y cuya batería te da unas dos horas de «vicio» a tope en cualquier parte sin tener que depender de enchufes, que lo consideramos todo un logro.
Es verdad que estamos ante un portátil relativamente caro (recordad que su precio parte de los 2.299€), pero el nivel de rendimiento que ofrece, su calidad, autonomía y portabilidad bien lo valen. Sí, si costara 500€ menos estaría bastante mejor, pero ya sabéis que la calidad se paga.
Por todo ello, creemos que este ASUS ROG Zephyrus G16 2024 se merece nuestro galardón de oro, destacando especialmente tanto su diseño como su rendimiento.