La familia Raven de Silverstone es sin lugar a dudas una de las más llamativas dentro del mundo del hardware. Odiadas o deseadas, de lo que no cabe duda es de que marcaron un antes y un después en la historia de las cajas de PC por su innovador diseño con el montaje de la placa base girado 90 grados, de manera que los conectores quedan hacia arriba, enfocándose en un diseño de flujo de aire que va desde abajo hacia arriba y fomentando así una refrigeración lo más efectiva posible.
Hace muy poco, Silverstone ha presentado el nuevo integrante de esta familia, la Raven RVX01B que se presenta como el modelo más barato de la familia y que está orientado a sistemas de gama media. No obstante que esto sea así no quiere decir que el fabricante haya perdido la esencia de la familia Raven, y por ello la instalación de componentes continua siendo girada 90 grados y con la refrigeración desde abajo hacia arriba. De ésta manera, Silverstone incorpora tres ventiladores Air Penetrator en el suelo de la caja, cada uno de ellos enfocando su flujo de aire hacia un componente concreto (tarjeta gráfica, disipador de procesador y discos duros), obteniendo con ello un nivel de refrigeración que una caja «convencional» no puede proporcionar.
Cabe destacar que en este caso, la Raven RVX01B que nos ha enviado el fabricante para enseñaros nuestro análisis es el modelo en negro y rojo con ventana, y como veremos en seguida cuando os hablemos de sus características técnicas, éste modelo concreto tiene una limitación con respecto al tamaño del disipador de procesador pues la ventana reduce la altura posible en éste.
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS.
Tomadas de la página web del fabricante.
Como podéis ver, en este modelo de Silverstone Raven tenemos ciertas limitaciones con respecto a anteriores modelos en los que se podía instalar prácticamente cualquier hardware. Para comenzar estamos limitados a solo 4 unidades de almacenamiento, ya sean de 3.5 ó 2.5 pulgadas o cualquier combinación de ambos. La caja está preparada para instalar en su interior placas base de como máximo tamaño ATX pero limitadas a 12×11 pulgadas, así que las ATX más grandes no tendrán cabida en esta caja.
También nos vemos limitados en cuanto a la altura del disipador, que ha de ser como máximo de 162 mm de altura en el modelo sin ventana y de 159 mm en el que tiene ventana, que es precisamente el que analizamos en el día de hoy. También en lo relativo a la tarjeta gráfica, que ha de ser de máximo 13.7 pulgadas de longitud (34.8 centímetros) por lo que cualquier gráfica actual cabrá sin problemas, pero ojo a la altura de ésta pues estaremos limitados a 5.91 pulgadas (15.01 centímetros) si no instalamos las unidades de almacenamiento de la zona inferior, o 4.92 pulgadas (12,5 cm) si utilizamos éstos huecos.
Por lo demás, cabe mencionar que Silverstone incluye de fábrica tres ventiladores Air Penetrator de 120 mm en el suelo de la caja y que, como hemos explicado antes, orientan su flujo de aire a tarjeta gráfica, disipador de procesador y discos duros. Además la caja tiene espacio para instalar dos ventiladores de 120 mm adicionales, uno en el frontal y otro en la zona superior, siendo éste último bastante recomendable para completar el flujo de aire de la caja mediante el que el aire fresco entra desde abajo y el aire caliente se expulsa por arriba. El frontal, sinceramente, es bastante innecesario salvo que utilicemos una tarjeta gráfica con disipador de tipo blower, en cuyo casi sí sería útil pues enfocará, como veremos más adelante, directamente al ventilador de ésta.
ANÁLISIS EXTERNO.
Exteriormente nos encontramos con la caja habitual que emplea casi siempre este fabricante, de cartón duro de color neutro grabada con color negro. En el exterior encontramos una imagen frontal de la caja, destacando el modelo y la familia Raven, claro, y en el lateral las características técnicas y el modelo concreto de la misma (pues como habéis podido ver antes, hay varios modelos diferentes dependiendo del color y si llevan o no ventana).
Vamos a comenzar como siempre con los accesorios. En este caso Silverstone incluye su habitual manual de instrucciones, muy completo, una bolsita con tornillería y las dos bandejas para discos duros, ambas metálicas y compatibles con discos de 2.5 y 3.5 pulgadas. En la sección del montaje veremos con más detalle estas bandejas.
Aquí tenéis ya fuera de su embalaje la Silverstone Raven RVX01.
Vamos a ver el frontal. En éste únicamente encontramos el logo de Raven en relieve y lo que evidentemente serán los LEDs de estado del sistema. También unas pequeñas entradas de aire en los laterales de la zona central y baja, que servirán si decidimos instalar el ventilador frontal.
En este caso y como os hemos contado al principio, Silverstone nos ha enviado el modelo de Raven RVX01 con ventana. Pero a diferencia de cualquier otra caja, en las Raven la ventana está en el lado derecho de la torre y no en el izquierdo.
La parte trasera, también a diferencia de cualquier otro tipo de caja, está casi completamente vacío a excepción de una rejilla para el ventilador de la fuente de alimentación y, en la zona superior, una gran abertura por la que saldrán todos los cables de conexión del sistema. Eso sí, desde esta parte podemos acceder para sacar y limpiar el gran filtro inferior que servirá para que no le entre suciedad a los tres ventiladores inferiores.
Nos movemos a la zona superior, donde Silverstone ha instalado una gran rejilla que cubre casi toda la superficie y la ha pintado de rojo en este caso. Esto debe ser así y es importante no taparla, pues es el escape de aire caliente de la caja ya que, recordemos, el flujo de aire va desde abajo hacia arriba y no desde el frontal hasta la parte trasera como es habitual.
En la parte delantera de esta zona superior es donde Silverstone ha instalado los dos puertos USB 3.0 de la caja (no hay USB 2.0), los dos minijacks de audio y los botones de encendido y reset.
Nos movemos a la parte de abajo, dominada claro está por esos tres ventiladores Air Penetrator de 120 mm de diámetro y el gran filtro anti polvo extraíble. También destacan cuatro grandes patas con una inserción de goma anti deslizante.
ANÁLISIS INTERNO.
Comenzamos desnudando la caja retirando la cubierta superior, y para ello solo hay que quitar dos tornillos y tirar de ella hacia atrás. Es necesario quitar ésta cubierta antes de nada pues bajo ella están entre otras cosas los tornillos que nos permitirán quitar las tapas laterales.
Ésto nos permite ver lo que habitualmente sería la parte trasera de una caja normal y que en las Silverstone Raven queda hacia arriba. Aquí tenemos el hueco para la fuente de alimentación, el espacio para el escudo I/O de la placa base, rejilla para ventilador de 120/92/82 mm y los zócalos PCI. Cabe mencionar que Silverstone solo ha instalado un embellecedor reutilizable aquí, dejando seis de las siete ranuras PCI con simples planchas de metal que hay que romper para utilizar. Nunca me gusta ver estas cosas en una caja «buena».
Ahora ya podemos retirar los dos laterales y tener acceso al interior.
Vamos a verla por partes, y comenzamos por el hueco para dos discos duros en la zona inferior derecha. Aquí es donde instalaremos las dos bandejas que el fabricante incluía con los accesorios.
También en la zona baja pero más a la izquierda tenemos unas incisiones en las que podremos atornillar dos discos duros adicionales, reduciendo eso sí la altura de la tarjeta gráfica que podremos instalar pues se instalan por la cara de dentro.
Aquí podéis ver dos de los tres ventiladores instalados en el suelo de la caja (imposible sacar los tres con la distancia al techo y el enfoque de la cámara).
El espacio que queda por la parte trasera de la placa base es más bien escaso por no decir casi inexistente, pues el propio lateral de la caja va encajado en esa rendija que se ve.
Éste es el interior de la rejilla frontal, tras la que podremos instalar un ventilador de 120 mm como dice el fabricante, pero además de 92 y 80 mm que no lo mencionan.
De hecho podemos retirar el panel frontal, que nos da acceso al punto de montaje del ventilador, así como al panel de conexiones superior.
Para finalizar con el análisis interno, ya solo queda ver qué conexiones trae la caja. Además del solitario conector USB 3.0 interno, ya que carece de USB 2.0, tenemos el conector HD Audio habitual y los conectores internos. Una cosa que me ha gustado mucho es que por primera vez veo que un fabricante ha unido y colocado estos conectores de forma que podamos conectarlos casi directamente en cualquier placa base moderna, sin tener que ir uno a uno mirando dónde va cada cual.
MONTAJE.
Comenzamos el montaje instalando la placa base, en este caso de formato ATX estándar. Lo hacemos con el disipador ya montado, aunque dado que ésta Raven tiene un gran hueco en la parte trasera para poder manipular el backplate podríamos instalar la placa y posteriormente el disipador sin ningún problema.
En este caso hemos empleado un enorme Noctua NH-D14 para nuestro sistema de pruebas, un disipador de 160 mm de altura que en teoría no debería caber en la caja, pero según pudimos comprobar entra sin problemas. Justito, pero cabe.
Además no interfiere con ninguno de los otros componentes, aunque como se puede ver en la siguiente imagen quedará muy pegado a la fuente de alimentación.
Una vez instalada la placa base y visto el poco espacio de maniobra que tendremos cuando comencemos a llenar la caja con los demás componentes, decidimos conectar desde ese momento todas las conexiones internas de la caja, incluyendo los tres ventiladores. Aquí nos encontramos con un problema grave, y es que los cables prácticamente no llegan a la placa base a no ser que todos los conectores se encuentren en la zona derecha de ésta, la que queda en la parte baja de esta Raven. Por ello, nos vimos obligados a utilizar extensores. Silverstone debería plantearse o bien poner cables más largos en estos tres ventiladores, o bien incluir extensores entre sus accesorios.
Conectado todo, procedemos a la instalación de las unidades de almacenamiento. Son necesarios tornillos y herramientas pues tanto las unidades de 3.5 como las de 2.5 pulgadas tienen que atornillarse a las bandejas metálicas. En nuestro caso hemos utilizado una unidad de cada, por lo que decidimos emplear las dos bahías con las que cuenta la caja y no los anclajes laterales que mostramos al principio.
El siguiente paso es la fuente de alimentación, que queda boca arriba y con el ventilador hacia la parte trasera de la caja. Os recomendamos encarecidamente que aunque utilicéis una fuente 100% modular como en nuestro caso, conectéis los cables antes de atornillar la fuente pues una vez atornillada el espacio que queda para poder meter la mano y conectarlos es muy escaso.
Instalada la fuente de alimentación ya queda muy poco trabajo por delante. El siguiente paso, la tarjeta gráfica que, como veis, queda en vertical, algo que me gusta mucho pues ejercerá mucha menor presión sobre el zócalo PCI-Express.
Conectamos todo y ya tenemos nuestro sistema en el interior de la Silverstone Raven RVX01. Como podéis ver, la instalación queda bastante limpia de cables (gracias en parte a que los cables de nuestra fuente modular son 100% planos, pues varios los canalizamos por detrás en su escaso espacio). El único amasijo de cables que queda, y no hay más remedio, es justo entre la fuente de alimentación y las bahías para discos duros.
No obstante una vez cerrada la tapa este amasijo no se ve casi nada, y queda con una estética bastante decente.
TESTEO.
Conectamos el equipo y comenzamos a probarlo. Tal y como adelantábamos al ver esta zona en el análisis externo, el frontal de la Raven RVX01 se ilumina al estar encendida la caja, pero no como LEDs de estado (que están en la zona superior) sino como elemento meramente decorativo, emulando los ojos (o las alas) del ave rapaz que hace honor al nombre de la familia.
Para las pruebas de rendimiento térmico hemos utilizado exactamente la misma configuración que hasta ahora teníamos montada en una Cooler Master Cosmos S, con los ventiladores que traen ambas cajas de fábrica. Éste ha sido el resultado de rendimiento térmico, expresado en grados centígrados (temperatura máxima medida) en CPU, GPU y discos duros incluyendo el SSD. Para estresar los componentes hemos utilizado Prime95, Furmark y Aida64 respectivamente.
Salta a la vista que el diseño de flujo de aire con presión positiva de la Raven de Silverstone tiene un efecto visual en las temperaturas, reduciendo notablemente la temperatura de funcionamiento de todos los componentes (excepto en este caso el SSD que tampoco es que se caliente mucho).
CONCLUSIÓN.
Al principio del análisis comentaba que en cuanto al diseño de las Raven hay personas que lo adoran y otras que lo odian. Me considero de los que lo adoran, pues aunque la instalación de componentes es un tanto complicada en comparación con otras cajas, el resultado tanto estético como funcional es más que bueno, especialmente en el aspecto de rendimiento térmico. Sin duda Silverstone sigue sabiendo hacer bien su trabajo y ésta Raven RVX01 es una prueba de ello.
PROS:
- Excelente rendimiento térmico.
- Tres ventiladores Air Penetrator incluidos de fábrica.
- Buena calidad de materiales.
- Compatible con disipadores grandes.
- Compatible casi con cualquier gráfica.
- Gran ventana lateral que permite ver el interior.
- Diseño sobrio y minimalista a la vez que agresivo.
- Precio (unos 70 euros).
CONTRAS:
- La longitud de los cables de los ventiladores es escasa. Se deberían de incluir extensores en los accesorios.
- Resulta un tanto incómodo tener que quitar la cubierta superior para conectar o desconectar cosas en el panel de la placa base.
- Es bastante rumorosa. No estaría de más un rehobús de fábrica para complementar los cables cortos.
- Espacio para solo 4 unidades de almacenamiento.
Por ello, ésta Silverstone Raven RVX01 se merece nuestro galardón de Oro y nuestra recomendación por su excelente rendimiento y su relación calidad / precio.