Probamos el Geekom Mini IT11, el mini PC perfecto para teletrabajo

Un mini PC barato puede darte lo que necesitas…relativamente. Los equipos realmente baratos al final terminan «arrastrándose» y resultan insuficientes en cuanto empiezas a instalarles las aplicaciones que necesitas y, además, a medio plazo comenzarán a hacer demasiado ruido y a calentarse mucho debido a la pobre calidad de sus componentes. Por este motivo, si realmente quieres comprar un mini PC para utilizarlo a diario y que no te deje tirado, vale la pena invertir un poquito más de dinero en comprar uno ya no que tenga un mejor hardware, sino que tenga una mejor calidad. Esto es precisamente lo que el Geekom Mini IT11 nos ofrece, al menos sobre el papel.

Geekom Mini IT11, especificaciones técnicas

La primera característica llamativa de este mini PC es que tiene formato Intel NUC, lo que significa que es realmente muy pequeño y que cabe en cualquier parte, hasta el punto de que se incluye un adaptador para poder instalarlo en el anclaje VESA de un monitor y que así quede totalmente escondido sobre el escritorio.

La segunda característica que llama la atención es su hardware, por supuesto; para empezar, este modelo cuenta con un procesador Intel Core i7-11390H a 10 nm, un procesador que proporciona 4 núcleos físicos y 8 hilos de proceso gracias a la tecnología HyperThreading a una velocidad turbo máxima de 5 GHz, aunque su frecuencia base es de 3,4 GHz. Este procesador tiene un TDP de hasta 35W e incorpora gráficos integrados Intel Iris Xe.

Este procesador viene acompañado de 16 GB de memoria RAM DDR4 a 3.200 MHz en dos módulos SO-DIMM de 8 GB cada uno, aunque se pueden sustituir para contar con hasta 64 GB de RAM. En cuanto al almacenamiento, de fábrica viene con un SSD PCIe 3.0 x4 de 512 GB, que no es el más moderno ni más rápido pero será más que de sobra para la finalidad de este equipo. Además, en el interior tenemos hueco para instalar un disco de 2,5″ adicional.

Finalmente, a destacar su amplia conectividad que incluye un puerto RJ45 Gigabit y WiFi 6 para red, así como Bluetooth 5.2 (de esta manera, si lo pones detrás del monitor solo tendrás que conectar el cable de alimentación y el de vídeo, ya que puedes conectar los periféricos por Bluetooth y la red por WiFi). También tiene 3 puertos USB 3.2 y dos USB 4, además del habitual minijack de audio y un lector de tarjetas SD.

Unboxing y análisis externo

El Geekom Mini IT11 viene embalado en una caja de cartón duro a todo lujo, pues nos da la impresión de estar ante un producto de categoría Premium. En la parte superior podemos ver el logo de la compañía y, en grande, el modelo del mini PC, mientras que en la parte posterior tenemos simplemente una etiqueta que enumera su hardware.

En los laterales, igual que hace Intel en sus NUC, tenemos unas imágenes que nos muestran precisamente los laterales del dispositivo, con todas sus conexiones y demás.

La caja se abre retirando la parte superior, y al hacerlo podemos ver directamente el mini PC protegido por un plástico y, a su vez, enclaustrado en una estructura de poliestireno expandido de color negro para proteger su integridad durante el transporte.

Comencemos viendo qué viene en la caja además del propio mini PC; para empezar, tenemos una «carta» dándonos las gracias por adquirir un producto de la marca y un escueto manual de instrucciones.

También se incluye un cable HDMI 2.0, el adaptador VESA para instalarlo en la parte trasera de un monitor como mencionamos antes, y los tornillos necesarios para anclar tanto el mini PC al anclaje VESA como un disco de 2.5″ que, como ya hemos mencionado, se puede instalar de forma adicional en el interior.

Para terminar con los accesorios, también tenemos una fuente de alimentación externa con su cable de corriente europeo. Esta fuente de alimentación es de 64.98W y tiene conector estándar.

Vamos a ver ahora sí el Mini IT11, que como mencionamos antes inicialmente viene protegido por un plástico que deberemos retirar.

Exteriormente, el Geekom Mini IT11 tiene un aspecto bastante elegante con colores gris y negro, pero toda la carcasa exterior está fabricada en plástico salvo las rejillas de ventilación.

Veamos todas sus partes: en el frontal tenemos, de izquierda a derecha, un LED indicador de estado, un puerto USB-C (USB4), un USB 3.2, minijack combo de 3.5 mm y el botón de encendido.

En la parte posterior, una rejilla para la salida del aire caliente domina toda la parte superior. Bajo ésta, de izquierda a derecha tenemos el conector de alimentación, mini DisplayPort, RJ45 Gigabit, dos USB 3.2, otro USB 4 y la salida HDMI 2.0.

En un de los laterales tenemos una rejilla de entrada de aire y el lector de tarjetas SD.

Mientras que en el otro, otra rejilla domina casi toda la superficie, además de un cierre de seguridad Kensington.

Vamos a la zona inferior, donde encontramos la misma estructura típica que en los NUC: cuatro patas con tornillos engomados que son los que tendremos que retirar para acceder al interior, además de cuatro perforaciones con tapas de goma que tendremos que utilizar si queremos usar el anclaje VESA.

Visto el dispositivo por fuera, vamos a ver qué esconde en su interior.

Así es el Geekom Mini IT11 por dentro

Tal y como acabamos de comentar, acceder al interior del dispositivo es tan sencillo como retirar los cuatro tornillos de las patas y tirar hacia fuera, dándonos acceso directamente al interior.

En la parte que retiramos, tenemos el hueco para instalar un dispositivo de almacenamiento SATA 3 ya preparado y conectado, así que simplemente es cuestión de insertarlo, atornillarlo y listo. Si os fijáis, en esta zona han instalado un thermal pad para refrigerar el SSD de forma pasiva.

En el interior del Mini IT11 tenemos un acceso directo y sencillo tanto a los dos módulos SO-DIMM de memoria RAM como al zócalo M.2, en el que viene un SSD Lexar NM620 PCIe 3.0 x4 ya instalado de fábrica (la RAM también es Lexar, por cierto, y está muy bien porque siempre preferimos contar con hardware de marca que OEM).

No hay acceso desde aquí al módulo WiFi + Bluetooth, que viene por la parte de abajo (de hecho podéis ver los cables de las antenas encima del SSD en la foto de arriba), y cambiarlo ya sería bastante más complicado, al igual que su ventilador blower, procesador, etc. Como este es un mini PC pensado para enchufar y funcionar no vamos a entrar en ello, así que terminamos aquí esta sección.

Pruebas de rendimiento del Geekom Mini IT11

Realmente, para hacer funcionar este mini PC tan solo necesitaremos conectarlo a la toma de corriente y a un monitor, pues como hemos mencionado antes, gracias a la WiFi podemos tener conexión a Internet y gracias al Bluetooth podemos conectar ratón y teclado inalámbricos, siendo su utilización más cómoda y dejándonos un aspecto estético en el escritorio más limpio y sobrio.

Sin embargo, como el Geekom Mini IT11 viene con Windows 11 Pro instalado de fábrica, para la configuración inicial sí que tendremos que conectarle periféricos por USB antes de que se nos de la oportunidad de configurar otros inalámbricos; tenedlo en cuenta.

Dicho esto, comencemos con las pruebas, y como siempre lo hacemos mostrándoos una captura de CPU-Z que nos va a enseñar el hardware que monta.

Como podéis ver, CPU-Z no es capaz de detectar el modelo concreto de la CPU, y es algo raro porque ya tiene un par de años… en todo caso ya sabéis que es un Intel Core i7-11390H de 4 núcleos y 8 hilos que pueden llegar a 5 GHz en su velocidad turbo máxima. También podemos ver la memoria RAM, en total 16 GB DDR4 a 3.200 MHz.

Por otro lado, esto es lo que GPU-Z nos dice sobre la gráfica integrada.

En este caso sí que la detecta perfectamente y nos muestra la Iris Xe integrada que llega a funcionar hasta a 1.400 MHz, una gráfica que obviamente no nos va a dar para jugar a títulos triple A pero que puede resultar bastante notoria para juegos sencillos, si bien es cierto que este mini PC no está diseñado para jugar.

Ruido y temperatura

El mayor problema que tienen los mini PC, y muy especialmente aquellos con un hardware potente como es este caso, es que se calientan bastante y debido a su pequeño tamaño no se pueden integrar soluciones térmicas demasiado buenas. En el caso de este Geekom Mini IT11, lleva un disipador con ventilador de tipo blower que refrigera única y exclusivamente el procesador, es decir, no tenemos disipación para el resto de elementos salvo, como hemos visto al ver el interior, un thermal pad para el SSD.

No obstante, sí que podemos deciros que el equipo no nos ha resultado para nada ruidoso, ni siquiera sometido a máxima carga; sí es cierto que el ventilador se escucha cuando le estamos «dando caña», pero salvo que tengas la habitación en completo silencio ni te vas a enterar.

En cuanto a la temperatura, teniendo 23ºC en la habitación donde lo hemos estado probando, el procesador se mantiene a unos 45-50ºC en reposo y alcanza los 80ºC sometido a carga, una temperatura que es bastante aceptable pues está muy lejos del límite; no obstante, habría que ver qué nivel de ruido y temperatura presenta el equipo a largo plazo, por ejemplo tras un año de uso diario.

Benchmarks sintéticos

Vamos a empezar con las pruebas, y como siempre procedemos lo primero de todo a medir el desempeño del SSD con CrystalDisk Mark.

Ya hemos visto antes que el SSD es PCIe 3.0, pero aun así esos más de 3.400 MB/s de lectura y más de 2.600 MB/s de escritura resultan ser excelentes, haciendo que todo funcione muy rápido y de forma ágil, así que nada que objetar.

Continuamos viendo el rendimiento de la memoria RAM, y para ello utilizamos Aida64.

El rendimiento que nos muestra este benchmark es honestamente excelente para tratarse de una memoria RAM DDR4 a 3.200 MHz, y es que de hecho está casi al mismo nivel que muchas memorias SO-DIMM LPDDR5.

Pero una cosa es un benchmark y otra una situación real, así que para acercarnos más a esta vamos a someter al Mini IT11 a una prueba de SuperPi, donde obligaremos al procesador a calcular 32 millones de decimales del número Pi en una operación intensiva tanto para el procesador como para la RAM.

El resultado es sobresaliente, casi al nivel de muchas memorias DDR5 de sobremesa, en parte gracias a que el procesador Core i7 de este mini PC tiene un desempeño muy pero que muy bueno.

Y hablando de procesador, es hora de ver qué tal «tira» si le pedimos que nos renderice escenas en 3D con Cinebench R23.

Aquí nos topamos con la otra cara de la moneda, y es que el rendimiento que nos ofrece este Core i7-11390H se queda un poquito corto para renderizado 3D. Para que os hagáis una idea, la puntuación obtenida tanto en el rendimiento multi núcleo como en mono núcleo ha sido inferior del que podemos obtener con un portátil equipado con un Core i7-1355U de bajo consumo.

Vale, está claro que este no es un mini PC diseñado para el render 3D, pero veamos qué rendimiento global nos ofrece con PCMark 10, un benchmark que va a medir el desempeño de todo el equipo de forma global en situaciones cotidianas (videoconferencia, navegación, ofimática, etc.), donde intervienen todos los elementos de hardware que lo componen.

Estos prácticamente 4.800 puntos en PCMark 10 nos vienen a decir que el desempeño del Mini IT11 es notable o notable alto, dejándonos claro que se trata de un mini PC excelente para tareas de teletrabajo.

Para terminar, y aunque hemos repetido varias veces que este mini PC con gráfica integrada no está pensado para jugar, vamos a ver qué resultado obtenemos en 3DMark, comenzando por Fire Strike.

Con este resultado, está bastante claro que este equipo no es para jugar, probablemente ni tan siquiera a resolución 1080p y ajustes en bajo. Pero veamos qué dice Time Spy, que realiza una prueba similar pero utilizando la API gráfica DirectX 12.

Viendo estos resultados, desde luego que este PC no está pensado para ofrecer un buen rendimiento en juegos y, sin embargo, sí que podemos esperar un excelente rendimiento en tareas multimedia.

Conclusión y veredicto

Si bien es cierto que no estamos ante el mini PC más potente ni el más barato del mercado, el Geekom Mini IT11 nos ha mostrado un rendimiento bastante sólido y notable en todas las pruebas a las que lo hemos sometido, dejándonos claro que si pretendes utilizarlo para trabajar con las tareas cotidianas que esto supone (ofimática, navegación, videoconferencia, multimedia, etc.) vas a tener equipo para rato.

Bajo nuestro punto de vista y tras haberlo estado probando, este mini PC le da sopas con ondas a esos mini PC baratos que puedes comprar por apenas 200€ en todos los ámbitos, desde la calidad hasta la sonoridad, pasando por el rendimiento. En resumidas cuentas, creemos que es una de las mejores opciones que hay ahora mismo en el mercado si estás buscando un mini PC decente y que no te cueste un ojo de la cara para trabajar desde casa.

Por todo ello, creemos que se merece nuestro galardón de Oro, así como nuestra recomendación por su relación prestaciones / precio.